Conociendo a mi esposo

Al salir de la habitación del rey quise caminar un poco, la noche estaba fresca, no quería volver al sitio de los sirvientes.

Volví al riachuelo, me quite los zapatos e introduje mis pies en el agua. Era cálida, se veía pura y cristalina.

Era un buen momento para pensar que debía hacer, como voy a rescatar a la pequeña Ailyn, también debo encontrar la manera de volver a mi mundo. Por muy raro que parezca extraño a Dereck, él siempre estaba para darme los buenos días, buenas noches, mi malteada de fresa estaba siempre en mi escritorio, sabía que era él quien lo hacía. Lamento no haberle dicho lo que sentía en ese momento. Ojalá que encuentre alguien que lo ame, él se merece una buena vida.

Lucia: Creo que ya debe ser pasada la media noche. Que tranquilidad se siente en este lugar.

Decidí volver, lo mejor era ir a dormir, de regreso iba cortando algunas flores, haría un lindo ramo que pondría en la biblioteca.

Verónica: ¡Niña! ¿Donde estabas?

Lucia: Solo caminaba por ahí, ¿por que?

Verónica: Vamos a dentro.

Una vez en el castillo la señora Veronica comenzó a hablar.

Verónica: Los días de Luna llena no saldrás, son noches peligrosas. Todos nos encerramos en nuestra habitación cuando pasa la media noche.

Lucia: ¿Por que? ¿Qué pasa?

Verónica: El amo sale, no se como explicarte pero el no es el.

Lucia: ¿Como así?

Verónica: No razona, se convierte en otra cosa, va acabando con todos a su paso. Los días de Luna llena es donde él destruye reinos y expande su territorio.

Lucia: Entiendo es como si la oscuridad lo controlara por completo.

Después de ese cuento de terror, decidí irme a dormir…

La mañana llegó, el sol estaba más hermoso que nunca. La señora Veronica me pidió que le ayudara con algunas compras en el pueblo, yo encantada acepté. Hoy tenía una misión, quería saber sobre la verdadera Alice, lo más imponente quiero información de los niños raptados.

Me entregó la lista, Justo cuando iba saliendo el clima cambió, un viento helado azotaba todo el lugar. Tome un abrigo y me subí en el carruaje.

Lucia: El rey tiene problemas graves manejando sus emociones.

De nuevo había llegado al pueblo, pase a comprar lo que me habían pedido, también hice una parada en la pastelería. Me senté a comer , podía escuchar a las demás mujeres hablar, algunas me decían sangre sucia y otras estupideces.

Como si la vida me enviara un castigo , vi entrar a la baronesa del brazo de un hombre. Las personas murmuraban, yo seguía disfrutando mi postre.

Baronesa: ¿Que haces aquí?

¡Rayos, me vio!

Lucia: Vine a comer.

Baronesa: Tú padre no ha tenido noticias tuyas, ¿Que es lo que tanto haces en el castillo?

“Alice, tiempo sin verte”

El hombre que la acompañaba me habló. Intento tomarme de la mano pero la retire.

Lucia: No me toque señor.

Baronesa: ¿Alice que te pasa? Es tu esposo.

“Así que este es el famosísimo Lord Varon”

Era un hombre alto, cabello rubio, piel blanca y pálida, tenía buen cuerpo, sus ojos eran azules. Típico príncipe de los cuentos de hadas.

Lucia: Se quien es, solo que yo le pertenezco ahora al rey, no está bien que un hombre me toque.

Lord Varon: Estas diferente, eres toda una mujer.

“¿Acaso no es mi esposo? Se supone que me veía a diario, me falta una parte en esta historia”

Baronesa: Mi lord que cosas dices, es la misma que siempre ha visto, solo que ahora viste como una cualquiera.

Lord Varon: Nunca la vi sin maquillaje y sin sus vestidos grandes, ahora viste sencillo, debo decir que su figura resalta muy bien esposa.

“¿Esposa? Qué tal este”

Lucia: ¿Lord quisiera saber por qué no se opuso a que yo entrara al castillo?

Lord Varon: Alice sabes que es por el bien del reino.

Lucia: O sea que si soy la puta favorita del rey el reino será libre. ¿Algo así?

Baronesa: Cuida tus palabras, no es propio de una dama.

Lucia: Baronesa creo que no es de una dama que usted se pasee del brazo de un hombre casado ¿o si?

Lord Varon: Solo veníamos a hablar de ti, estaba preocupado.

Lucia: Claro…. Pero quiero contarles que cuando ustedes entraron todos los presentes murmuraban que mi esposo había encontrado consuelo por mi perdida Justo en medio de las piernas de la baronesa.

Baronesa: ¡Es mentira!

Lord Varon: ¿Alice qué pasa contigo? ¿Por que hablas así?

Lucia: ¿Como? Solo estoy diciendo lo que escuché.

Lord Varon: Alice yo siempre he tenido gran estima por ti, sabes que no nos vimos mucho por que mi trabajo me aleja del reino, siempre debo estar viajando así que era imposible verla.

“Este hombre es igual que mi verdadero padre, la misma excusa que utilizo con mi madre”

Lucia: Claro entiendo, llevamos 4 años de casados, ¿podría decirme cuantas veces nos hemos visto en estos años?

