Capítulo 2

Kiara se sentó de golpe sobre la cama con sus manos en su cabeza tratando de procesar lo que estaba sucediendo.

Bueno… si no quiero tener un final estúpido solo no debo involucrarme con nadie mucho menos con María la protagonista.

- Ahora solo debo saber en qué parte de la novela me encuentro y planear mi próximo movimiento – dijo en voz baja

Porque no pienso quedarme un minuto más en esta estúpida trama y morir quemada.

-Me iré lejos donde nadie pueda molestarme y estar en paz-

toc toc

El sonido de la puerta interrumpió sus pensamientos 

-¿Si? – dijo mirando la puerta

Espero que no sea la estúpida familia

-¿Señorita Kiara? Soy yo Cecilia su criada-

Menos mal no son ellos 

– Adelante – dijo poniéndose de pie para recibirla 

La puerta se abrió dejando ver a una mujer mayor de unos 25 años.

Ahora que recuerdo esta mujer murió por la culpa de Kiara

Cecilia era como su nana, siempre estaba al pendiente de ella, era la única en todo ducado que la amaba, al final, cuando sentencian a Kiara a ser quemada viva, Cecilia va hacia el emperador y pide de rodillas que liberen a su señorita, su amor por Kiara era tan grande que pidió que la mataran a ella en su lugar pero al final la mandan a la orca por ser su cómplice.

En serio esta chica sí que fue una tonta

Teniendo a alguien que la amo hasta el punto de dar su vida y Kiara únicamente se dedicó ir tras la miseria del príncipe buscando su cariño… pero lo entiendo un poco, puesto que ambas tuvimos una vida similar, crecimos sin afecto y eso que en mi anterior vida aprendí a no rogar por nada ni nadie.

Cecilia entró y cerró la puerta.

-Señorita ¿Cómo se encuentra? la sirvienta coraima salió asustada de aquí diciendo que ya despertó  - dijo preocupada.

- Eh si, disculpa, estoy bien - 

-¿Está segura? Puedo llamar a un médico- comentó insistiendo

- Oh no no, estoy bien de verdad- 

No puedo dejar que descubra que no soy la verdadera Kiara.

- Está bien mi señorita- dijo Cecilia mirándola no muy convencida.

Necesito saber que sucedió

- Cecilia ¿Que me paso?- Pregunto quiera con un semblante serio

La mujer se quedó sorprendida por la pregunta de Kiara

-¿No lo recuerda mi señorita?- preguntó la mujer juntando ambas manos en su pecho - 

- Lo siento Cecilia, no recuerdo mucho- Kiara optó por hacerle creer que había perdido la memoria.

Así puedo obtener más información.

- Te caíste al agua y te golpeaste fuerte la cabeza, el cochero Manuel te trajo inconsciente, estuviste dormida por dos días, así que yo y otras sirvienta te hemos asistido mientras estabas inconsciente- 

Kiara estaba seria por lo que había dicho esa mujer.

-Ya veo- 

¿Es que la antigua Kiara habrá hecho una rabieta por la atención del príncipe?... Rayos… no puedo ver sus recuerdos de esta chica… 

- y…¿Dónde están el Duque y sus hijos?- 

-Ellos no están aquí señorita, el Joven maestro Evan llegó ayer por la mañana y para celebrarlo, se fueron de paseo por petición de su hermana menor- dijo Ceciclia algo nerviosa.

-Entiendo- 

Si que era enserio que a él nunca le interesó Kiara 

Cecilia se sorprendió por la actitud de Kiara, ya que siempre se ponía a llorar cuando el Duque no la llevaba con ellos.

Como sea, no quiero encontrarme con esa estupida familia

Mientras ella pensaba unos toques a su puerta la interrumpieron.

toc toc

-Adelante- 

La puerta se abrió dejando ver a una niña pequeña de unos 8 o 9 años de edad vestida de sirvienta.

-¿Como se encuentra mi señorita?- preguntó la niña algo temerosa

Kiara se sorprendió ya que la sirvienta que tenía delante de ella era una niña pequeña, pero lo que más la dejaba aturdida es que esa niña nunca apareció en la novela.

Debo preguntarle a Cecilia

-Estoy bien, muchas gracias por preguntar- dijo Kiara con una sonrisa amable.

La niña y Cecilia se sonrojaron inmediatamente y bajaron sus cabezas bajo la atenta mirada de Kiara. 

-¿Qué sucede?-  Pregunto algo confundida

 -Mi señorita usted es muy hermosa cuando sonríe, mucho más que la señorita María - dijo la pequeña con un brillo en los ojos - usted antes no sonreía de esa manera

Annita - reprendió Cecilia

- Está bien Cecilia- contestó Kiara. - ¿Dime Annita porque dices que antes no sonreía?-

-Porque usted siempre estaba con la mirada vacía, siempre bajaba la cabeza y nunca nos dedico sonrisas así ni a mi ni a Cecilia- dijo la niña algo triste

Kiara se sorprendió por las palabras de la niña, pues se suponía que como la villana era una persona celosa y arrogante que le hacía la vida imposible a todos, en especial a la protagonista.

Kiara observó por unos segundos a la niña… En su anterior vida careció de afecto por parte de su padre pero sonrisas no le faltaron, así que con esta niña no debía ser la excepción.

-No te preocupes Annita, a ti y a Cecilia siempre les voy a sonreír- dijo Kiara con una sonrisa sincera.

-Woaaaaaaa- dijo la niña sorprendida y feliz- Mi señorita su sonrisa es muy cálida y gentil me gusta-

 La niña comenzó a reír y saltar, mientras que Cecilia quien observaba todo saltaba de felicidad por sus adentros pues también estaba emocionada que su señorita le dedicara una de sus hermosas sonrisas.

Kiara quien observaba a la niña, por primera vez se sintió feliz, lo que la hizo olvidar el problema en el que estaba metida. 

Se siente bien

- Tengo un poco de hambre, me gustaría comer algo- dijo Kiara interrumpiendo el momento de felicidades de ambas sirvienta.

-Mi señorita, yo iré a prepararle el almuerzo- dijo Annita con la mano alzada- y tambien le preparare su postre favorito, así que con su permiso me retiro.

Sin más la niña salió corriendo de su alcoba emocionaba porque su señorita le había dedicado una sonrisa  y quería prepararle una deliciosa comida como gratitud.

Kiara al aprovechar que la niña se fue aclarada su duda con su sirvienta.

-Cecilia ¿Cómo llegó la niña al ducado y porque está bajo mi servicio? - dijo Kiara de manera seria.

-Por lo que se, el padre de la niña estaba en deuda con el duque, así que le entregó a su hija para liberarse de su deuda, cuando llegó a la mansión, la niña iba a ser enviada a trabajar en la casa de un marqués, pero usted lo impidió y rogó para que la niña estuviera bajo su servicio y desde entonces usted la cuida-

Kiara no podía creer que lo escuchaba.

¿Qué está pasando?

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