Minos

Soy Minos Makris, griego multimillonario, tengo 40 años, divorciado, con una hija de 15 años, Agnes, es mi adoración, soy dueño de varios negocios pero el más grande es la cadena de hoteles de mi familia.

Me encuentro viajando a Miami, compramos un hotel viejo, pero su terreno es una joya, el Proyecto es un resort como el que tengo en Mikonos.

Soy el mejor en lo que hago, no me importa si no ver resultados, por algo tengo mís empresas en el número uno, no trabajo con ninguno que no esté a mi altura.

la interacción social social conmigo no existe, prefiero la soledad, y la compañía de mi hija, mis amigos se pueden contar en 3 dedos, las mujeres solo las busco para un rato, nada más, tienden hacerse ilusiones pero soy claro.

Al aterrizar, me recibe Lorenzo es mi mano derecha acá, él se encarga de América en general, tendremos una semana para ver todo, nos montamos en las camionetas con mi seguridad, vamos directo al hotel.

En el camino Alonso empieza con su discurso de porque sigo solo, es mi amigo lo quiero pero a veces se pasa.

Alonso: Mino te tengo una buena candidata, conócela.

Minos: no me interesa dejémonos así.

Llegamos al hotel.nos instalamos, en cada uno de mis hoteles tengo un Penthouse solo para mí o mi familia cuando viajan, quería descansar así que me despedí de Lorenzo y fui directo a la cama.

Al día siguiente, me levanto a las 5 es mi rutina, me suben el desayuno, y salimos, al llegar al terreno, se encontraba el que fue el dueño, estaban terminando la mudanza, quiso llevarse varias cosas y no se lo negué para mi es basura para el recuerdo.

lo salude con educación, me pidió, cuidar el terreno, antes de irse, se dirige a Lorenzo le entrega una tarjeta que el le había pedido.

Minos: que te entrego.

Alonso: una vez cuando estábamos cerrando la compra, el me invito a comer y yo con mucha vergüenza acepte.

Mino: me imagino tu Vergüenza, eres un glotón,

Alonso: quede maravillado, esa repostería es la mejor, él.me hablo de todo lo que hacían y que tenían varios hoteles de clientes y bueno yo le pedí el contacto.

Minos: tenemos los. Mejores chef no veo la necesidad.

Alonso: la veraz, porque tu mi querido amigo, me acompañaras a conocerlo.

Minos: no tengo tiempo.

Alonso: claro que si, allá es donde vamos a tomar el segundo desayuno, jejeje

Minos: enserió, no desayunas en el hotel.

Alonso: siempre dejo un espacio.

Revisaron el terreno, hablaron con el arquitecto, el ingeniero, tenían que hacer un estudio de suelos, pero todo marchaba según lo Planeado, osea 1 año para inaugurar el resort más hermoso que Estados Unidos verá.

Llegaron a la pastelería, era pequeña pero muy acogedora, Lorenzo estaba feliz, olía delicioso, se sentaron en las mesas de la parte de atrás, era muy tranquilo algo que le agrado a Minos.

Alonso: pero si es bien acogedor y latino, eso me gusta

Minos: si está bien, esperemos a ver si no me.muero de una ingestión.

Alonso: tan delicado

Al. Cabo de unos minutos llego una mujer sencilla, muy amable, los atendió, Lorenzo pedía por los dos, porque Minos ni miraba.

Alonso: que vergüenza la muchacha bien amable y tu con esa mala educación.

Minos: te dije que no quería venir, además que tiene una mesera es igual a todas.

Alonso: por Educación se mira a los ojos y se saluda, contigo se perdió la platica.

Minos solo rodaba los ojos, para él, el sitio era insignificante, a lo que acostumbraba, si algo podía decir de esta reposteria, era lo limpio, concurrido, era muy observador y pudo darse cuenta que la higiene era importante allí, ya se había ganado un punto con el.

Llego él Pedido, eran dos cafés colombianos grandes, dos pasteles de durazno y mango, empezaron a comer, Minos tenía miedo pero lo hizo, le gustó, Lorenzo si parecía niño con dulces, mientras comían platicaba de los proyectos y otras cosas.

Al pedir la cuenta Minos es el que va a pagar, saca su tarjeta lo hace y salen, detrás va alguien gritándole, Minos se voltea, es una mujer bonita, quien va con su maletín.

Sofia: esperen dejaron esto,

Minos: mi maletín.

Sofia: si señor, vea.

Alonso: gracias, el es como descuidado,

Minos: esta todo.

Sofía: mire señor, se lo traje muy amablemente, y no se sacó nada, malagradecido, detrás de que corro como loca, un paso suyo es como 10 míos, para que sea tan irrespetuoso de tratarme de ladrona, sinvergüenza, descarado, haaaa espero no verlo por acá nunca más.

Alonso: señorita disculpé, él a veces no sabe qué decir.

Minos: usted no me prohíbe venir, es una simple mesera, que cumplió con su obligación, no tengo por qué agradecerle, es su trabajo tener a los clientes bien atendidos,y si dejan algo devolverlo.

Sofía: pues esa repostería donde entro es mía, y si puedo prohibirle la entrada.

Minos: si usted es la dueña, ya sabemos.pr que el negocio no crece.

Alonso: Minos respeta a la dama, disculpe por favor, vámonos, que vergüenza.

Salieron furiosos por los dos lados.

Alonso solo le decía que no tenía porque tratarla así, que era solo agradecer y ya.

Minos: esa mujer no debió de enfrentarse a mí.

Alonso: entonces que querías dejarse tratar mal.

Minos: huu de pronto la dejo sin su repostería.

Alonso: no te atrevas Minos se ve que es una mujer trabajadora, se defendió de tu grosería así que olvida lo que pasó, que lastima yo que quería proponerle.un negocio.

Sofía ingresó a la repostería furiosa, echaba humo.

Madre: te echo agua para que apague ese calor que traes, o se te adelanto la menopausia.

Sofía: Madre no estoy para chistes.....

Mamá: jejejje así que un cliente de esos que creen que es exclusivo, ya déjalo pasar.

Sofia: si me vuelvo a cruzar, no respondo, así mida como dos metro y sea como corpulento.

Mama: pero si que eres detallista.

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