Cap 7 "Drogados"

Mónica se preparó, se puso un tapado gris y un pantalón al cuerpo, tenía puesto una bota de cuero alto. Tomaron el vuelo para Estados Unidos.

Mónica se había echo una costumbre, cada año cuándo Alma cumplía años de muerte, Mónica se iba a visitarla y dejarle flores en su Memoria.

Por la tarde estaban aterrizando en Boston, Mónica tenía bajo su poder a unos guardas espaldas y choferes en Boston, por lo que rápidamente fueron recogidos.

Llegaron en el cementerio, Mónica había pasado antes por unas flores Margarita, ella le había preguntado una vez a Eloah que flores le gustaban a Alma y desde ahí cada vez que venía le traía esas flores. El portero ya conocía a Mónica, la dejo pasar, Adler se quedó en el Auto.

Mónica se cubría con un paraguas lila, camino un rato hasta llegar a la par de una persona alto.

- Hola.. - Dijo Mónica saludando a Eloah

- Qtal.. sigues viniendo a pesar de que te dije que no era necesario - Reclamo Eloah Narváez.

- Yo le debo mucho a ella, porfavor no me prohibes hacer esto

Mónica sentía una pena increíble cada vez que llegaba el día que murió Alma, no sabía porqué su corazón saltaba de Alegría cuando estaba con la familia Narváez o Con Samantha. Lo mismo pasaba con Josh, se sentía tan cercanos con ellos.

- No tienes porqué sentirte así, ella ya había tomado esa decisión antes de conocerte, su muerte fue prácticamente un regalo para ti - Dijo Eloah

Mónica lo escuchaba cuando acomodaba las flores, cuándo terminó se paró nuevamente y miro a Eloah.

- Comprendo eso, pero yo quiero hacer esto - Dijo ella, luego se dió la vuelta y camino hacia la salida, Eloah camino detrás de ella y los dos salieron deo cementerio

- Cuídate Mónica, para todos eres muy preciada, más para Samantha, Josh y mis Padres - Mónica se quedó quita al escuchar eso y se dió la vuelta

- Lo haré, yo sé que ellos me aprecian y que hace 5 años tengo dentro mío parte de la persona que ustedes quisieron tanto - Dijo ella

- Para mi eres como una hermana...

Mónica se dió la vuelta y sus lágrimas cayeron, subió en el auto y Adler la miró. Luego vio al hombre parado en dónde ella estaba y no entendía que pasaba. Aquel hombre se subió en su auto y luego se perdió, parecía el auto del señor Narváez. Pensó Adler pero nunca vio en persona a ese hombre y menos su coche.

Mónica se acomodó en la silla y dijo al chófer.

- Porfavor llévame en la casa de los Narváez - Dijo Mónica, refiriéndose a los Padres de Alma. Lo único que ellos habían pedido a Mónica fue que los visitara cada año. El chófer ya conocía lo que tenía hacer y pronto llegaron en la Mansión Narváez.

Ella se bajó y dijo

- Puedes bajar si quieres estaré un rato ahí adentro - Mónica caminó en dirección hacia la entrada la dejaron pasar

Sandra y el señor Alan se pusieron felices al verla. Ellos se sentía muy cómodos con la presencia de Mónica.

La recibieron con besos y abrazos y luego se pusieron a hablar. En la casa había fotos de Alma por todas partes. Cuando Adler entró se impresionó por las fotos de la chica, Adler se presentó enfrente de ellos y estuvieron ahí hasta la noche. Cenaron y luego Mónica decidió que ya era hora de irse.

Ambos se fueron nuevamente en Alemania, Mónica durmió todo el caminó, al amanecer estaban llegando. Adler la cargo en el auto y hubo fotógrafos que captaron el momento.

En el transcurso del día, Mónica estuvo asistiendo a unas reuniones en su empresa de Modelaje, firmaba permisos y ponía todo en orden. Para la tarde vio el periódico yendo en su Mansión. Seguía un poco desanimada pero cuando vio las imágenes sonrió y su corazón empezó a latir fuertemente.

"La pareja de la señora Brown, se ven muy enamorados" Decía la portada del periódico, Mónica solo sonrió y no hizo nada para que ese reporte desapareciera.

