Episodio 15: La morgue

^^^Mimi De angelis.^^^

No es la primera vez que vengo hasta la morgue para llevar a Isa de regreso a casa. La última vez que lo hice fue porque Antonella estaba dando a luz a Romeo y su esposo no se encontraba en la ciudad porque estaba ocupado en la producción de una de las tantas películas que han sido adaptadas por sus libros.

...¿No lo mencioné?...

Tanto mi hermana como su esposo son escritores de renombre. Zane un poco demasiado famoso que el resto de los escritores de nuestro país, pero Antonella no se queda atrás porque sus libros de romance son los más vendidos en su categoría.

Ella también ha tenido sus propias adaptaciones a películas y series. Soy una gran fan de su trabajo.

—Este lugar siempre me da escalofríos.—Comenta Poe a mi lado.

Luego de colocarme un pantalón corto negro y una camiseta con una camisa a cuadros blanco con azul, me hice una coleta y agarré la mano de Poe para traerlo a la morgue.

Mi hermano mayor debería estar aquí haciendo lo suyo con los cadáveres. Todavía siento que es extraño que haya elegido ser forense entre todas las cosas, pero bueno. Estoy feliz porque Isa trabaja en algo que le interesa.

—No sabía que mi hermanito era un miedoso.—Me burlo.

—No lo soy.—Rechaza rápidamente.

Despeino su cabello rubio cuando le acaricio la cabeza. Es más alto que yo por unos pocos centímetros, pero sigo alcanzando su cabeza con facilidad.

—Mimi.—Se queja.—Deja de tratarme como un niño.

—Tienes 12. Eres un niño.

—Tengo 11.—Me corrige.—Pero ese no es punto.

—Tienes 11 y ya eres más alto que yo.—Me cruzo de brazos con resignación.—No deberías crecer tanto o serás un gorila como Zane, Adrian e Isa.

Poe se encoge de hombros.—Ellos son geniales.

—No. No lo son.—Estoy en desacuerdo.—Los tres son unos lunáticos del control y no quiero que tú también lo seas. Te he visto siendo demasiado protector con tu amigo, Narciso.—Cuando digo el nombre de su amigo de la infancia, mi hermano hace una expresión extraña que no logro entender.

—No soy protector con él.—Pone los ojos en blanco y quiero golpearlo porque ahora está siendo un insolente como yo lo soy con Isa.—Narciso es despistado, así que lo ayudo. Eso es todo.

—Ajá.—Le sonrío a boca cerrada.

—Oh, cállate.—Poe me da un pequeño empujón.

Y ahora sonrío a mis adentros porque me encanta estar aquí con mi hermano. También me gustó a haber visto a mi hermana y al resto de mi familia.

—Tienes mi apoyo.—Le digo y él frunce el ceño por la confusión, así que continúo.—Con Narciso.

—No quiero tu apoyo.—Se molesta.—Somos amigos, eso es todo. Me gustan las mujeres. Dios, no recordaba que fueras tan molesta.

Poe aumenta la velocidad de sus pasos dejándome atrás.

—¡No hay pecado en amar, Poe!.—Le grito por el pasillo del hospital.

La gente nos ve y mi hermano me asesina con la mirada mientras sus mejillas se tiñen completamente de rojo.

Creo que me odia ahora, pero no importa porque es Poe y mi hermanito nunca se molesta por más de 5 minutos conmigo. Somos hermanos, pero también somos casi mejores amigos.

Digo casi porque por momentos como este mi hermano decide convertirme en su enemiga número uno.

—No grites en un hospital, tonta.—Me dice Poe.

Dudo que le moleste a alguien porque estamos en la sección de la morgue y únicamente a nuestro alrededor se encuentra el personal que nos conoce desde hace años.

...Aparte de los cadáveres, por supuesto....

—Vamos por Isa.—Digo dejando el tema atrás y abrazando el brazo derecho de Poe.

—Vamos.—Dice sin importarle que su hermana sea siempre tan empalagosa.

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