Capitulo 18

Los días pasaban y Génesis ya estaba alcanzada de esa mujer, en esos días, tuvo que dejar su trabajo, la verdad es que a ella no le gustaba trabajar con gente así, así que se fue a trabajar a un lugar donde vendían comida y en donde todos ellos iban a comer menos Donovan, él no comía en esos lugares, digamos que era algo exigente con la higiene, era amante a la comida en cama, génesis estaba bien en su nuevo trabajo, todo iba bien le gustaba mucho trabajar en lugares como esos, le encantaba todo lo que tenga que ver con gastronomía, tal vez ese podría ser un sueño de ella, Donovan no dejo ser cariñoso con ella.

Los días pasaban y llegó el 14 de febrero, ese día le llegaron muchas cosas al trabajo, chocolates, flores, un desayuno, un peluche, para Génesis era algo muy sorprendente, mucho para ella, ese hombre sabía cómo sorprenderla, nadie le había regalado nada, ni en su cumpleaños, santiago solo era de regalarme abrazos, borracheras y una noche de pasión eso era todo.

Le llego todo eso, menos una cosa, su menstruación, no se había dado cuenta de que no le había bajado, es más, ella podía asegurar que no se acordaba cuando fue la última vez.

¿Con una sonrisa, olió las flores, pero de inmediato sintió ganas de vomitar, no sabía por qué, pero su aroma no le gusto y salió corriendo al baño, era raro, él ya le había dado flores anteriormente y eso no había pasado, Génesis estaba ahí hincada en el baño con la cabeza dentro de la taza, justo ahí, le llegó a la mente ese día que tan rico la había pasado y se dio golpes mentales, mientras seguía vomitando, como no recordó cuidarse? Fue tan intensa que no eso recordó.

Después de tanto vomitar, hasta lo que no tenía, Salió del baño con lágrimas cayendo por sus mejillas y viendo a un chico todo espantado y con la cara pálida no sabía si ya se había dado cuenta o lo espantó, le quito las cosas de las manos y lo sacó fuera del negocio, corrió a su trabajo.

_No sé si podamos vernos hoy, tal vez y mañana aún no lo sé, dame un poco de tiempo._

El chico quedó sin decir nada.

_Génesis, puedes ir a descansar, avísame cómo sigues para mañana._

¿Génesis empezó a pensar cosas, un embarazo? ¿Podría este darse? ¿O solo eran cosas? Ella empezó a idear cosas, y así se fue, pero no a su casa, se fue al laboratorio, hacerse una prueba de sangre y si, efectivamente, salió positivo.

_Dios mío, gracias._

¿Esa noticia hacía muy feliz a Génesis, que olvidó un detalle, que diría el padre de su hijo? ¿Acaso sus palabras serían dolorosas como las de Santiago? Lo más seguro es que él no quisiera eso, la verdad es que ni siquiera sabía qué había entre ellos, solo fue una vez que estuvieron juntos y ya, de lo que si estaba segura ella, es que esta vez si se iba a cuidar y muy bien, por ella y por su bebé.

_ Génesis estaba feliz, emocionada, que no esperaba que en la noche llegará un visitante, que no esperaba, este toco la puerta de su casa y sin que lo invitara a pasar entro, en su mesa estaban sus resultados y como todo buen chismoso se puso a leerlos y se enteró del bebé, de su hijo, Génesis creyó que se iba a poner loco o algo así, pero su mirada era diferente, se acercó a ella y la abrazo, la beso, se veía muy feliz y hasta unas lágrimas le salieron,

_Yo te voy a apoyar en todo._

Génesis asintió.

_Solo hay una cosa que no puedo hacer en estos momentos._

_¿Que cosa?_

_Quedarme a vivir con ustedes._

_No te preocupes._

Para empezar estaba lo del divorcio con su esposa y él quería terminar lo más rápido el asunto y lo otro eran sus padres que no lo querían soltar, pues él era el que más les ayudaba.

Génesis entendía eso, y no era que lo quisiera viviendo con ella todo el tiempo, no estaba preparada para eso, con su apoyo era suficiente.

Al día siguiente

_Vamos, veremos a nuestro hijo._

Donovan llevó a Génesis al doctor, le hicieron el ultrasonido y ya estaba por cumplir los tres meses.

_Te amo, Génesis._

Eso le sorprendió mucho a ella, pero no dijo nada, el chico entendió, era algo muy rápido, en ese momento fue donde empezó a sentir miedo, pues su otro bebe lo perdió por esas fechas, el doctor les dio indicaciones, medicamentos y le mandó reposo, porque se veía algo débil, su matriz y para evitar algún problema era mejor descansar, y si ese hombre la saco del trabajo, pasaba todos los días en la mañana a dejarle comida iba por las tardes a ver como estaba y a dejarle alguna golosina y por las noches.

Pasaba a dejarle de cenar y a darle amor, si ya le había dicho un te amo, Nunca reclamo nada, era un excelente hombre, muy cariñoso y compresivo.

6 meses después

Pasaron los meses, una noche no se sentía muy bien, se sentía incómoda, algo nervios, como ansiosa.

_¿Pasa algo? ¿Preciosa?_

_No sé, no quiero estar sola._

_Hoy me quedo contigo, no te preocupes._

Eso la calmó y ya estaba contenta, aunque seguía estando nerviosa, sentir el apoyo de él y sus cariños, la hacía sentir bien.

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