El diario parte 3

Mis deseos por tenerla han creído, al punto que el día que la amiga de diana se me ofreció, no pude evitar aceptarla ella tiene una esencia muy parecida a la de diana e incluso sus cuerpos son tan parecidos.

Ella se ha convertido en mi desahogo a mis deseos de estar con diana, me he acostado con ella tantas veces, es la única chica que no se ha quejado en como la he tratado en la cama, lo sé es cruel cuando lo pienso, pero cuando tengo sé o con esta chica alucino qué es diana ala qué le Hago el amor, solo a esta chica la e tratado con ternura y al mismo tiempo le he dado mucha pasión:

En ese momento las lágrimas de Ana eme pesaban a brotar, avía entendido que Dani nuca sintió nada por ella, pues las caricias, esos besos dulces qué recibía de él, no eran para ella, solo era una mera sustituta de su amiga, hubo un momento en que sentía que odiaba a diana por ser la dueña del corazón de Dani, pero se dio cuenta de lo idiota que está a siendo, su amiga no tenía la culpa de los deseos y obsesión de aquel chico, pues él estaba mal de la cabeza, era un enfermo qué deseaba como mujer a su propia hermana.

Las últimas páginas del diario te avían asustado a Ana.

Esas páginas decían:

Aquella tarde, avía golpeado a leo, pues el idiota se atrevió a estar a solas con diana en la enfermería.

¿Como lo supe? Fue porque vi que diana salía corriendo muy avergonzada de la enfermería, estaba apuntó de ir tras ella, cuando vi que salió leo del mismo lugar, cuando vi que se alejó un poquito de la puerta, yo la abrí, aseche el lugar y no Avía nadie, cuando mi vista se enfocó en leo, no, de qué algo avía pasado entre ellos, ese idiota estaba en las nubes, apreté mis puños con fuerza, fui hasta él, eme pese a golpearlo con tanta fuerza que la sangre en peso a salpicar el lugar.

Cuando lo vi inconsciente en el piso y cubierto de sangre me dé tuve. Y me fui dejándolo así.

A las dos semanas de lo ocurrido con leo, pase por la cafetería qué frecuentaba diana, los volví a ver juntos, ambos conversaban muy felizmente, eso me enfureció, quería matar a ese infeliz, pero fui interrumpido por mi celular, tome la llamada era mi madre que se escuchaba muy alterada, así que fui hacia donde estaba ella

Mi madre estaba en un hospital pues avía recibido un desmayo en su trabajo, y una compañera la avían llevado, cuando llegue la vi muy alterada, le lanzaba cosas a las enfermeras, cuando ella me vio se tranquilizó, corrió hacia mí, me abrazo y empezó a llorar.

Las enfermeras se avían ido del sitio, cuando se calmó me miró a los ojos, y pronunció palabras que no podía creer, no podía evitar sentir un gran alivio con aquella confección.