Capítulo 12

Klaus

* Estábamos afuera de la cabaña, conversaba con los ancianos y Alfa Arthur, Ryan se mantuvo a mi lado y el imbécil qué creo es el novio de Ava, no se separó del lado de Alfa Arthur, no hablaba mucho y mantenía una expresión sería, se notaba que le molestaba todo este asunto, pude escuchar que se refería a él como su beta

Tenía una mezcla de emociones, estaba inquieto, emocionado, nervioso, hasta inseguro, no sé si alguien sea capaz de sentir tantas cosas al mismo tiempo, necesitaba a Heyat, él siempre había sido mi roca y desde que me ignoraba, me sentía solo

🐺Klaus: Heyat, puedes escucharme, qué piensas de todo esto, porque no me hablas amigo, siento que te falle pero necesito tu aprobación con esto, si tú las rechazas esto no va a funcionar, amigo por favor

*Silencio era su respuesta siempre, salí de mi conversación unilateral con mi lobo para escuchar a los ancianos decir que el momento había llegado y ver a Alfa Arthur entrar a la cabaña y de esto ya no hay marcha atrás, el momento había llegado

Arthur

* Entro a la cabaña a buscar a mi hija y mi esposa, cuando llego a la habitación no puedo evitar que mis ojos se nublaran de lágrimas, mi bebe se veía preciosa, era la visión más hermosa del mundo, para mí seguía siendo mi pequeña bebe a la que arrullaba en brazos todas las noches para que se durmiera, a la que le encantaba qué le contará cuentos de princesas, pero esta noche la princesa era ella

Arthur: hola hermosas se puede

Ava: claro papi, adelante, como me veo?

Arthur: te ves preciosa, mi niña, todos allá afuera se van a ir de espaldas (le digo acercándome a ella para darle un beso)

Mary: cariño tu siempre tan galante, pero supongo que viniste porque ya es hora cierto?

Arthur: si, ya todos esperan, Ava, estas segura de esto, porque si no...

Ava: estoy segura papá, tranquilo (le doy un abrazo a él y a mamá, sé que están preocupados y la verdad yo también pero es el camino que elegí y ya no hay marcha atrás)

Ava

* Salí de la cabaña del brazo de papa y mamá, todos estaban de blanco, había velas y pétalos de rosa, recorrí con mi vista a los presentes hasta que mis ojos se posaron en los ojos verdes de Klaus, como era posible que con su sola presencia, con una sola mirada, mi corazón latiera descontrolado

Estaba perdida en su mirada, hasta que alguien me susurro en el oído

Noah: linda, límpiate la baba(se lo digo en tono divertido era obvio a quien estaba mirando y la tonta se lo estaba comiendo con la mirada)

Ava: de que estas hablando yo no estoy viendo a nadie (me cacho, porque tiene que conocerme tan bien)

Noah: aja si, no veías a nadie, te creo (se lo digo pellizcándole los cachetes, y sonriéndole)

Ava: ya déjame, me duele, no sé por qué siempre haces eso (se lo digo dándole un pequeño golpe en las manos)

Noah: linda, ya en serio si te quieres ir, solo tienes que decirlo y nos vamos

Ava: tu también?

Noah: ja, ja, ja, así que no soy el único que te quiere sacar de aquí

Ava: te quiero tonto

Klaus

* La vi salir del brazo de sus padres, y se veía realmente hermosa no podía apartar la vista de sus ojos azules, se me corto la respiración, estaba perdido en su mirada, hasta que el imbécil se acercó a hablarle al oído, la ventaja de ser un lycan de sangre pura era que mis sentidos podían ser más sensibles qué los de otros lobos, así que pude escuchar cuando el tipo ese le susurraba al oído de nuevo linda, tuve que dejar de escuchar un momento porque uno de los ancianos me llamo y para cuando pude volver a su conversación escuche como le decía que si quería irse solo tenía de decírselo, no sé que le pasaba a este imbécil, pero mi paciencia estaba llegando a su límite

Comencé a caminar hacia ellos con la intención de arrancarle la cabeza al imbécil, ya no soportaba su cercanía con ella, mi ira creciendo a cada segundo, mi cabeza se nubló por completo, lo quería muerto y Heyat estaba completamente de acuerdo conmigo, lo sentí gruñir en mi cabeza cuando le pellizco sus hermosas mejillas, pero como siempre mi pepe grillo me detuvo

