No pasará.

...A la mañana siguiente el contacto con mi jefa era poco, solo nos dijimos buenos días y la mayor parte de la mañana hubo silencio en toda la casa, eso hasta que llegó Zafiro. ...

...Abrió la puerta con una enorme sonrisa y entró diciendo “pero que lindo es el amor”. Nos saludó a las dos, se acercó y me preguntó si estaba lista para lo de hoy. Aunque no sabía que era le dije que sí ya que ella me guiñó el ojo. ...

...Creo que eso despertó la curiosidad de mi jefa, porque levantó la mirada. No preguntó nada pero aparentemente tenía curiosidad por saber que era. ...

— Prima, te aviso que Génesis volverá a salir esta noche.

— ¿Otra vez?

— Lo dices como si saliera todos los días... Mira, son jóvenes y el la invitó a una fiesta con otros jóvenes de la universidad. Nada del otro mundo.

...Por alguna razón mi jefa me pidió que me fuera a mi habitación y así lo hice. Ella tenía que hablar algo privado con Zafiro. ...

— Si bebe, se emborracha y dice algo que no debe decir?

— Eso no va a suceder.

— ¿Esta vez que va a usar? ¿Un traje de baño?

— Perdona que lo diga de esta manera pero eso no debería importarte.

...Se puso de pie, suspiro y luego le dijo a Zafiro, “hagan lo que quieran”. Después de eso se fue a su habitación. Zafiro tenía un bolso llena de accesorios. ...

...Cuando cayó la noche, otra vez ella me estaba ayudando a vestir pero Génesis no estaba por ningún lado. ...

— No te desanimes, va a suceder tarde o temprano, te lo aseguro.

— Tranquila, con lo que sucedió ayer ya siento haber avanzado mucho, gracias Zafiro.

...Otra vez me iría con ese chico del que no sabía absolutamente nada. Y no, no iríamos a una fiesta, de hecho no me gustan. Todo era falso como la ocasión anterior, me llevaría directamente a casa de Zafiro. ...

...Antes de irme Zafiro me dijo algo sobre el collar que tenía. ...

— Este collar podría salvarte la vida.

...Me dijo que el collar a los lados tenía dos censores y también me dijo que con ellos podía pedir ayuda si me sucedía algo. ...

— Oh, que útil.

...Siento que esa es otra señal de que se preocupa por mí, eso creo yo. De verdad quería despedirme de ella, pero pues no salía de su habitación. ...

...Estaba en esta camioneta de este chico y ni siquiera nos dirigíamos la palabras, era tan incómodo. Pero en un punto del camino el chico se detuvo, era un lugar bastante aislado. ...

...Pronto entendí cuales eran sus intenciones. ...

— Oye, no me toques.

...Su mirada me causaba miedo, me haría algo, me tenía contra la puerta del carro asustada. Afortunadamente pude recordar lo del collar. Pero y ¿si nadie me ayudaba? ...

...A pesar de que gritaba, no había nadie cerca que pudiera escucharme. Habían pasado el tiempo y nadie aparecía. Había roto mi blusa y además ya me había golpeado en varias ocasiones, intenté mucho defenderme pero él tenía mucha más fuerza que yo y el espacio dentro del carro era muy pequeño. Me preguntaba por qué no había funcionado lo del collar, ¿lo hice mal? O ¿simplemente no quieren buscarme? ¿Y qué tal si todo es una trampa. ...

...Perdí poco a poco las fuerzas para seguirme defendiendo. Pero escuché una voz familiar. ...

— Bájate del auto ahora mismo.

...El chico volteó y se alejó de mí enseguida, la persona que le había dicho eso le estaba apuntando con un arma. Se bajó rápido del auto. ...

— Oye, tranquila, dice el chico bastante nervioso.

— Arrodillate niño.

...No sabía si le dispararia o no, pero no voy a negar que en el fondo quería que lo hiciera. Ella le dijo a David que desafortunadamente para él ya la vio y ella no podía arriesgarse. Así que, acabo con su vida. ...

...Luego hizo una llamada, colgó el teléfono y muy tranquila me pidió que saliera del auto de David, pero no podía, mi blusa estaba hecha pedazos, no tenía nada con que cubrirme. Además, tenía moretones. ...

— Génesis, por el amor de Dios, debemos irnos.

...Me daba mucha vergüenza salir, no sé por qué, pero no quería que me viera así. Pero en cierto punto colmé su paciencia y ella misma se encargó de bajarme del carro. ...

...Lo único que tenía para para cubrirme eran mis manos. Estaba completamente al descubierto, ni siquiera era capaz de levantar la mirada de la vergüenza que tenía. ...

