Impotencia...

Y el primer deseo es pedido...

- Deseo ser el sultán - Ordena y yo solo puedo obedecer...

Pronto estamos frente a Al, Jazmín y su padre, despojo de su vestimenta a éste último, dándole todo a mi nuevo amo, a ustedes puedo confesarles que me siento un traidor, pero que puedo hacer yo, solo soy un esclavo, uno que debe obedecer sin poder oponerse, uno que no tiene voluntad propia, uno que a pesar de tener sentimientos, miedos y ganas de ser libre, todo es echado a la borda por un contrato que ni siquiera tuvo la intención de firmar...

Cuando Al se da cuenta de la situación intenta luchar, pero pues siendo sincero que podría hacer, intenta hablar con Jazmín, creo que ahora es que empieza a sentir el peso de sus mentiras, siento horrible ver la desesperación en sus ojos, aunque también tengo presente que en parte lo que está ocurriendo es su culpa, fue muy necio...

Este hombre posee magia al igual que yo, no es tan poderoso, pero ciertamente lo es más que mi amigo, así que lo atrapa y yo solo puedo decir entre labios un lo siento, él me mira con angustia, como quisiera poder ayudarlo...

- Genio, deseo ser el hechicero mas poderoso del mundo - Dice Jafar y concedido, ahora puede realizar cualquier hechizo...

Hasta Abu intenta luchar, quitarle la lámpara a ese hombre, pero sale disparado ante un ataque de él, su risa macabra resuena en el lugar y yo solo siento pesar, como es posible que no pueda ayudar a mis amigos...

En estos momentos odio ser el genio más que todos los años encarcelado en ese lugar...

La alfombra también intenta ayudar y entonces Jafar dice un hechizo para mandarlos lejos y con toda la impotencia que me causa solo veo como desaparecen...

El palacio es trasladado por él mismo a otro sitio, Jazmín y su padre encadenados como viles sirvientes, ese pajarraco del demonio es tan odioso, como quisiera poder ahorcarlo o por lo menos callarlo, porque solo dice tonterías y obliga al padre de Jazmín a comer unas galletitas...

Mientras ella, la amada de mi amigo, que tiene unos grilletes con cadenas en las muñecas es obligada por ese imbécil a estar a su lado cuál si una esclava se tratase, quiere besarla a la fuerza, ella obviamente se niega, es asqueroso ver esta escena, en serio que la impotencia me está carcomiendo, de que sirve ser un genio sino puedo hacer lo que yo quiera y ayudar a quienes me importan y aprecio...

Entonces este vil hombre después de otro intento fallido con Jazmín dice:

- Genio ya sé cuál quiero que sea mi tercer deseo: Deseo que la princesa Jazmín me ame

Intento decirle lo de las reglas, pero ella me interrumpe, haciendo algo que no me creo...

- Oh Jafar, querido ahora lo veo todo claro - comienza a decir con voz seductora, bueno y que se trae me pienso, la observo, hay un destello de alegría en sus ojos, miro hacia donde ella y ahí está es Al, aunque siendo sincero no puedo compartir la misma alegría, porque siento que está es una batalla perdida, sé muy bien que su plan es distraer a Jafar...

Yo me acerco lentamente a Al, le intento decir que no creo que pueda hacer mucho, pero noto que él está decidido y camina con pasos suaves hacia el trono dónde estaba sentado Jafar, ahí está la lámpara, ahora entiendo un poco y aunque también sé que vuelva a estar en esa estúpid* lámpara encerrado, lo prefiero a qué mis únicos amigos vivan así...

Veo que ese pajarraco ya ha visto a Al e intenta decir algo, pero Abu le tapa el pico y lo monta cuál caballo... Una batalla entre ellos se desata...

A la par ese hombre intenta voltear hacía donde está Al y entonces ella hace lo impensable, besa a ese asqueroso viejo, guácala en serio que espero valga la pena...

Pero justo cuando Al está por tomar la lámpara, ese pájaro horrible logra soltarse y avisar a Jafar...

- Así que aún sigues vivo muchacho, no por mucho - Dice tomando la lámpara y atrapando a Al - Entiende de una vez chico yo soy el más poderoso hechicero - Recalca con suficiencia, mientras encierra a Jazmín y miro como Al después de un minuto de sorpresa y angustia, sus ojos brillan ante una idea...

