Capitulo 6

Haru camino hacia el jardín, observo a Blyke parado observando hacia el cielo, lo rodeo y lo vio con los ojos cerrados, meditando.

— ¿En qué momento entraste?

Apoyo su mano en el hombro del sujeto—Maestro ¿Quiere un café? — Un chispazo se la hizo sacar de golpe, la zarandeo rápidamente— ¡Tsk! ¡Lo hizo otra vez!

Su largo cabello se agitaba, estaba inmerso en sus pensamientos, sus cabellos se elevaron y sus ojos se abrieron produciendo un destello que lo dejo en un absoluto trance.

Haru se quedo perplejo y visualizo todo como si estuviera en el lugar, sentía todo como si todo fuera real, observo al Jefe conducir en la noche, luego, observo en la parte de abajo pegado al guardabarros un rastreador que titilaba una luz roja, visualizo la carretera y un camión oscuro posicionarse detrás de él, unos arpones salieron disparados y se incrustaron en el vehículo de Zane, un sujeto se asomó en la parte de arriba, su cabello largo se agitaba, tenía cicatrices en el rostro, inhalo fuertemente— ¡Infursiooooooooooooooooooooooooooooo! Unos chispazos lo rodearon por completo hasta que se formó una rayo caer sobre él, este salto hacia el asfalto parecía encendido como una braza caliente y comenzó a correr a una velocidad impresionante, se posiciono detrás del coche, Zane de la ventanilla dejo caer dos granadas, el sujeto se alejó hacia un extremo lateral de la carretera, las granadas explotaron elevando hacia el extremo lateral izquierdo el camión, se giró arrastrándose por el suelo, el jefe se lanzó del auto con su armamento antes de que fuera arrastrado, rodo por el asfalto, se puso de pie y comenzó a correr a campo abierto.

Zane desenfundo su Katana y se introdujo en el bosque, las puertas del camión se abrieron y varios sujetos salieron detrás junto con Nicholas.

— ¡Formación! —Exclamo autoritariamente—No se detengan y avancen ¡Posicion de cacería!

Una muchacha se acercó a Nicholas, sus oídos emitieron un vapor intenso—A tres kilómetros de distancia.

—Perfecto.

De pronto la muchacha se llevó puesto un alambre que le rebano las piernas, se fue al suelo de bruces, este alambre activo un mecanismo improvisado, el cual estaba atado al seguro de una granada ubicada arriba de los árboles, esta cayo delante de todos, se dispersaron con velocidad dejando a la mujer a su suerte

— ¡Jefe no me abandone! —Vocifero con desespero.

— ¡No se detengan! —Vocifero Nicholas.

La granada exploto volando el cuerpo en mil pedazos.

— ¡Tsk! —Rabio Ren — ¡Lara! ¡Maldito!

Ren llevaba un equipo ligero, su cabello oscuro se agitaba con el viento, su velocidad era impresionante, portaba un fusil en sus manos,

—Perdimos al rastreador Jefe ¿Qué hacemos? Es un conejo veloz—Comento Chase, el curador del equipo.

—No se separen y tengan cuidado.

Atravesaron el bosque a una velocidad impresionante.

De pronto Haru se vio nuevamente frente a Blyke, su mandíbula estaba tensa—Infeliz traidor.

— ¿Qué demonios fue eso? ¿Era Nicholas? ¿Por qué pelean?

—Porque seguramente se negó a brindar ayuda y planea seguir ocultándole a Seth lo de tu hermana y tu sobrino o sobrina, quiere hacer las cosas por su cuenta.

— ¿El jefe tiene posibilidades? ¿Viste lo que era su piel? Un roce y te deja una cicatriz de por vida.

—Zane tiene el noventa por ciento de probabilidades de meterle un tiro en la cabeza y el setenta por ciento de decapitarlo ,volverá, a fin de cuentas es Zane, el mejor espadachín del mundo—Se giró y se retiró.

— ¡Espera! ¡¿Quieres ir por un café?!

—No consumo cafeína, me altera los sentidos.

—Un te entonces, hay de muchas clases.

El se detuvo—Bien, un te suena bien, frutilla, me gusta el te de frutilla.

—De paso cuéntame—Se acercó corriendo hacia el— ¿Qué demonios fue eso? Parecía que tenía cobertura exclusiva en vivo y en directo, atravesé las cosas como en un videojuego.

—Es parecido al don de Zane, él puede ver los alrededores y actuar como un perro de caza, su visión penetra cualquier cosa, funciona distinto en mi caso, es una visión del futuro, sucederá dentro de poco.

— ¡Tenemos que avisarle!

—No es necesario, se molestara, te lo digo por experiencia, se molestó la última vez que le mostré el futuro, no me hablo en seis meses.

— ¿Qué le mostraste?

—El combate con su hermano donde Danny lo cristalizaba en un instante y lo explotaba en mil pedazos.

—Ooooooooh... con razón...

—Se molestó demasiado, no tienes idea...

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