baile

Después de un mes el archiduque recibe una carta del emperador, donde le pide ir al castillo- de seguro es para terminar el tema pendiente del compromiso pensó- cuando el archiduque llegó, después de saludar con todas las formalidades siguieron al despacho del emperador, este se veía nervioso, pero sin más, soltó la sopa a lo que el Duque guardó silencio para luego decir que no estaba de acuerdo, porque el futuro de su hija no era un juego. Alejandro le explicó con paciencia diciendo que como ellos no se conocían antes, él solo pensó en cancelarlo porque no quería casarse solo por arreglos de sus padres, pero una vez Que conoció a Ana había cambiado de parecer, pues ella había llamado bastante su atención, al archiduque le pareció lógico lo que Alejandro le había dicho y como tenían buena relación decidió darle una oportunidad aunque le dejó claro que eso iba a depender solo de su hija y no de él. Alejandro estaba seguro de que ya estaba más que ganado ese tema, pero qué equivocado estaba y Ana se iba a encargar de demostrárselo. Cuando el archiduque llegó a casa le comentó a su esposa lo hablado con el emperador, los dos estaban de acuerdo en dejar que Ana tomara la decisión por ella misma y así la mandaron a llamar y decir lo que sucedía

Cuando Ana entró al despacho vio a sus padres un poco serios y extrañada preguntó: ¿por qué esa cara de preocupación, pasa algo? el archiduque se acercó y tomándola de la mano le dijo: Mi cielo, Recuerda que hace ya un tiempo dijimos que desde hace mucho tenías arreglado un compromiso con el emperador - sí padre, pero si mal no recuerdo ese emperador se retractó y quería romper dicho compromiso, no veo cuál es el problema- hija pues hoy me reuní con él y dijo que ya no le iba a cancelar.... QUEEE !!! dijo Ana exaltada. Esta se paró de inmediato, pues en sus planes no estaba casarse, eso significaba: No más libertad, "ya morí para el mundo" pensaba ella y yo con ganas de cogerme a Su Majestad buenote-El archiduque interrumpió los pensamientos de Ana diciendo, que habían programado un baile y ahí tenían la oportunidad de conocerse y ella era libre de tomar su propia decisión y que fuera lo que fuera ellos la apoyarían. Ana conmovida por sus palabras, soltó un suspiro y seguidamente los abrazó, pues no era cualquier compromiso sabía lo que había de por medio y sin importar que, ellos solo le daban tal apoyo, sin duda eran los mejores y por eso, siempre estaría para ellos de la misma forma incondicional como estaban para ella. En sus recuerdos Ana sabía de su compromiso, más no conoció a aquella persona, pero sin duda alguna lo rechazaría, pues no Estaba dispuesta a perder su libertad. El tiempo pasó y llegó el día tan esperado del baile, Ana tenía en mente lucirse esa noche, había mandado a hacer un vestido de una manera un tanto especial, por otro lado, Alejandro estaba más nervioso que nunca,quería que todo saliera bien. El momento de anunciar a los invitados había empezado y justo escuchó mencionar a las personas que estaba esperando, cuando Alejandro vio entrar a Ana se quedó sin palabras, su amigo Eric que estaba a su lado, tuvo que cerrar la boca, pues Estaba sin reaccionar. A decir verdad, Ana Lucía bastante...mmm seductora. Alejandro apretaba los puños. ¡Qué diablos piensa ella, viene a comprometerse conmigo o a seducir a otros hombres?!! dice un poco molesto, Erick solo podía reír con lo que escuchaba, pues nunca había visto a su amigo actuar así.

Llevaba un vestido muy atrevido por lo menos para esa época.

Era de color rojo, bien ajustado al cuerpo, con un largo a mitad de piernas,dejaba ver un pronunciado escote, con hombros descubiertos y una capa por encima que empezaba desde más abajo de los hombros, con mangas anchas y largas y tenía una cola que cubría más abajo del vestido el cual resaltaba cada una de sus curvas, pues tenía el famoso cuerpo reloj de arena, ella se sentía toda una diva.

