Presentación. Sasha.

Princesa, acuérdate que hoy es la reunión para que conozcas a nuestro nuevo socio, mi ahijado, el hijo de tu padrino Kevin, tú lo conoces, pero hace años que no lo ves, tú tomarás el control de la empresa a su lado y confío ciegamente en ti mi princesa. También es la reunión con los tailandeses, Japoneses, y Árabes para cerrar el negocio multimillonario.

Sasha: Claro que sí papito lindo yo estaré allí a la hora pactada, a dios besos te amo mi princesa, adiós mamá te amo mi reina.

Candy: Adiós, mi muñeca hermosa cuídate y que te vaya muy bien, suerte.

Sasha: Gracias mamita, pero sabes que no es suerte, es dedicación y trabajo a y la maravillosa educación que me dieron.

Leonardo: Espera mi princesa vas a salir así, hoy hay reuniones importantes.

Sasha: Lo sé mi príncipe, pero primero voy a ir a la fundación y al hospital de niños con cáncer y sabes que no me gusta que allí me traten diferente por ser quien soy, yo traigo un cambio de ropa en mi maleta, sabes que la moda y yo somos una sola, no por nada soy diseñadora y modelo entre otras cositas ja, ja, ja.

Candy: Inteligente, audaz y multifacética como su madre, creída y orgullosa como su padre.

Sasha: No me culpen, saque la belleza de ambos, y además soy una Ferrer, no es cualquier cosa.

Leonardo: Ja, ja, ja Mejor apúrate y ve señorita modesta.

Les doy el beso y abrazo diario a mis padres y me voy. Se preguntarán quien soy, pues me presento Soy Sasha Ferrer, uno de los mellizos, ¿que como soy en apariencia? bueno, resumida en una sola palabra, una diosa del Olimpo imagínense una ¿ya?, pues así soy, yo salí a mi abuela Masha, Rubia, cabello liso y largo, ojos azul cielo, cejas marrones, labios carnosos y rosados, piel blanca mido 1.78 tengo un cuerpo perfecto no me falta ni me sobra nada y tengo curvas perfectas.

Sasha Ferrer. ( 21 años.)

Mi personalidad, bueno conocen a mi madre Candy, soy exactamente todo lo contrario, saque el carácter de mi padre Leonardo, pero más fuerte, soy una diva, soy consentida, caprichosa, terca, decidida, inteligente, orgullosa, imponente, centrada, confiada, despiadada, calculadora si lo amerita, fría si de negocios se trata, amable, dulce y cariñosa si estoy con los que amo. Desde pequeños, papá nos enseñó a respetar a todos por igual, sin importar nada, pero a obedecer solo a ellos que son mis padres, al menos que me impongan algo que vaya en contra de mis principios e ideales, todos crecimos sabiendo la historia de mamá y es lamentable no entiendo nada por qué aguanto tanto ni siquiera lo poco que le hizo papá lo debió aguantar, pero ella tuvo esa crianza, yo no, yo soy Sasha Ferrer y no nací para obedecer.

Soy la heredera de papá y mamá en cuanto a la mafia debería ser mi hermano, pero como él no quiere responsabilidad me tocó a mí y yo encantada, en lo que si me parezco a mamá es que saque sus habilidades, soy una excelente hacker, sé hablar muchos idiomas, estudié negocios y administración, soy modelo, sé disparar, soy buena con los cuchillos, peleo como hombre y en fin no termino hoy si sigo. En los negocios soy un crack bueno, ya se hacen una idea de todo lo que le espera al idiota egocéntrico de Dante, tengo años sin verlo, pero no lo tolero, se cree mejor que todos y me cuentan que es un imbécil prepotente y para colmo tengo que trabajar con él según escuché dice que soy una princesa mimada que lo único que sé hacer es pintarme las uñas y comprar, pobre no sabe con quién se mete ese idiota.

Empiezo mi día yendo a la fundación de niños huérfanos y luego al hospital de niños con cáncer, tengo más fundaciones, pero hoy solo debo ir a esas, me vestí como siempre cuando voy a esos lugares para que no me traten diferente sino como a una voluntaria más, una camisa manga larga de vestir abotonada hasta el cuello, unos vaqueros anchos, unos lentes grandes, un chongo y nada de maquillaje aunque no necesito mucho.

Sasha vestida para ir a las fundaciones.