Ryan: wow, wow, wow, alto ahí en que demonios estás pensando (le digo deteniendo a Klaus, no sé que le pasa pero es la primera vez que lo veo perder el control de esa manera, ni cuando encontró a Liz con su amante le paso esto, lo siento demasiado furioso y tengo que pararlo de alguna manera antes que los demás se den cuenta, que a estas alturas creo que será una misión imposible)

Klaus: ese imbécil se la quiere llevar, voy a matarlo

Ryan: no, tú no vas a hacer nada y te calmas me entiendes, no eches a perder esto, qué pasa Klaus tú no eres así

Klaus: él no se la puede llevar, ella es mía

Ryan: de que hablas pendejo, contrólate o quieres que ella te tenga miedo, te estas comportando como un verdadero troglodita y si sigues así, esto va a acabar muy mal

Klaus: no puedo, no sé que me pasa Ryan, cuando se trata de ella siento que mis instintos toman el control

* Se que Ryan tiene razón, intento controlarme pero es muy difícil y más cuando veo como él la trata con tanta familiaridad y ella con cariño, por alguna razón me siento posesivo con ella, había pensado que solo esta noche y la sacaría de mi cabeza, qué iluso, si sin tenerla en mis brazos ya me siento así, no quiero imaginar lo que sentiré cuando la tenga en mis brazos, cuando por fin logro calmarme un poco el anciano Daniel nos llama para comenzar

Nos indica que todos nos pongamos en posición, camino hacia donde está el círculo de velas para pararme en el centro como lo indica el anciano y ella hace lo mismo y los demás se colocan en un círculo alrededor de nosotros por lo que me explicaron el ritual es bastante sencillo, todos comienzan haciendo cánticos a la diosa, así pasan algunos minutos hasta que el anciano se acerca a nosotros con unos anillos y una copa, qué contiene un brebaje

El anciano me entrega una pequeña daga para realizar un corte en mi mano y vaciar unas gotas de mi sangre en la copa, y después ella hace lo mismo que yo, cuando nuestra sangre se mezcla con el brebaje, él eleva la copa a la luna para decir una oración

Anciano Daniel: querida diosa creadora de nuestra especie, atiende el llamado de nuestro corazón, aclamamos por tu misericordia para lograr este sueño con tu infinita bondad, para que esta noche un niño sea concebido, diosa de amor y vida bendice a este hombre y a esta mujer, qué está noche haya un puente para que sus lobos se encuentren y puedan llenar el deseo de sus corazones

*La luna comenzó al brillar de una forma que jamás había visto, bañándonos con su luz, el anciano nos ofreció la copa para beber de ella, lo hicimos ente cánticos y aullidos, después nos ofreció los anillos qué tenían Ágata de fuego, piedras para la fertilidad

Klaus: yo Klaus Relish, te recibo a ti Ava Williams y me entrego a ti esta noche, te prometo ayudarte a amar la vida, a tratarte siempre con ternura y respeto a tener la paciencia que requieras. Hablar cuando sea necesario y a compartir el silencio cuando no, a estar de acuerdo o no y a vivir en la calidez de tu corazón que siempre será mi hogar

Ava: yo Ava Williams, te recibo a ti Klaus Relish y me entrego a ti esta noche, te prometo reír contigo en los momentos de felicidad, y reconfortarte en los momentos de dolor. Compartiré tus sueños y te alentaré a que los alcances, estando siempre a tu lado en cada paso del camino. Te escucharé con compasión, atención y comprensión, y te hablaré con honestidad y sinceridad. Seré tu amiga desde hoy y hasta el final de nuestros días y a vivir en la calidez de tu corazón que siempre será mi hogar

*Al intercambiar los votos nos colocamos los anillos y veo que de sus ojos brota una lágrima, sé que fue por lo que dijimos, ambos sabemos que no podemos tener un hogar pero es lo que significará para nosotros ese bebe, él sería el hogar qué ambos no hemos podido tener, diosa Luna si en algún momento de mi vida he hecho algo bien por favor te pido lo tomes en cuenta, danos tu bendición

Ambos estamos tomados de las manos viéndo a la luna, escuchando los cánticos, así estuvimos adorando a nuestra diosa, pidiendo y orando hasta que poco a poco todos se fueron retirando, hasta dejarnos solos, sabía lo que seguía baje la vista a su rostro, estaba sonrojada y se veía aun más hermosa, si eso fuera posible, mi corazón acelerandose todavía más, cuando ella encontró mi mirada vi en sus ojos que estaba lista, no había miedo, solo había una inmensa paz

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