Capítulo 4: "Él será, ¿tu peor enemigo?"

AGUSTO_ Mi prometida es hermosa, padre. Realmente espero poder conocerla mejor.

_ Me siento muy satisfecho por tu respuesta, querido hijo, estoy haciendo los preparativos para su mudanza a nuestra mansión, muy pronto tendré la oportunidad de conocerla en persona.

AGUSTO_ Estoy seguro de que te agradará padre. En cuanto a Zerafin...

_ ¿Ahora que sucede?, ¿en qué problemas se ha metido?

AGUSTO_ En ninguno padre, pero se comportó de una forma muy egocéntrica ante ella. Ya que compartiremos el hogar, quisiera que sea más cordial con mi futura esposa.

_ De acuerdo, en cuanto lo vea, lo reprenderé, ya puedes retirarte.

AGUSTO_ Gracias padre.

Mansión Russel.

JANE_ ¿Por qué debo mudarme a la mansión Blackdenssi? Me niego rotundamente.

MARGARET_ Así conocerás a tu prometido, querida Jane. Tienes que recordar que esto es por el bien de nuestra familia.

JANE_ No quiero mamá, ¡por favor te lo estoy suplicando! ¡No quiero casarme con alguien sin sentir amor!

MARGARET_ Mira Jane, esto es sencillo, no será por la eternidad, cuando te cases con Agusto Blackdenssi tendrás el acceso al 50% de la fortuna solo por ser su esposa, después, puedes pedir el divorcio y estar con quien tú desees.

JANE_ ¿Esto es tan importante para ti como para papá?

MARGARET _ Si cariño, solamente deseamos tu buen futuro y porvenir, nos sentiremos honrados por tu buena acción hacia nosotros.

Jane, entristecida baja la mirada.

JANE_ De acuerdo madre... lo haré, únicamente lo hago por ustedes.

MARGARET_ Estoy muy orgullosa de ti, dile a Clara que te ayude a empacar, esta misma tarde vendrá un chófer por ti.

JANE_ Pero, ¿no es muy repentino?

MARGARET_ No cariño, el señor Blackdenssi quiere conocerte en persona, recuerda tus modales por favor.

JANE_ Está bien... Mamá...

Jane, ocultaba cosas detrás de su mirada triste, tal vez si la madre supiera, esta sería otra historia, pero Jane, guardo silencio.

El sol se estaba por ocultar, Jane ya estaba con su equipaje en mano, recorriendo sus últimos días en su hogar.

Una de las sirvientas viene a buscarla.

_ Señorita Jane, el chófer de los Blackdenssi la está esperando.

JANE_ Gracias Clara, iré de inmediato.

CLARA_ A sus servicios.

Jane se dirige al gran salón.

MARGARET_ ¿Estás lista, cariño?

JANE_ Si madre ¿Dónde está papá?

MARGARET_ Oh, lo siento tesoro, él tuvo una urgencia y tuvo que retirarse, pero me dejó asentado de que seas una buena mujer con el joven Agusto.

JANE_ ¿Eso lo dijo papá? O, ¿lo dijiste tú madre?

MARGARET_ Vamos Jane, ve, únicamente recuerda cariño a lo que vas.

JANE_ Si madre...

El chófer de los Blackdenssi se presenta.

_ Buenas tardes, señorita Jane, mi nombre es Dominic Coen, permítame su equipaje por favor.

JANE_ No se preocupe, puedo guardarlo yo misma.

DOMINIC_ No puedo permitirme eso, por favor.

JANE_ Está bien, eres muy amable._ Se lo da.

Dominic recibe su equipaje y le abre la puerta. Jane sube, pero queda petrificada en un instante, sus pupilas se dilatan y sus manos frágiles comienzan a sentir el sudor.

Zerafin estaba sentado a su lado, ella intenta nuevamente salir del coche, pero este la detiene abalanzándose hacia la puerta; Jane se asusta, las secuelas de aquel día quedaron marcadas en ella.

Zerafin, solo toma la puerta y la cierra nuevamente, luego, se aparta de ella.

Es un profundo silencio entre ambos. Dominic acelera.

El corazón de Jane latía con fuerzas, los nervios se notaban a simple vista, Zerafin observa por la ventanilla sin querer incomodar, pero miraba de reojo la belleza indiscutible de Jane con su vestido negro y su cabello recogido elegantemente.

JANE_  ¿Qué haces tú aquí?

Se podía sentir como la voz de Jane se quiebra por los nervios, sin embargo Zerafin estaba calmado.

ZERAFIN_ Creí que eras de servicio, tu identificación decía Eilen Wood, pero tú eres Jane Russel, ¿no es así?

Jane se siente tensa, pero su carácter es dominante y más fuerte que ella, por eso mismo decide perder el miedo.

JANE_ Eso a ti no te incumbe, no has respondido mi pregunta, ¿Qué haces tú aquí?

ZERAFIN_ Petición de mi padre por lo egocéntrico que fui contigo.

JANE_ No debiste hacerlo.

ZERAFIN_ Yo tampoco estaba de acuerdo.

Jane solo mira hacia la ventanilla, ver el rostro de la persona que la abuso le causaba nauseas y repulsión.

ZERAFIN_ ¿Qué es lo que deseas con mi hermano? Si quieres dinero, yo puedo dártelo.

Jane solo guarda silencio.

ZERAFIN_ ¿Por eso estabas trabajando en servicio con esa identificación falsa?

JANE_ Esos son asuntos míos, no te metas.

ZERAFIN_ Tú familia está en la quiebra, lo investigue todo, ¿esperas obtener su fortuna no es así?

Jane ya no puede contenerse y eleva el tono de voz al agarrar el saco de Zerafin.

JANE_ Mira maldito cretino, escúchame bien lo que te diré, estoy siento muy amable contigo en estos momentos, estoy con tu hermano por tu culpa, tu egocéntrico, egoísta y manipulador eres la causa número uno por la cual ahora estoy atada a una vida que no deseo, tu inepto, bastardo, sin corazón, acabaste destruyendo mi futuro y lo que más quería.

Ya no tolero escuchar ni una palabra que salga por tu boca, me robaste lo más sagrado que tenía, voy a encargarme de hacerte la vida miserable desde que coloque un pie en esa mansión y si decides abrir la boca de la situación de mi familia, le diré a tu buen padre que su consentido hijo, me drogo y abuso sexualmente de mí, perdiendo la virginidad que me había guardado tanto tiempo para tu querido hermano Agusto.

Piensa maldito, ¿a quien van a creer?¿A un miserable como tú? O a una mujer inocente y frágil como lo soy.

Te metiste con tu peor enemigo, esto recien comienza.

Jane suelta el saco de Zerafin y se distancia.

El auto se detiene y se abre la puerta.

DOMINIC_ Hemos llegado señorita Jane.

JANE_ Muchas gracias, eres muy atento...

Jane baja del auto y mira con furia los ojos bermellón de Zerafin, él, queda inmóvil, luego, sonríe descaradamente.

ZERAFIN_ Lo siento hermano, pero le debo dar una lección a tu prometida.

Un hombre muy elegante se encontraba en la gran puerta de la mansión.

Con su cabello plateado se le podía leer el paso del tiempo, su piel plegada en todas partes y sus ojos dorados como el mismo sol.

Jane lo observa como si supiera de quien se trataba, hace una reverencia en su honor.

JANE_ Gran señor Blackdenssi, es un honor conocerlo.

Con el tono de voz elevado hace participe a su presencia.

_ Señorita Jane, bienvenida a la Mansión Blackdenssi, el honor es todo mío.

"El enemigo puede ser nuestra propia sombra."

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