Llegó en su casa y ahí estaba su suegra esperándola. Cuando entro dejo su bolsón en un lado

- Oh, por fin llegas.. me preguntaba dónde estabas - Dijo Fernanda

- Hola suegra, como está

- No nada de suegra ubícate, yo no soy nada tuyo

Mónica suspiro y se callo lo que le iba a decir

- Que hace aquí? - Pregunto ella

- Quiero que me expliques esto - Tiro el periódico en la mesa y Mónica miró - Porque Adler te estaba cargando y porque los periódicos no ah desaparecido

- Nose.. estábamos en un viaje y yo estaba.. muy casada.. creó

- Hay no me vengas con tus ridiculeces, Adler no te amara nunca, porque el ama a otra mujer, todo lo que está haciendo por ti, ten por seguro que es por empatía y pena

A Mónica le dolió escuchar eso, quizás sea cierto.. porque hoy Adler ni la saludo y se volvió frío con ella. Porque actuaba así con ella?

Mónica tragó saliva y no dijo nada

- Así, así me gusta verte, calladita...

- Debería irse señora... Creo que usted y yo no tenemos cosas buenas que decirnos - Dijo Mónica y Fernanda se ofendió

- Me estás echando? Es eso, mira igualada a mi no me dices que hacer... Yo voy y vengo en dónde se me plazca

- La igualada es usted y déjeme decirle que esos pases vip y entrada que tiene es gracias a mí. Así que ubícate

Shplash* Bofetada*

Adler llegó en ese momento y vio lo que estaba pasando.

- Que sucede aquí!! - La voz fría de Adler asustó a las dos mujeres - Madre porque haz hecho eso

Mónica tenía la mano en su rostro, jamás nadie la había golpeado antes. Cómo se atreve esta mujer...

- Me estaba faltando al respeto tu mujercita... - hizo un incapié Fernanda al decir todo eso

- Mónica que pasó - Pregunto Adler

- Señora Fernanda le diré esto, por primera y última vez y en frente de su hijo. - Mónica tenía los ojos rojos, le golpeó fuerte Fernanda

- ah mira nada más, ni te callas - Dijo Fernanda

- Madre porfavor

- Que sea la última vez que me pone una mano encima o no respondo. Usted y toda su familia depende de mí, o acaso olvidó el contrato, yo no la voy a soportar por mucho tiempo si viene en mi casa!! - grito Mónica, se alteró - A faltarme el respeto a mí. Yo si me merezco respeto ante todo, porqué no se olvide que usted ahora está siendo conocida gracias a mí, te gustó o te lo digo más claro

Tanto Adler como Fernanda se quedaron callados, Los dos jamás imaginaron que Mónica diría esas cosas.

- Así que de ahora en adelante si va a venir en mi casa avisé primero - Mónica agarro su bolsón y salió en el medio de la sala - Que todos escuchen yo soy la que manda aquí y encima mío nadie pasa, la señora Fernanda tiene prohibido la entrada en mi casa si antes de venir no avisa!!

Mónica estaba bastante alterada.. temblaba.

- Si quiere seguir disfrutando de mi dinero es mejor que se mantenga alejado de mi Señora y perdóname Adler pero tú Madre desde que nos casamos no ah hecho más que meterse en nuestro Matrimonio.

- Madre vete luego hablaremos - Ordeno Adler

- Pero no escuchaste lo que me dijo

- Si la oí!! Vete te acabo de decir, está es nuestra casa y deja de meterte en nuestro Matrimonio - Fernanda agarro su bolsón y salió molesta de la Mansión.

Que le pasa, pensé que la tenía controlada, cómo salió de control.

- Tonta, tonta!! Porque la golpeaste Fernanda Müller, acaso has olvidado quien es!!!

Fernanda se retaba así misma reclamandose porque ah hecho eso, en cambio Mónica estaba bastante alterada, subió las escaleras sin mirar atrás, Adler se sentó en el sofá y se pasó su mano por su cabello, nervioso.

