Cap 14

...Santiago...

Cuando llegue del lugar en donde conseguí el medicamento para solucionar mi pequeño problema con Leila empecé a preparar algo de cenar para así poder fingir arrepentimiento y que nadie se dé cuenta de lo que voy a hacer después, la señora que me vendió el medicamento me dijo que se necesita de un examen especial para que puedan darse cuenta del medicamento en la sangre, con estudios normales no se detecta, me costó algo caro, pero eso no importa, lo único que importa ahora es recuperara a mis hijos y a mi esposa.

Mande a traer algo de comida rápida que era la favorita de Leila, sabía algunas cosas de ella porque tuvimos una relación más de un año.

Sé que se va a negar a tomar alguna bebida alcohólica conmigo por su embarazo por eso compre sumos preparados de fruta para que en ese pueda ponerla el medicamento y pueda funcionar mi plan.

Luego de dejar todo listo fui a ducharme y espera a Leila.

Justo cuando estaba listo escuche el timbre sonar y fui a abrir era Leila venía con una cara de muy pocos amigos, pero cuando la deje pasar y vio todo lo que prepare su cara cambió por completo.

_ Que es esto Santi? _ me pregunto y se podía notar la emoción en su cara, siempre me decía que desde la primera vez que me vio se enamoró de mí y que por eso no le importaba ser mi amante.

_ Una sorpresa para ti Leila, siento mucho todo lo que dije en casa de mamá, no estoy bien últimamente y algunas veces pierdo la paciencia muy rápido, de verdad lo siento chiquita, sabes que a pesar de nuestra situación tú eres alguien especial en mi vida y más ahora que vas a darme mi tercer hijo _ la dije tocando su panza y depositando un beso en su cabeza.

Ella lloró y sonrió a la vez, se notaba la felicidad en su cara el brillo en los ojos con lo que me miraba lo decía todo, es una buena chica, sé que no se merece lo que la voy a hacer, pero no tengo de otra su embarazo complica todo con Carolina.

_ Entiendo, yo sé que la situación con tu familia te frustra, pero yo estoy para ti lo sabes Santi _ dijo ella para luego pegar su cabeza en mi pecho y rodeo sus brazos alrededor de mí.

_ Vamos a cenar chiquita que ahora más que nunca necesitas comer, hay hamburguesas y papas fritas, los que te gustan, también sumo de durazno y plátano _ Le dije y su sonrisa aumento aún más.

_ Gracias por esto, sabes que a pesar de todo yo te amo Santi, y aunque tú vuelvas con tu esposa, yo quiero seguir siendo parte de tu vida por favor no me apartes de ti _ pidió ella con algunas lágrimas que se deslizaban por sus mejillas.

_ Tranquila chiquita, tú siempre serás parte de mi vida vas a ser la madre de mi tercer hijo, y sabes que yo también te quiero siempre en mi vida, pero debes de entender, que tengo que recuperar a mi familia, perderlos a ellos hablaría muy mal de mí y me perjudicaría en mi trabajo, por eso quiero que entiendas que nadie puede saber de tu embarazo al menos por ahora _ le dije mandando un cabello rebelde de ella detrás de su oreja.

_ Aunque me duela eso lo entiendo Santi, sé que llegue tarde a tu vida, pero eso no me impedirá amarte siempre _ me respondió ella aun llorando y depositando un suave beso en mis labios.

...Narrador...

Era de madrugada y una mujer mayor estaba sentada en el sofá en la oscuridad de la sala con un retrato en mano en donde había tres personas muy sonrientes.

La mujer acaricia suavemente con sus dedos el retrato y lágrimas salían sin parar de sus ojos.

Se preguntaba una y otra vez por qué tuvo que sé así las cosas, porque la vida decidió quitarle muy temprano esa persona quien era el amor de su vida, aunque haya pasado mucho tiempo ya el recuerdo de esa persona seguía muy presente en ella, y últimamente con todo lo que estaba pasando sentía que necesitaba muchísimo de esa persona.

_ No sabes cuanto te necesito, si tú estuvieras aquí conmigo nunca hubiese pasado todo lo que pasó, estoy tan perdida que no sé que hacer, yo sé que tú ya hubieses encontrado una solución a todo esto _ dijo la señora quien seguía llorando y también recorriendo el retrato con su dedo.

_ Iluminame por favor amor mío, ahora más que nunca te necesito, necesito que me des fuerza para enfrentarme a mi misma y de esta manera tratar de enmendar cada error que cometí.

_ Estoy tan cansada, que quisiera dormirme y no despertar nunca más, pero sé que esa no sería la solución a nada, no solamente tengo que enmendar mi error sino también de ese gran amor nuestro que a causa de mía se ha perdido por el camino _ siguió hablándole la señora al retrato y su llanto tampoco cesaba.

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