8.- Casi hermanos

Soy el sucesor de la gran mafia Irlandesa, ya que mi padre fue asesinado en un atentado que hicieron los malditos Rusos, pero así como me arrebataron a mi viejo yo también los hice pagar uno a uno hasta desaparecer a esa estirpe.

Yo siempre me e considerado demasiado exigente tratándose de mi trabajo, no admito ningún error y si se llegan a equivocar no viven para contarlo, pero así como soy hijo de puta con quien quiere serlo, también ayudo a quien lo necesita, porque no porque sea mafioso quiera decir que mi día a día es sangre y poder, también cuido de quien lo necesita.

Ya que a pesar del dinero sucio como millones de personas se refieren a lo que hacemos, mande construir dos orfanatos para darles una vida de calidad a los niños que no tienen a nadie en esta vida así como yo.

Era el mayor de tres hermanos, pero lamentablemente los perdí por un accidente automovilístico, así que soy solo yo, pero en el proceso conocí a dos hombres que siempre dije que eran mis amigos, pero en realidad son casi mis hermanos.

A Dan lo conocí por medio de Tahis, donde primero nos hicimos socios, pero con el pasar del tiempo se fue haciendo parte de mí muy reducida familia y círculo social, pero él ha sido parte de mis negocios también así que el vínculo entre nosotros es más cercano.

Y por medio de Dan, conocí a Lenin, al principio no lo aceptaba, pero en un enfrentamiento que tuvimos de imprevisto donde estábamos los tres, el saco la casta por mí, mientras estaba disparando a los que intentaban darnos cuello, nunca me di cuenta que me tenían en la mira por un francotirador, pero él supo hacerla a pesar de que era su primera vez manejando un arma.

Y desde esa vez somos tan leales que a Lenin lo ayude a esconderse, la verdad no sé bien por qué, pero muy pronto regresara a Irlanda, para cuando estemos momento llegue estemos listos para arrasar si él me lo pide…

Después de casi un mes estar fuera de mi bella Irlanda por fin regreso y el buen Dan me organizará una fiesta para darme la bienvenida, la verdad estoy más que agotado por el viaje, pero a mi hermano no lo dejaría con su plan aparte tengo ganas de ver a Tahis hace tiempo que no hemos hablado.

Al llegar a casa me ducho y me arreglo para la ocasión, al salir decido irme en mi motocicleta, tengo pensado quedarme en la casa de Dan, voy a toda velocidad y tras de mí las camionetas con mis hombres, bajo la velocidad y abren las rejas.

Al parquear mi moto de inmediato entrego las llaves a unos de mis hombres y entro a la casa, siendo recibido por las hermosas chicas, saludo de abrazo a mi hermano, ya que nosotros teníamos más de un mes sin vernos.

- tanto tiempo Dorian- asentí tomando el vaso de whisky que me ofrece- salud por tu regreso.

- salud hermano- y nos bebimos de golpe el líquido que contenía el vaso.

La música estaba en un volumen perfecto, solo veía a las chicas bailar, pero a Tahis no la observaba por ningún lado, me levante de donde estaba sentado, camine entre la gente que había en busca de Dan, pero al salir al jardín pude darme cuenta que estaba demasiado ocupado con Monik, y decidí buscar por mi cuenta, pero fui abordado por las demás chicas quienes me ofrecían bebidas.

y solo por complacerlas me quedé con ellas un tiempo escuchándolas hablar de cosas de mujeres, me despedí y seguí caminando por el lugar, pero me llamó la atención ver a unas de las de servicio subir al segundo piso llevando una bandeja me imagino que con comida.

Camine hacia las escaleras cuando Dan me grito y al voltear estaba Tahis junto a él, ella de inmediato corrió a mí abrazándome fuerte, bese su frente hasta que la baje al piso.

- hola Dorian, ¿me trajiste algún recuerdo?- asentí sacando de mi bolsillo una caja.

- claro, nunca se me olvidaría traerte algo, sabes que eres como un…- estaba hablando cuando vi bajar a la misma chica de servicio.

En verdad me ganaba la curiosidad y no sé por qué, pero en este momento tenía ganas de subir corriendo para averiguar a quien le llevaron esa bandeja, cuando las manos de Tahis frente a mis ojos me hicieron salir de mis pensamientos.

- disculpa, ya sabes que eres como una hermana para mí- asintió sonriente hasta que le entregue la caja- espero te guste.

- sé que si me gustará Dorian, tus obsequios siempre son espectaculares- asentí volviendo mi vista hacia las escaleras- ¡ey!, hoy estás más extraño que nunca- me observo por unos segundos hasta que ella volteó a la misma dirección que yo, la vi de reojo y estaba sonriendo, se quitó el abrigo que traía y me lo dio- lo puedes subir por mí, por fis.

- pero, no sé cuál sea tu habitación- se encogió de hombros se acercó besando mi mejilla.

- solo abre cada habitación y tú solo te darás cuenta cuál es- se alejó de mí hasta voltear nuevamente a mí- suerte Dorian- alzó sus pulgares y se fue.

Pero en el fondo agradecía porque sería el motivo perfecto para matar mi curiosidad subí a paso rápido por no decir corriendo las escaleras, era la primera vez que subía al segundo piso, fui abriendo puerta por puerta hasta que encontré la de Tahis y sabía que era de ella por el excesivo color rosa y el nombre en el respaldar de su cama.

Deje sobre la cama su abrigo que por cierto también era rosa, salí de la habitación cuando un ruido llamó mi atención, camine a la puerta que estaba frente a la de la habitación de Tahis, tome la perilla volviendo a escuchar un ruido en su interior.

Y sin más abrí quedándome anonadado con la belleza que estaban viendo mis ojos, era una chica más que hermosa, pero en sus ojos se notaba demasiada tristeza, mi mente estaba en blanco, no podía pensar ni mucho menos formular las palabras adecuadas por entrar así a la habitación.

- una gran disculpa señorita- no puedo creer que solo dijera eso.

Cerré la puerta, camine por el pasillo para bajar por las escaleras, aún no podía salir de la fascinación ante tan hermosa belleza, pero sin quitar el mérito de la gran estupidez de no poder decir algo más.

Camine hasta unirme con Dan y Tahis, pasando la noche, pero sin poder sacar a esa hermosa chica de mi mente, creo que tanto se me ha notado que Dan no ha dejado de verme se acercó a mí hasta que hablarme.

- ¿que sucede?, Dorian -sonrió mientras sigo tomando whisky.

- ¿quién es la chica que está arriba?- asiente hasta que sonríe y palmea mi espalda.

- ella, es Alina esta viviendo con nosotros ya hace tiempo por pedido de Lenin- asentí extrañado- solo sé que Lenin la considera como su hermana y la salvo de algo terrible.

Solamente asentí y seguimos en la fiesta, pero seguía pensando y atando cabos de que ahora entendía del porqué me pidió ayuda para esconderlo, pero mi pregunta es que tan terrible sería la vida de esa hermosa mujer para que hasta en sus ojos se vea reflejada su tristeza.

DORIAN O'BRIEN.

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