- Señor Adler no quiero ser entrometida.. pero este no es la primera vez que su Madre ofende a la Señora - Dijo Raiza y Adler lo miró

- Cuál es tu mision en esta casa Raiza? - La mujer palideció al escuchar eso

- Como dice.. no comprendo

- Dime cuál es tu mision, porque estás aquí

Raiza retrocedió y no sabía que responder.. como es que el señor Adler se dió cuenta?

- Piensas que no me doy cuenta que cuidas más a Mónica que hacer cualquier otra cosa, dime Raiza

- Soy la Nana de Mónica, ella estuvo enferma mucho tiempo y es por eso que el Viejo Brown me encargo a Mónica

Adler la miró, la mujer no tenía razgos de estar mintiendo, asi que Alder asintió y luego se fue.

6 Meses después...

Mónica estaba en la casa sentada en el jardín, cuando recibió un mensaje de invitación para la boda de Sam, la boda sería celebrada dentro de 15 días.

Mónica después de haber tenido esa discusión con su Suegra, Adler la evitaba, parecía estar molesto con ella, pocas veces le dirigía la mirada o el saludo. Pero hoy tenían que arreglarse y comportarse como parejas normales ya que deberían asistir a una reunión con los socios de la empresa como Marido y Mujer.

Llegó el medio día y Alder llegó en la Mansión, busco a Mónica con su Mirada.

- Hola, cómo estás? - Está vez Mónica saludo primero

- Bien y tu, estás lista para está noche?

- Sí, más tarde iré en un salón y luego ya estaré lista. - Respondió Mónica felíz

- Bien yo subiré a hacer algunos trámites de último momento

- Si, oye Adler..

Adler se quedó en su lugar y miro a Mónica.

- Tenemos una invitación para la boda de Samantha Kinsgley y Eloah Narváez en 15 días, espero que no te olvides

- Está bien, lo tendré en cuenta.

Mónica asintió y volvió a hacer unos diseños para la nueva colección.

Las horas pasaron y Mónica se fue a un Salón, se arregló su cabello y se maquillo, el vestido que uso era muy hermoso, color verde, tenía un pequeño encaje desde el costado de sus pechos y bajo hasta su cadera, estaba muy hermosa y sexy ya que el vestido le quedaba al cuerpo. Cuando bajo las escaleras Adler se sorprendió al verla tan guapa.

Le dió su brazo y ambos llegaron en la fiesta como todo unos enamorados. Sonreían y tomaban copas juntos. Las mujeres miraban el vestido de Mónica, ya que era un diseño único. Fernanda su marido e hija tambien llegaron.

Alicia quien era una cuñada un poco peculiar era muy divertida y para nada era mala, Fernanda quería que ella fuera mala con Mónica, pero ella no quería eso, es más estaba trabajando en un plan para esta noche.

Hubo algunas palabras de aquí y para allá, agradecimiento a Mónica y Adler por haber apoyado una nueva campaña.

Al final todos celebraron, ya estaba haciendo bastante tarde, Mónica se quería ir porque todos ya se están yendo. Hay fue que Alicia trajo dos copas para su cuñada y hermano.

El de Adler contenía un líquido raro, insistió en que ambos tomarán ese último vaso, ambos tomaron y para unos 15 minutos Adler tenía mucho calor, y solo quería salir de ahí. Mónica en cambio se sentía un poco mareada.

Ya después Alicia los dejo ir, Ambos se subieron en el auto y Adler iba muy confundido, no entendía porque de repente sentía tanto calor, se quitó su chaqueta, y su corbata.

Al llegar en la Mansión minutos más tarde, Mónica no podía ponerse más de pie, Adler la tuvo que cargar y la llevo hasta su recámara.

- Mónica quítate tú ropa, oye me escuchas - Acercó Adler su cara con la de Mónica y la beso, está respondió con un beso cálido. Abrió sus ojos, seguia mareada.

- Que haces Adler

- Mónica te deseo - Adler arrinconó a Su esposa y la empezó a besar.

- Mmmm, mm, Adler espera... No..

- Shh, silencio...

Mónica quería parar a Adler, pero fuerzas no tenía y poco a poco iba nublado se más su vista

Para un Adler drogado fue fácil quitarle la ropa a su mujer y hacerla suya, esa noche Mónica insistió en mantenerse despierta, quería sentir todo el cuerpo desnudo de su Esposo.

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