Lord Varon: Alice, lo siento mucho sé que han sido poco.

Lucia: ¡Dime!

“Espero que crea que es un regaño pues la verdad es que no tengo idea y necesito información.”

Lord Varon: Solo tres veces.

Lucia: ¡Exacto! Tres veces, y dígame usted cuántas veces tuvimos intimidad.

Batonesa: ¡Alice que estás diciendo niña!

Lord Varon: Solo la noche de bodas.

“Quisiera pensar que es por que la pobre Alice era una simple niña, espero que este hombre tenga humanidad en el corazón”

Lucia: Enronces Lord, se que tenemos un vínculo muy grande que es nuestra hija, la cual fue raptada y realmente no veo que usted esté angustiado, por el contrarío se la pasa con la baronesa de arriba abajo. Sabes que me arriesgo a decir que ella tiene el título de esposa tuya muy bien ganado, ¿cuantas veces han tenido sexo? Me imagino que debe ser muchas, pues la gente habla demaciado.

Lord Varon: ¡Como te atreves a decir esas cosas! Tu madre y yo solo nos estamos acompañando en el dolor. Tú eres mi esposa la mujer que amo.

“Casi escupo mi comida por la risa”

Lucia: Debo irme ya, me están esperando en el castillo.

Comencé a salir del eestaurante iba en busca del carruaje, Justo cuando estaba por subirme sentí que me tomaron del brazo.

Lord Varon: Eres mi mujer Alice, no te irás, quiero que me acompañes a casa.

Lucia: ¿Para que iría a su casa?

Lord Varon: Nuestra casa Alice, se que estás enojada por que no he estado presente, pero hoy quiero que estemos juntos.

Lucia: ¿Como que juntos?

Lord Varon: Se lo que estas buscando de mi, debiste decirmelo, quieres que te haga mía en este momento así que vamos, cumpliré tu deseo.

“¿Que le pasa a este imbecil”

Lucia: Lo siento Lord pero creo que entendió mal, no estoy exigiendo su atención por el contrario quiero que le quede claro que es casi un desconocido para mi. La verdad hoy no lo reconocí en la pastelería.

“Sentía como me agarraba cada vez más fuerte”

Lord Varon: Estas mintiendo, sabes muy bien que tienes la suerte que yo me casará contigo, eres una sangre sucia, si no estás conmigo no estarás con nadie, quien va a querer tocar a tan inmunda mujer.

Lucia: ¿Tan inmunda que está deseoso por tenerla? Le agradezco que me suelte, me están esprando en el castillo.

Lord Varon: Ya se lo qué pasa, te sientes con autoridad ahora que eres la perra favorita del rey muerto, dime que se siente hacer él amor con una bestia. ¿te gusta?

Lucia: Tener sexo con la bestia fue lo peor del mundo.

Lord Varon: Lo vez tengo razón.

Lucia: Así es, ¿sabes que fue lo peor? Que esa bestia abusó de mi cuando yo tenía solo 14 años, me dejó embarazada. Es realmente un inmundo animal.

“Me solté de su agarre y le subí al carruaje”

Antes de que arrancara me asomé por la ventana y me desahogué.

Lucia: Una cosa más Lord, no necesito nada de usted, pues no se alcanza a imaginar el hombre tan apasionado que es el rey en la cama. Pasan días donde no puedo ni caminar por la rudeza de sus embestidas. ¡Una delicia!

El carruaje comenzó andar, escuchaba los gritos del hombre. Yo solo reía, realmente es un imbecil si cree que me voy a dejar intimidar por el.

El carruaje se detuvo de una manera brusca.

Lucia: ¿Que pasa?

Cochero: Lo siento señorita, una rueda se soltó, debemos repararla.

Me baje y vi la magnitud del daño, eso no se arreglaría rápido y menos a la mitad de la nada donde estábamos.

Lucia: ¿Señor cuánto tardaré en llegar al castillo si camino?

Cochero: Unas 5 horas quizás.

Lucia: Me iré caminando, si lo arregla espero verlo de camino, pediré ayuda si veo alguien.

Cochero: Puede ser peligroso que camine por ahí.

Lucia: Estaré bien, mejor pediré ayuda.

Deje todas mis compras en el carruaje y comencé andar, el camino era largo pero el paisaje era hermoso, vi como la noche llego, cada vez se hacía más oscuro, la luna alumbraba tan imponente. Escuché ruido entre los arbustos, comencé a correr escapando del lugar, algo que he aprendido de las películas de terror es que no debo ir a revisar de donde viene el sonido, fijo fijo el villano sale y te da una muerte segura.

No quiero detenerme a mirar, sentía que algo se acercaba entonces se para frente a mi.

Lucia: ¡Ah! No se quien eres ni lo que eres, pero créeme que no tengo mucha carne si es que me vas a comer.

“Miraba para todos lados, ¿por donde escapo?”

La criatura se iba acercando, así que comencé a correr de nuevo rumbo al bosque.

Escuchaba que volaba sobre mi, no pude fijarme que el camino se me había terminado y terminé cayendo por un barranco.

Cuando por fin me detuve en la caída, sentí que que algo me lastimaba la pierna, al mirarme una rama se me había inscrutado en el muslo, conté hasta tres, lo saqué , hasta aquí me acuerdo pues creo que me desmayé.

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