Termino de hacer mis cosas y salgo a las nueve para la empresa, allá me cambio, mi padre dijo que en mi oficina había una habitación, llego y me encuentro con una chica bonita que según me cuenta tiene una entrevista hoy para asistente y como íbamos en el ascensor me contó, pero la pobre recibió creo que una mala noticia, salió corriendo y se fue. Pobre chica, yo subí al piso de presidencia y venían dos hombres muy guapos, uno me habló con prepotencia y entendí quien era Dante Ferrer, el hijo de la mamba negra, o sea cascabelito ja, ja, ja, así le digo y así lo apodaré para hacerle rabiar.

Viene hablando con otro chico guapo de mí que soy una consentida que seguro, él tendrá que trabajar para los dos y que en mi oficina pondrá un ser de pinturas de uña y maquillaje y hasta una que otra muñeca para que yo juegue por qué debo ser la típica niña de papi que solo está por capricho en la empresa.

Pienso, hay imbécil lo que te espera. De pronto me ve saliendo del ascensor y me confunde con la asistente que vendría hoy.

Dante Mancini: Qué horas las tuyas para la entrevista, pero no tengo tiempo para eso, acompáñame para decirte lo que tienes que hacer, te pondré a prueba hoy y arréglese mejor que eso es contaminación visual.

Hay ese estúpido, pero ya verá el muy imbécil. Ja, ja, ja le seguiré la corriente.

Sasha: Está bien señor lo que usted diga. Pasamos a su oficina y me abarrota de trabajo, que prepare café, que les traiga desayuno, que le busque un traje, que es para mañana, que vaya a su casa y le traiga algo que olvidó, que cancele unas citas, que le mandé arreglos de flores exactamente iguales a tres mujeres diferentes y diez mil cosas más.

Dante: Ah y señorita revise todos estos contratos, yo mismo los hice, deben estar perfectos, pero si no vuélvalos a hacer aunque no creo que estén mal y llame a un técnico que las computadoras tienen un virus y el sistema está fallando.

Salgo de la oficina a la que él me indicó que era la mía.

Sasha: Permiso señor, ¿se le ofrece alguna otra cosa?.

Dante: Sí que haga algo para no verse tan fea.

Salgo de la oficina muerta de rabia y termino de hacer todo, estoy muy cansada, cuando entro a llevarle más café que pidió y un desayuno escucho que le dice al otro chico.

Dante: No te lo dije, la niña de papi no ha llegado que impuntual e irresponsable pobre de mí, esto será un infierno con esa hueca aquí. Salgo de la oficina riéndome por dentro, luego de unas horas llega mi padre seguro él lo llamo y le dijo que no había llegado, mi padre se puso a buscarme, ya que yo le había dicho hace horas que estaba llegando, él me llamo, pero no conteste quería terminar todo el trabajo que si no fuera yo terminaría en tres días, termine y me dirijo a la oficina en ese momento mi papá me llamó y le contesté.

Leonardo: Aló hija por fin dónde estás en un rato es la otra reunión que te dije por qué no has llegado tú no eres así mi princesa Leonardo tiene horas esperando y nada que apareces que va a pensar él. Y aparte que pasa contigo no te importa el bienestar de la empresa.

Sasha: Aló papito cálmate ya estoy entrando a la oficina es que estaba haciendo cosas por la empresa, justamente sabes qué irresponsable, no soy, hablamos cuando entre. Colgué y mi papá decía Aló, Aló, ¡Sasha!. Toque y cuando me dijeron entré y mi padre no estaba pendiente, ya que recibió una llamada y se hizo a un lado para contestar. Al hablar mi papá me reconoció, pero no me interrumpió.

Sasha: Señor Mancini, ya terminé de hacer todo, fui a su casa, busqué las llaves que dejó, busque su traje para mañana, limpie el despacho como me dijo, le envié los arreglos a las tres mujeres como lo pidió, saque las cien copias que me dio dos veces cada una tal como lo pidió.

Suspiré y seguí.

Sasha: Revise los contratos y aquí están todos estaban mal hechos le resalté los errores y los volví a hacer, yo misma revise las computadoras y el sistema ya encontré la falla a y reserve el restaurante para el negocio de hoy como me ordenó.

Él y su amigo se quedaron mirando sorprendidos, él recibió una llamada y dijo confundido.

Dante: Como que la asistente no pudo venir por un problema personal si está aquí en frente a mí, que okay Gracias consiga a otra o espere a la misma chica para mañana. Me miró confundido y pregunto en tono molesto.

Dante: ¿Quién es usted?...

Leonardo: Mi hija Dante te presento a Sasha mi princesa...

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