20.- Rescate.

...GEORGE...

Desde hace mucho tiempo había perdido las esperanza en recuperar a ni hija, a pesar de que en realidad nunca la conocí, pero enterarme de esa manera que ella vive, que a sufrido más de lo que yo hubiera querido, que él tal Aidan puede que la tenga y que Dorian esta enamorado de ella, es bastante información de la que nunca pensé saber.

Pero solo con ver su foto esos ojos me hacen recordar a ni esposa y sin dudar ella es Kailani, mi hija y heredera del imperio Patel, e puesto a mis mejores hombres a que trabajen de la mano con la gente de Dorian y puedo asegurar que la encontraremos o me dejo de llamar George Patel, el sabueso de la muerte.

Ya teníamos un par de horas que habíamos llegado a Irlanda y pude notar la desesperación que tiene Dorian toda Irlanda estaba viviendo el infierno por no encontrarla y la verdad no quería verlo así, él era como un hijo, ya que su padre y yo éramos casi como hermanos.

Hice varias llamadas metiendo presión hacia mis hombres quería resultados, ya que estábamos contra reloj, yo sabía que mi gente trabaja mucho mejor abajo presión y solo dos horas después recibí un mensaje que tenían una ubicación y así como lo recibí decidí ir a buscar a Dorian para decirle de la buena noticia, mientras mis hombres ya estaban en posición.

- sabía que estaba en su habitación así que toque hasta que lo escuche hablara- hola Dor.. ¿y eso?- al momento en que entre y lo vi hacerse curación en la pierna.

- no es nada, una simple herida- asentí caminando a él entregándole las coordenadas.- ¿la encontraron?.

- si, así que alístate que daremos el golpe- él asintió y solo salí de su habitación.

No pasó mucho tiempo cuando ya íbamos camino al lugar tras las montañas, estábamos listos y más que cargados al llegar bajamos y esperamos a que los hombres de Dorian nos dieran luz verde, caminamos siendo sigilosos para no ser detectados por ese bastardo, que cuento los minutos para destruirlo con mis propias manos.

...ALINA...

Al despertar estaba atada a una silla, en la misma habitación mal oliente, moví con desesperación mis manos intentando aflojar el amarre pero era más que inútil, hasta que la voz de Aidan sonó tras de mí asustándome.

- deja de luchar y resígnate,- lo ignoro y sigo moviendo mis manos con desespero- ¿que no escuchas?, carajo te lastimaras.

- suéltame entonces, si no quieres que me lastime- lo escucho chistar cerca de mi oído hasta que me besa en la cien y solo alejó mi cabeza - aléjate imbécil.

- ni soñarlo, porque mejor dejas de lado tu estúpida valentía y recordemos viejos tiempos- jala mi cabeza hacia atrás intentando besarme y solo lo escupo en el rostro- eres una perr…, ¿dime quien te a tocado?, para que me rechaces, ¿no decías que me amabas?.

- aún te atreves a decirme eso, cuando, tú jugaste conmigo y así como te llegue a amar, ese día en el que descubrí tus malditas mentiras, todo lo que sentí por ti murió- camina a mi alrededor hasta que se detiene frente a mí agarrándome la barbilla- te odio como no tienes idea.

- lo veo negar pasando su mano entre el cabello- solo dime Alina, él, ¿lo hace mejor que yo?- me quedo en silencio sosteniéndole la mirada- contesta, maldita sea, él, ¿te llena?, ¡contéstame!.

- me da una bofetada tan fuerte que me hace voltear quejándome del dolor- eso a ti no te importa, pero algo si te diré tú no le llegas ni a la suela de sus zapatos- me da otra bofetada partiendo mi labio- que se siente que tu gran ego de mierda sea roto, porque de verdad no eres hombre y lo digo en toda la extensión de la pala...- me vuelve a golpear.

La verdad no sé de donde saco fuerza para enfrentar porque estoy tan aterrada de lo que pueda pasarme junto a él, no sé dé que sea capaz, su locura es inmensa como el miedo que alberga mi cuerpo.

- hoy sabrás que soy más hombre que ese hijo de puta- me agarra del cabello ejerciendo fuerza.

Besándome con desesperación, sus manos terminan de desgarrar mi blusa dejando expuesto mi sostén, por más que me muevo mis manos y pies están atadas y los amarres cada vez se hacen más ajustados, siento sus manos tocar mi piel, cierro mis ojos implorando que llegue Dorian,

Cuando siento cimbrarse el lugar, él se separa dándome otra bofetada con mucha rudeza- mierda- y solo sale de la habitación.

Escucho disparos fuera del lugar, mientras yo intento zafarme de estos amarres, los minutos pasan sintiendo la adrenalina correr por mis venas, las muñecas me duelen pero al ser persistente logre que se aflojaran, de inmediato desató mis pies, al levantarme siento un fuerte mareo que me hace perder el equilibrio, cuando escucho pasos acercarse busco con rapidez algo que me sirva para defenderme, tomó la cadena y me escondo tras la orilla de la puerta, al abrirse y ver una silueta golpeó con fuerza en sus manos y de un movimiento rápido tomó el arma apuntándole.

- mis manos tiemblan- tranquila, hemos venido por ti hija- toma el arma por el cañón, hasta que él se acerca a mi campo de visión- soy yo, tu papá.

Es tan grande mi impresión de verlo a él en este momento, que todo me comienza a dar vueltas, me tambaleó cuando siento sus brazos sostenerme.

- Ya estas a salvo, Kailani- solo asiento hasta que todo se vuelve oscuro.

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