- No, no lo eres Jafar - Dice con ese tono de burla con saña y la mirada molesta de ese hombre no deja lugar a dudas de que quiere muerto a Al, pero que le entró curiosidad por lo dicho - Aquí hay alguien más poderoso que tú - Agrega retándolo con la mirada y su voz afilada no deja lugar a dudas que quiere hacerlo enojar, Jafar queda en silencio seguro intentando darle sentido a lo dicho por el chico - Sí Jafar, el genio es mucho más poderoso que tú - Suelta, pero que diablos dices chico, pienso

- Que dices, claro que no es así - Menciono un poco nervioso, ¿Ósea que ahora su plan es que pelee con ese hombre? No creo poder ganarle... Además no puedo atacar a mi amo ¿O sí? 🤔

- Tienes razón... ¡Genio, deseo ser el más poderoso genio! - Grandioso Al ahora tenemos a uno igual que yo en nuestra contra...

- Concedido - Menciono

Y entonces ese hombre es convertido en genio, unos grilletes son puestos en sus muñecas, se puede ver el poder mágico recorrer su cuerpo... ¡Tengo miedo!

Una lámpara negra aparece, el cuerpo de Jafar es succionado por ella... Oh así que ese era su plan, que inteligente, ósea ni yo pensé en eso...

- Y ahora Jafar eres el más poderoso genio, felicidades, porque ahora vivirás en una pequeña lamparita - Dice Al y su burla esta tan llena de sarcasmo que no puedo evitar reír, luego corre hacia Jazmín liberándola de la muerte que casi le llega por estar siendo cubierta de arena...

A la par Jafar antes de entrar por completo toma a ese pajarraco, bueno él tendrá compañía, lo que yo no tuve...

Cuando ya están dentro, todo regresa a la calma, oigan este muchacho es mi orgullo...

- Genio ¿Haces los honores? - Pregunta divertido mirando la lámpara de Jafar y entiendo lo que se refiere, así que la tomo y la lanzó lo más lejos posible, este muchacho se deshizo de una escoria con el mejor castigo disponible, créanme yo lo sé de primera mano...

Una vez pasado todo, Al toma mi lámpara, frotándola...

- Bueno amigo, supongo que ya pedirás tu tercer deseo - Le digo - Entiendo deseas volver a ser príncipe para poder casarte con tu princesa - Lo miro y en sus ojos está esa tristeza, no lo culpo, de verdad deseo que sea feliz y eso solo será posible siendo un príncipe por la regla establecida

- No genio yo te prometí algo - Comienza a decir, mirando a Jazmín - Te amo, pero debo hacer lo correcto, lo siento... Genio deseo tu libertad - Dice

- Muy bien príncipe en camino, riquezas y el palacio restaurado - Comienzo a decir y luego caigo en cuenta, él no deseo nada de eso, él cumplió su palabra...

¡Y soy libre! Miro mis muñecas esos grilletes desaparecen, todo mi cuerpo vuelve a la normalidad, soy humano de nuevo, ya había olvidado lo que es ser normal...

¡Oh Dios en serio soy libre!

- Al, gracias - Atino a decir con un nudo en la garganta, hasta creo que es un sueño...

Pero es real, es muy real

- Pide un deseo - Le instó, el duda - Vamos pídelo, lo que sea, dí deseo tener riquezas o ropa nueva, no sé ¡Vamos! - El me mira intrigado

- Deseo tener riquezas - Dice

- Nooooo, yo ya no concedo deseos, si quieres eso ¡Trabaja! - Contesto y todos comienzan a reír - En serio Al muchas gracias - Vuelvo a decir - Ahora que soy libre, voy a hacer muchas cosas...

- De nada genio, pero ahora que eres libre ¿Ya me dirás tu nombre? - Pregunta divertido

- Bueno... - Me callo haciéndola de emoción - Me presento soy Laith Husayni - Digo orgulloso mientras le tiendo la mano que él estrecha

- Mucho gusto Laith, soy Aladdín - Menciona y comenzamos a reír ambos

- Bueno Aladdín, de nuevo gracias

Antes de irme les ayudo con mi magia a restaurar el palacio y todos los destrozos hechos, ahora soy libre de hacer con ella lo que quiera... ¡Libre!

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