capitulo 17. Pascuala.

Pascuala se levantó del sofá con lentitud debido a su peso. Había llegado Martín , el hijo de su marido y aunque le pesara debía atenderlo.Sabia que gracias a Martín ella se había casado con Fernando. Y Fernando le daba todo lo que ella nunca sonó tener.

Una hermosa casa y hasta una empleada que limpiaba todos los días. Pascuala amaba la vida que Fernando le había dado.

De empleada doméstica paso a ser esposa. Ella cuidaba bien a Martín , aprendió a cuidar chicos en su casa antes de escaparse. Se escapó cuando su madre la descubrió en la cama con su padre.

Si. Pascuala fue abusada primero desde que tenía ocho años por su padre y luego cuando cumplió diez también por su hermano mayor. La primera vez, Pascuala sufrió mucho, sangraba por todos lados y apenas podía caminar.

Su madre había ido a cuidar a su abuela enferma. Ella cuidaba a sus hermanos pequeños. Cuando sucedió Pascuala gritaba y lloraba y su padre le dió semejante paliza para que deje de Llorar. Y después le trajo muchos dulces , chocolates y caramelos.

Y Pascuala se acostumbró. Ya no le dolía y sabía que recibiría recompensas. Tortas, dulces y alfajores.

Con la comida ella tapaba todo el dolor físico. Dolor espiritual nunca tuvo. Para ella estaba bien.

Entonces empezó a engordar y no paró nunca. Pascuala nunca fue a la escuela, aprendió a leer cuando fue a la iglesia a realizar el catecismo. Una monjita le enseño las letras y le habló de Dios.

Nunca entendió Pascuala el concepto de Dios y porque era tan importante un niño nacido en Jerusalén , hijo de un carpintero al que mataron en una cruz.

Para ella era un cuento lindo y a ella le gustaban los cuentos.

A sus hermanitos su mamá le mando a la escuela. Un día le dijo a su madre:

_ Dice la monja que debo ir a la escuela--. Pero su mamá le dijo que ella no tenía cabeza. Que nació sietemesina.

Ella si tenía cabeza. Se miraba siempre en el espejo. Pero no discutió con su madre. Ella se ponía furiosa cuando discutía.

Pascuala entonces cuidaba a sus hermanos y limpiaba la casa. Su mamá siempre estaba embarazada. Los niños nacían uno tras otro. Primero tenía un hermano mayor que hacía changas y dos hermanos pequeños.

Luego fueron tres hermanos. En esa época su hermano mayor perdió el trabajo y vino a la casa. Ella tenía unos diez años. Su hermano peleó con su papá. Y su padre se enojó mucho y entonces le mandó al corral.

Ella sabía que quería su padre allá. Cómo siempre hizo caso , pero cuando él estaba sobre ella , Pascuala vió a su hermano escondido mirándolos.

Cuando su hermano quiso lo mismo, Pascuala le dijo:

_ ¡Papá se enojara! -

_ No es tu padre imbécil. -- le dijo su hermano.--Ni mío tampoco. Es solo el macho de Benicia. -

_ ¿Quien es esa? - dijo Pascuala.

_ La mujer que es tu mamá , la gitana. La que me robo a mí de mis verdaderos padres. No te acuerdas de nada de cuando éramos pequeños? -

_ No. Solamente me acuerdo cuando Papá me lastimó. - dijo Pascuala.

_ Ya te dije que no es tu padre! - dijo su hermano enojado.

Y ahí su hermano que parece que no era su hermano estuvo con ella. Y luego se fue a buscar un trabajo.

Pascuala cree que fue su hermano que le contó a su mamá lo que hacía su padre. Porque pronto su madre les encontró y le echo de la casa. Su hermano venía del trabajo cuando la encontró llorando.

Le dió todo el dinero que había ganado y le dijo que vaya con las monjas del convento. Fue entonces que Pascuala tomó un colectivo y bajo justo frente al convento.

Fue su mejor época. Las monjas le cuidaron y ante cada pregunta solo tenía que decir lo que su hermano le dijo: "no sé". "No me acuerdo". Allí en el convento aprendió a limpiar, lavar ropa, cocinar, leer, escribir y hacer cuentas.

Vivió tanto tiempo con las monjas que ya no recordaba la cara de su padre ni de su madre.

_¿Cuántos años tienes Pascuala? - -No sé.

_¿ Que día es tu cumpleaños?-- No me acuerdo.

Esa fue su vida. De toda su vida en el convento únicamente recordaba a la novicia Francisca que un día la beso en la boca y le hizo estremecer. Pero la superiora un día le dijo: Ya eres mayor. Te conseguiré un trabajo. Y es así como le llevó a la casa del señor Fernando.

Cuando llegó a la casa del señor Fernando cocinaba y cuidaba a su hijo que en esa época era pequeño y lloraba mucho. La abuela del niño había muerto y su abuelo y su padre lo cuidaban hasta que ella llegó. Un día , aún estaba asustada de cometer una torpeza, tiró sin querer una bolsa de huevos al suelo. El pequeño Martín le ayudó a sacar todas las cáscaras y pudo hacer una tortilla que a todos les gustaba mucho.

El señor un día le dijo :

_ Quieres casarte conmigo y ser la madre de Martín?.

_ Bueno. - le contestó Pascuala.

_ Okey. Entonces nos casaremos y quizás podamos darle un hermano a Martín. Que dices ? -

_ Bueno- repitió Pascuala.

Se casaron en un registro. La madre superiora vino al casamiento a traer su documento. Las monjas le habían inventado un apellido y ahora tenía fecha de nacimiento.

Al principio el señor Fernando quería tener un hijo y le buscaba cada noche en la cama. Pero cuando se enteró que ella no podía embarazarse dejo de molestarla. Sí. Para Pascuala eso era una molestia. Leia y leía libros de amor y no entendía que podía ser más hermoso. Lo único bello era comer y ver novelas y eso ella podía hacer en esta casa.

Esa noche cuando comían Martín le dijo a su papá:

_ Sabes que encontré a Bella en Londrina.?

_ Que dices? Donde la viste ?

_En el subte que partía. Pero ella era enfermera, trabajará en algún hospital de la ciudad..

_ Es cierto ¡ La buscaremos hijo. !

_ Que bien - dijo Pascuala.¿ Quieren comer helado?.- Y Pascuala se levantó a buscar el postre.

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