Capítulo Nº4

Lara está recordando todo lo que sucedió desde que llegaron al hotel. Fueron quince largas horas junto a Emiliano donde no faltaron las charlas, compartieron golosinas, música y hasta risas. Hace mucho que Lara no la pasaba bien con alguien que no sea su mejor amiga. Sentía una conexión especial con este muchacho que la dejaba ser ella misma y no tenía que fingir para que él la acepte. En algún momento durante el viaje ella se quedó dormida sobre su hombro y al joven estudiante le pareció una escena muy dulce así que para entretenerse se puso a contar algunas pecas del rostro de ella. Su piel es tan blanca que esas manchitas sobre su nariz le dan un toque especial y a la vez contrasta con su oscura cabellera.

Cuando estaban por llegar al hotel Julieta desciende a ver cómo está su amiga y se sorprende por su acompañante pero disimula y le dice que necesita hablar urgente con ella. Emiliano muy amablemente las deja solas y sube con el resto de sus compañeros.

⎯ ¿Qué sucede July?

⎯ Mira se que no es lo que habíamos planeado todo este tiempo pero necesito pedirte un favor.

⎯ Si, lo que sea.

⎯ Quiero alojarme con Sergio en su habitación.

⎯ Es una locura, piensalo bien.

⎯ Ya lo pensé, al llegar al hotel nos registramos juntas pero a la noche dormiré con él.

⎯ ¿Estás segura? Él ya te engañó varias veces. No me parece muy buena idea.

⎯ Lara, solo te estoy contando lo que haré. No necesito tu permiso.⎯ Julieta se levanta enojada del asiento y antes de subir la mira por última vez y le dice.⎯ Pensé que eras mi amiga.

⎯ Y lo soy.⎯ dice afligida pero nadie la escucha.

Cuando Emiliano baja a tomar su lugar se encuentra con una chica totalmente diferente, era notoria la tristeza que sentía, así que solo se sentó y disimuló dormir por un rato. Lara el resto del viaje lo hizo en silencio, ya no le interesaba hablar con nadie, su presentimiento se estaba haciendo realidad y ahora estaba muy desanimada e infeliz.

 Emiliano solo buscaba excusas para hacerla reír y trataba de animarla pero era en vano. Ella se dio cuenta que ese viaje había sido una completa equivocación desde el momento en que gastó todos sus ahorros para costearlo y ahora sus miedos se hacen realidad, se encontraba muy sola.

Llegaron a un hotel precioso. De lejos se apreciaba el lujo y el nivel del mismo, tenía una entrada imponente y una vista majestuosa al lago todo era de ensueño, Lara nunca imaginó estar en un lugar como este. En recepción les tomaron los datos personales y les asignaron habitaciones. A Lara le tocó una doble que compartiría con Julieta pero al entrar se sentía gigante, había dos camas vestidas iguales, un escritorio, dos sillas, un gran balcón donde se podía apreciar el exótico paisaje en su totalidad y hasta tenía su propio baño privado. Todo ese lugar era para ella sola ya que sabía bien que nadie la acompañaría durante las noches.

 Julieta entró solamente a dejar un par de cosas en la que sería su cama y a hacer un poco de desorden, eso era parte de su plan para que no sospechen que estaba en el ala de los varones. Salió del cuarto sin dirigirle la palabra. Lara estaba muy triste, su amiga no le hablaba. Busca entre su maleta un abrigo y abandona la habitación. Sabe que solo hay una cosa que la calma cuando tiene esa sensación que la abruma  y es salir a caminar, tomar aire puro y mirar flores. Baja las escaleras y va directo al lago, el aire es frío, el reflejo de las plantas juegan sobre el agua cristalina. Mira para todos lados y hay un tronco viejo cerca de la orilla, seguramente está ahí con el propósito de ser usado como banco, se sienta en él y piensa en la variedad de vegetación qué hay en el lugar.

 De repente sus pensamientos son interrumpidos cuando escucha el crujir de las piedras y pasos atrás de su espalda, seguro alguien más tuvo la misma idea. El tronco se mueve en la otra punta y la desestabiliza un poco, ella se sostiene y no necesita girar para saber de quién se trata ya que vuelve a escuchar esa melodía del micro. No puede ser acaso Emiliano ¿ la está siguiendo? Sus dudas  son interrumpidas por esa voz que ya se le está haciendo muy familiar.

⎯ Te vi por la ventana de mi habitación, y quise hacerte compañía. Estoy empezando a creer que realmente no estás cómoda con este viaje.

⎯ En realidad ahora preferiría estar en mi casa o ayudando a mis padres en la verdulería.

⎯ ¿Qué te pasa?

⎯ Mi amiga, se enojó conmigo porque creo que su novio es un patán. Estoy completamente segura que solo se reconcilió con ella para volver a tenerla en su cama.

⎯ ¿ Hablas de Sergio y Julieta?

⎯ Si. Él la engañó varias veces y justo un día antes de viajar se reconciliaron. No creo en eso de las coincidencias.

⎯ Entiendo.

⎯ Y la muy tonta le cree y como si fuera poco me dejó sola en la habitación para irse con él. Ahora está en su habitación, si la encuentran los profesores la van a expulsar. Todo es un desastre.

⎯ Es la primera vez que te escucho hablar tanto.

⎯ Disculpa. Es que estoy enojada y todo en esa habitación es tan grande, sus camas son el doble de amplias que la que tengo en casa. Siento que se burlan de mí, cada vez que entro al cuarto y las veo hacen que recuerden mi desgracia. Es tan vacío y enorme ese cuarto que no quiero estar ahí.

⎯ ¿Tienes una habitación para ti sola, puedes hacer lo que quieras y te quejas? Yo comparto la mía con cuatro descerebrados que ya fueron a comprar cervezas, y sabes las reglas, si hay alcohol nos echan del instituto faltando solo un mes para finalizar las clases.

⎯ Tienes razón, mi problema es muy simple.

⎯ Ven vamos a caminar antes que nos llamen a cenar.

⎯ Está bien

⎯ Y si no quieres estar sola puedo hacerte compañía. Después de todo Mariano tampoco pudo venir y siento que no estoy en la misma sintonía que los muchachos.

⎯ Cierto, me olvidé por completo de él ¿Son muy amigos verdad?

⎯ Los mejores

⎯ Emiliano, gracias por escuchar.

⎯ De nada. La verdad es que me divierto más estando contigo que con los chicos.

Es la primera vez que un chico toma de su mano, se siente extraño como cosquillas en todo su cuerpo ¿Será esta la sensación de mariposa en el estómago que tantas veces la escucho hablar a su madre? Si es así está en graves problemas. No le puede gustar ningún muchacho por ahora, ya que le prometió a su madre que no repetiría su historia y mucho menos en este momento que necesita dedicarse de lleno a los estudios para poder colaborar en su casa y sacar a su familia adelante.

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