joven admirador

"Usted es Anmary Sánchez, ¿no es cierto? Mire que es bonita. Mi padre me habla mucho de usted. El otro día la vi por televisión en El grito sagrado. Cuando cuente en casa que la he conocido no lo van a creer. Pero mire que es bonita, más bonita que en el cine ¿Le puedo dar un beso?" Pregunto un joven en la puerta del taller

Marcos llegó y vio la escena y sintió orgullo, la mujer que robo su corazón también robo al público.

El joven narró el momento de Anmary.

Alzaste tus ojos llenos de lágrimas pero estuviste feliz esa noche. ¿No es cierto? Como estuviste feliz cuando me contaste mil veces antes de irte, que ese gran señor que es Pedro Alejandro, te había hablado para decirte que nunca iba a poder agradecerte todo lo buena que fuiste con él. Quería llevarte como estrella del Teatro Nacional Cervantes. No pudo ser. El tampoco pudo ser director del Teatro Nacional de Comedias. Era demasiado honesto. Y para los hombres honestos no están hechos los cargos oficiales.

También Sabina Olmos la dulce y talentosa Sabina supo ser tu amiga y puso la cara para pedirle a esa "gran señora de la escena" que te devolviera los 40 mil pesos que le prestaste en 1980 cuando el dólar valía 20 pesos, en 1972, que costaba 650 pesos.

Perdóname, Anmary, que cuente todo esto. Mucho te recordaremos y te recordamos como una actriz extraordinaria, como una chica buena, como una hija ejemplar a quien el destino le jugó una carta demasiado brava.

Una de las que más me impresionó en aquellos años fue Tilda. Su carrera fue meteórica. Aportó al cine un tipo de belleza, de cultura, de comediante, totalmente distinto. Increíblemente, artista pintora, decoradora, escritora, su casa en pleno Barrio Parque era de un buen gusto increíble. Cuadros, adornos de paja y de flores naturales hechos por Anmary Sánchez, redes de pescadores que separaban los ambientes de su recepción, todo en blanco y gris.

No era una mujer rica. Tenía cátedras de pintura y comenzó en el cine haciendo pequeños papeles, en los cuales pronto impuso su natural distinción Europea. Llegó a ser una auténtica estrella, taquillera y espectacular. En cierto modo renovó el firmamento cinematográfico argentino tan cargado, como hoy, de pazguatas cursis. Se fue en pleno éxito. Varios films han devuelto su imagen. Ahora se prepara para dirigir cine y hace comentarios y de usted se puede esperar cualquier éxito.

Anmary:" Gracias pibe eres un bueno recordando esos momentos hace dos años me costó mucho trabajo llegar pero lo logré" dijo Ella sonriendo al ver la admiración, pensó en regalarle un libro de ella.

Marcos Tálice observo a la mujer de sus ojos y sonrió era un hermoso detalle,"Mira te firmé, espero lo disfrutes" dijo Anmary risueña le entrego el libro al joven.

"Gracias señora Anmary, mi papá y mi mamá serán felices con esto, gracias". Dijo él sonriendo salió corriendo estaba emocionado y Anmary entró al taller y Marcos la beso.

"Mm, esto es porque te admiro mucho". Dijo Marcos cuando la miro ella sonrió

"Anmary, acá te busca un señor". Dijo Gina

"Tiene cita?". Preguntó Anmary y caminó hacia su escritorio reviso su agenda no tenía nada.

"No tiene, es el señor Massimo Russo" dijo Gina nerviosa

"Atiéndelo, yo vuelvo en un rato" dijo Marcos evitando mirar a Anmary.

"Hazlo pasar", dijo ella y abrazo a Marcos y quiso besarlo pero él la separa de él.

"No mi amor, ahora no" dijo él acariciando suavemente la mejilla de ella.

"Buenos días, Anmary mi amor!"Dijo Massimo y Marcos lo miro como si fuera a comerlo con la mirada, Anmary sonrió y estrecho la mano.

"Massimo Russo, se equivoca mi amor es Marcos Tálice, es mi futuro esposo. Usted y yo hace mucho tiempo que no tenemos nada, aparte se casó". Dijo Anmary sonriendo

Massimo la miro sorprendido, "ah bueno claro si me case obligado y ahora regrese por ti?

"Con permiso, mi amor vengo en un rato", esta vez si la beso , sin importarles la presencia de Massimo.

Marcos salió y ella sonrió," Toma asiento Massimo, tranquilo que yo los vi anoche es hermosa tu esposa, no te preocupes por mí, soy feliz y te perdonó, por abandonarme, porque gracias a ti pude experimentar la depresión y el desamor ahora, si me permites tengo mucho trabajo". Dijo ella tratando de no llorar

"Anmary, lo siento muchísimo, dame una oportunidad". Dijo Massimo y esta soltó tremenda carcajada.

"Massimo eres increíble, no vez me voy a casar, ahora vete". Dijo Anmary sonriendo con un nudo en la garganta.

Massimo iba a salir abrió la puerta y volvió adonde ella se encontraba y la beso, Marcos justo entraba, y pensó que volvieron se dio vuelta y salió, pero Anmary se separó de él y le dio una bofetada, este sonrió descarado.

"Aún eres mía". Dijo él y se fue.

"Gina, ya me voy avisa al señor Marcos". Dijo Anmary angustiada.

"Anmary, el señor Marcos dejó esto hace menos de tres minutos, salió muy enojado". Comentó Gina y Anmary sintió que sus piernas le fallaban, se sentó y Gina trajo un vaso con agua y Anmary temblaba.

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