— Génesis, súbete, debemos irnos.

...Le obedecí, me subí a su auto sin mirarla fijamente, estaba muy apenada. Estaba segura de que ella estaba muy disgustada. ...

...Estaba aparentemente enojada pero aún así me ayudó con mis heridas, ella parecía tener mucho conocimiento en ese ámbito. Es difícil para mí expresar lo incomoda que me sentía. Decidí romper el silencio preguntándole donde estaba Zafiro. ...

— Durmiendo, lo que deberías estar haciendo tú.

...Otra vez volvió ese largo e incómodo silencio. Cuando por fin ella terminó y yo me iría a dormir, ella me detuvo para decirme algo. ...

— Génesis, lo que sea que estés haciendo, necesito que dejes de hacerlo.

...Sí ella ya sabia que yo estaba enamorada de ella, ya sabía que yo quería que ella también se enamorara de mí. Ella quería que dejara de intentarlo pero yo no me quería dar por vencida. ...

— ¿Tú jamás te enamorarías de mi verdad?

— Mi vida no tiene un rumbo es un desorden, un caos que va a terminar haciéndote daño si sigues alimentando ese sentimiento. Ni siquiera yo misma conozco mis sentimientos, solo convertiría en un desastre tu vida.

...No sé exactamente si tiene miedo de herirme o tiene miedo de salir herida ella, tampoco lograba entender a qué se refería al decir que eso podría resultar muy mal. ¿Qué es lo peor que podría pasar? ...

— No me voy a dar por vencida, le dije antes de salir de su habitación... Y sí estás segura de que no te enamoraría nunca entonces eso no debería preocuparte.

...No, para ese punto yo estaba convencida de que ella sentía algo por mí aunque fuera mínimo. No soy el tipo de persona que se da por vencida tan fácilmente. Me voy a asignar la tarea de conseguir un beso antes de que se acabe el mes. Si no lo logro, entonces tomaré eso. Como una señal y me daré por vencida, de lo contrario no. ...

Pero ella también tenía algo que decirme antes de que me fuera. Me dijo “ese es un juego muy peligroso, Génesis. Pero me gustaría ver si puedes hacer que yo pierda”.

...No me importa, porque si ella es el peligro, entonces me fascina el peligro. ...

...Esa noche no dormí porque estaba haciendo planes, si “versión posesiva” me encanta, necesito hacer que reaparezca, porque ya se como usarla a mi favor. Y afortunadamente por alguna razón el destino siempre estaba de mi lado. ...

...El domingo en la mañana Zafiro había despertado sintiéndose mal, no sé si era parte de su plan o en realidad se sentía mal. Pues si ella no se sentía bien, no podría ir conmigo a la universidad el lunes y alguien más tendría que hacerlo porque no puedo ir sola. ...

— Zafiro, deja tus juegos.

— Prima, no estoy jugando a nada, no me siento bien. Tendrás que llevar tú a Génesis a la universidad mañana.

...Aún sin saber si era un juego de Zafiro o no, tenía que aprovechar. ...

— Podría irme sola. Digo, para no molestar.

...Sabía que ella no me dejaría ir sola, tendría que acompañarme. Porque el resto del día Zafiro empeoró, creo que en realidad si estaba mal. Lo positivo es que al final ella tendría que acompañarme. ...

...Ella me llevó en su auto, en el camino me preguntó si todo esto era parte de “el juego” de Zafiro y yo. ...

— No, de hecho anoche estuve pensando y tienes razón, quizás debería enamorarme de alguien más.

— Considero que es lo mejor.

...Cuando llegamos tenía que estacionar su auto frente a la universidad, luego yo tendría que cruzar. Ella se bajó también del auto y yo estaba dispuesta a cruzar la calle, pero cuando lo intenté ella me detuvo. Me jaló. ...

— Génesis, ten cuidado.

...La carretera no estaba muy transitada pero a ella aparentemente y por alguna extraña razón le pareció peligroso. Nuevamente se quedó un rato en silencio, recordando cosas aparentemente y luego de ese silencio me dijo. ...

— Vamos a cruzar juntas.

...Algo tenía con las carreteras, parece tener un trauma con cruzar la calle o algo así. Cuando llegamos al otro lado aquel profesor que siempre estaba “pendiente” de mí estaba allí y me saludó. También saludo a mi jefa y como siempre su forma de hablarme y mirarme me incómodo mucho. ...

...Pero como siempre ignoraba esto y continuaba con mis actividades. Ella se fue y aunque le dije que trataría de enamorarme de alguien más, no era así, no era así en lo absoluto. Al contrario, ya tenía un plan muy elaborado para cumplir la misión de que sea mía. ...

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