deseos

Erik Y Felipe se acercan nuevamente a Alejandro, queriendo saber más de Ana, pero este solo tiene sus ojos y pensamientos en aquella pelinegra y en un momento, solo ve como aquel hombre con el que ella estaba bailando, le pasa la mano por la cintura y la mueve suavemente en su espalda. Ana por su parte, se percata de la mirada de Alejandro, sabía que este chico necesitaba un poco de ayuda para que despertara y dejara de ser tan tímido, a lo que pone su mano sobre el pecho de aquel hombre. Para ella eso, no era nada, pero en esa época podía significar mucho, ve al chico a la cara un poco sonrojado, está a punto de hablarle, pero solo siente Cómo es jalada del brazo hacia un lugar, que se supone es como un balcón. Los archiduques y la madre el emperador miran aquella escena y solo ríen, pues, al parecer ahí ya pasaba algo y estaban seguros que sí, iba a haber boda.En el balcón Alejandro tenía Ana con las dos manos agarradas por encima de la cabeza de esta y un poco agitado se acerca y le dice, que quiere lograr con esa actitud y estando a punto de besarla se da cuenta de lo que está por hacer y viendo que la tenía contra la pared, con las piernas un tanto separadas y él en medio, retrocede un poco, Aunque a decir verdad, no le faltaban ganas de besarla, Pero sabía que eso no estaba bien visto, pues era deshonrarla como mujer y de verdad él quería ir en serio con ella y tratarla con mucho respeto y así, mientras él, pensaba razonablemente, Ana por otro lado era caso perdido Pues estaba esperando a que por fin hiciera algo y solo lo miraba con Lujuria en sus ojos, cuando Alejandro estaba por alejarse de ella está lo jala para nuevamente, quedando muy cerca el uno al otro y pregunta con voz entrecortada, Pues se estaba conteniendo de no saltarle encima y le dice: Su Majestad qué es lo que lo tiene así? si me dice, Quién quita y le puede ayudar. Alejandro solo Mira sus labios con ganas de probarlos y le dice, qué por qué le tocó el pecho a aquel hombre, a lo que la escucha responder: Su Majestad si está celoso de eso, Solo dígame usted donde quiere que lo toque? le dice acercándose aún más y pasando su mano por el pecho del chico, ella lo coge del cuello y sin pensarlo une sus labios con los de él, dejándolo con los ojos bien abiertos, pero sin pensarlo mucho él le corresponde, Pues también moría de ganas por hacerlo, pasa sus manos por la cinturade ella, Ana no podía de la felicidad, de verdad Alejandro la ponía a revolucionar y sin perder más tiempo se separa un poco de él, para cogerle una mano y llevarla a su pecho. Alejandro no podía creer lo que estaba haciendo, su amigo ya estaba más que despierto, lo que lo hacía sentir un poco apenado Porque estando tan pegado a Ana era lógico que ella, ya lo había sentido, mientras Ana le decía mirándolo a los ojos: mi buen emperador, ¿sabe que tengo pensamientos pecaminosos con usted justo ahora? esta le lleva la mano dentro del vestido por un lado del escote y como no llevaba sostén, podía sentir el tacto directo de la mano de Alejandro, por lo que soltó un gemido debido a lo mucho que deseaba. Alejandro en medio de su timidez y excitación la pego mucho más a él y la empezó a besar rudamente. Ana estaba en El séptimo cielo, pero pudo reaccionar a tiempo, pues la idea era provocarlo y en un solo movimiento sacó la mano del chico y le susurró al oído,- así como no llevo sostén, tampoco llevo ropa interior. y sin más, salió dejando a un Alejandro solo a punto de darle un paro cardíaco. Cuando este reacciona se da cuenta que ella ya no está, se pasa la manos por el cabello diciendo: ¿qué diablos acaba de pasar?! y Qué significa, que no lleva ropa interior, sentía que en cualquier momento iba a mojar sus pantalones, se tomó 10 minutos para calmarse, y acomodando a su amiguito bien, para que nadie notara su estado, regresó al salón; pudo ver a Ana muy feliz hablando con los archiduques y su madre, sin saber qué decir, se acercó pero no pronunciaba palabra alguna aún estaba en trance procesando lo que había sucedido. Camila Lo miró y sabía que algo había pasado en ese Mirador, lo que no le desagradaba, Pues de verdad esperaba que Ana y él pudieran llegar al matrimonio, la verdad era, que Ana le gustaba bastante bien para su hijo

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