Cuando Ana se dio cuenta tenía muchas miradas encima, tanto de hombres como de mujeres, unos admirándola otros con malos pensamientos y unos cuantos mostraban celos y envidia. Ana muy tranquila siguió avanzando con sus padres, hasta llegar al lado de una mujer a la que sus padres hicieron una reverencia. Lo mismo hizo ella y se dio cuenta, de que se trataba nada más y nada menos de su supuesta futura suegra, la madre del emperador, la cual se llamaba Camila. Ana solo podía mirar al lado y lado queriendo saber quién era el dichoso emperador, prometido de ella, pero solo pudo ver a lo lejos a Alejandro con dos hombres al lado y este la miraba fijamente, ella le guiñó un ojo para luego decirle a las personas presentes que iba a saludar a un conocido, a sus padres le pareció un poco extraño, ya que Ana no interactuaba con nadie, pues desde que hizo Debut en la sociedad años atrás, nunca salía ni aceptaba invitaciones a tomar el té, ni a ir a fiestas, ni recibía visitas en casa, pero por lo que vieron era al emperador al que se dirigía, todos estaban atentos a lo que sucedía.

Cuando Ana llegó hizo una reverencia, llamando la atención de aquellos tres hombres eran: Alejandro, su buen amigo Erick y un Marqués llamado Felipe muy buen amigo de aquellos dos también. Este último no le quitaba los ojos encima a Ana y Alejandro cuando se dio cuenta de eso, se molestó un poco. Más No sabía que le estaba pasando. Solo se acercó a Ana diciendo suave en su oído, señorita Ana, no comprendo que quiere lograr al estar vestida así? ella se separa un poco y dice, Su Majestad, ¿Acaso no me veo bien? y gira en sus pies dando así una vuelta completa, muy segura de lo que tiene. Los tres se quedan embobados mirándola, ella ríe disimuladamente, Pues era lo que justo le gustaba,llamar la atención de chicos guapos, como lo eran ellos. Aunque para ella el más atractivo era Alejandro, ella habla diciendo: a mí, en realidad, no me gusta ser egoísta y por qué no permitir que otros puedan ver un poco de lo que tengo y... no sé tal vez y esta noche pueda darle vida por lo menos a una de tantas cosas que Quisiera hacer. dice observando a los tres, con una mirada provocadora. Alejandro Respira profundo pues era bastante atrevida y diferente a aquellas chicas que solían conocer, la escucha diciéndole cerca de su oído; Su Majestad, usted también está como para quitarle la ropa y saborearlo todito!!! el carraspea su garganta, pues se sentía un poco caliente la cara y fijo y estaba sonrojado nunca nadie le había hablado de esa manera y menos en medio de tanta gente, en ese momento llega el archiduque junto a las dos mujeres, diciendo, emperador veo que se lleva bien con mi hija no hace falta que los presente formalmente,Ana solo Mira Alejandro apenas y podía pensar y sin darse cuenta, ya estaba hablando en voz alta: No puede ser!! claro, cómo Fui tan tonta? Alejandro, así se llamaba. Su Majestad. Cómo no me di cuenta?. Alejandro dice: Ana yo... ella lo interrumpe y teniendo en cuenta su plan inicial, decide jugar un poco con él.Y dice Bueno sea quien sea el día de hoy me presenté en este baile solo para dar fin a este compromiso, ya que, Su Majestad se arrepintió en medio camino.Camila la madre del emperador interviene a favor de su hijo, pues ya se había dado cuenta, que Ana llamaba la atención de Alejandro y dice: Ana hija, está bien si lo piensas un poco, yo sé que mi hijo es un tanto tímido, pero no era la intención de el, ocultarte Quién era en realidad. Esta, estaba hablando. Cuando solo pueden escuchar decir: tímido? pues lo que tiene de tímido lo tiene de bueno, El condenado este. Nuevamente Ana piensa en voz alta, haciendo producir Silencio en todos los presentes, Erick por su parte solo contenía la risa, pues Ana le parecía bastante atrevida. El archiduque le da un codazo a su hija, sentía pena ajena, ese comportamiento no era algo normal en ella, esta Solo dice: bueno en fin, ya dije lo mío y así este emperador esté como quiere. No me voy a casar con él, ella da la vuelta y deja a todos callados, por su parte los archiduques solo piden disculpas por el comportamiento inapropiado de su hija. Alejandro apenas y procesa lo que pasaba Y sin darse cuenta se dirige a Ana, pero antes de llegar a ella ve como un caballero, Se ofrece para bailar con ella y ella mirando Alejandro directamente a los ojos, sonríe y acepta.El emperador solo se queda a mirar como las cosas no salieron como él esperaba

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