LAYLA (CAP. 15)

Aparto la mirada rápidamente, antes de que caiga en esas profundidades de plata caliente, que son sus ojos.

Regreso a ver al extraño asiático y no se encuentra. La profesora y los alumnos siguen en shock. Me pareció muy extraña toda esta situación.

Siento como Cruz pasa su brazo por el espaldar de mi silla y pegándose a mi me susurra.

* Debemos hablar, Layla. Después de clase voy a tu cuarto. Es importante lo que debemos aclarar. Ese asiático es de Oriente...

Todo mi cuerpo se tensa. Y me pongo a pensar en todo lo que pudo salir mal. Lo miro de costado y asiento.

Otras 2 horas largas de espera y me levanto rápidamente. Cruz me sigue de cerca. Antes de llegar a la puerta, un cuerpo grande se interpone en mi camino.

^ Layla, ¿Quién rayos es ese chico que te sigue? Nosotros terminamos hace un mes y te conozco, no serías tan abierta con un reciente novio.

- No tengo por qué darte explicaciones. Mira Aaron, fuiste mi amigo. Al menos ten la cortesía de dejarme en paz. No me obligues a lastimarte.

Parece que el oxigeno no llega a su cerebro, porque se acerca a mi. Ultimamente he dado la impresión de ser una chica muy buena "gracias pequeño cuerpo y cara angelical", creo que todos olvidaron lo sanguinaria que puedo ser. Me preparo para darle un golpe que tiene un 50-50 de probabilidad de dejarlo impotente, cuando soy levantada al estilo damisela en apuros. Miro a mi nueva tortura personal y condenado Cruz me sonríe.

* Permiso.

Cruz pasa de largo, golpeando su hombro contra Aaron y haciéndolo tropezar.

- Bájame, Cruz. Tengo una reputación que mantener.

Me baja con cuidado pero me sostiene la mano. Intento zafarme, pero si sigo jalando me quedaré sin dedos. Mientras vamos de camino a los dormitorios, soy ahogada por abundancia de cabellos rubios y rojos.

** Claro, sin ningún hola, perra. Te dimos nuestros mejores años y nos abandonas por... Hola, mucho gusto. Soy Teresse, Resse para los amigos.

Mi amiga, pronto a ser parte de mi lista negra, le bate las pestañas a Cruz. Por algún motivo que no quiero pensar, me molestó mucho esa acción.

- Cruz, la rubia hueca es Teresse y la peliroja loca es Cameron. Mis mejores amigas. Zorras, éste es Cruz, mi lazarillo.

Cruz me mira, me jala a su cuerpo y en el oído me susurra.

* No te pongas celosa, muñeca. Solo tengo ojos para ti. Déjame demostrarlo con acciones, que las palabras se las lleva el viento.

Sin darme tiempo a reaccionar, guía mi boca a la suya y vuelvo a perder la realidad. Sin pensarlo, puse mis brazos sobre sus hombros y acerco su cabeza mas a mi. Una mano la tiene en mi nuca, enredada en mi cabello, para acercarme mas; la otra en mi espalda baja, pegándome mas a su cuerpo.

Un carraspeo ruidoso y una risita, me sacan de la bruma.

*** Uy, y dicen que el verano se acaba. Nunca sentí tanto calor. Por un momento pensé en volverme hetero.

Cameron habla tan fuerte, haciendo que varios miren.

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