Cap. #9

Paimon se apareció frente a Aurora y está se sorprendió al ver el gran demonio en todo su esplendor.

Aurora solía escuchar qué los demonios eran horribles y tenían un olor putrefacto, o un olor a azufre, pero Paimon era diferente. Era un demonio guapo, alto y fuerte, pero dominante. Su olor era único, era un olor que la atraía y la incitaba a querer abrazarlo para estar en sus brazos fuertes y musculosos.

Por otro lado, Paimon quedó estupefacto cuando vio el rostro de Aurora. Era idéntica a su hermana gemela, pero Aurora tenía una aura dorada que la cubría. Paimon se acercó a ella, la olfateo y sintió su propio olor en ella.

Pensamientos de Paimon: 'Esta mujer es interesante, nadie aparte de mi la a tocado'. _ Paimon sonrío feliz ante aquel pensamiento.

Mientras, Aurora cerró sus ojos, sintió una calidez excitante y embriagante. Paimon nunca tuvo idea de que eran hermana gemelas idénticas. Entonces comprendió porque se había equivocado con esa mujer.

Lamya estaba arrodillada en el suelo, estaba nerviosa y no se movió ni un centímetro.

-¡H...hola!. Soy aurora. _ Aurora estaba un poco asustada y tímida, así que se despegó un poco de Paimon.

-¡Hola!... _ Paimon sonríe_ ¿Este es mi pequeño bribón?. _ Paimon toma al pequeño Samael y lo carga._ Ya debes saber mi identidad, Soy Paimon Principe del 7mo infierno.

Pensamientos de Aurora: '¿Se está riendo o me está enseñando sus dientes para asustarme?'. _ Aurora esta mirando a Paimon en silencio, analizando todas sus expresiones.

Pensamientos de Paimon: '¿Por qué me ve así está mujer?, tal vez le gustó mi hermosa sonrisa'.

-¡tsk! ¡tsk!... ¿Qué ha ocurrido que han decidió contactarme?. _ Paimon tiene sus sospechas que algo malo está ocurriendo.

-!Cazadores de demonios!. _ Aurora exclamó con prisa._ Se llevaron a mi pequeño Samael y lo lastimaron. También lastimaron a mi amiga Lamya, ahora están buscándonos por todas partes y no podemos salir. _ Después de terminar de hablar suspiró profundamente.

-¡Papá!... _ El pequeño Samael sonríe.

-Yo me haré cargo del problema, pero me llevaré a mi hijo conmigo _ Paimon le sonríe a Samael.

Cuando Aurora escucho las palabras de Paimon, se sorprendió y las lágrimas empezaron a caer de sus ojos. Samael vio la tristeza en Aurora y miro a Paimon con el ceño fruncido.

El pequeño Samael se comunicó con su padre, solo ellos se entendían y Lamya quien estaba sentada en el suelo. Aurora se sentía fuera del pequeño círculo.

-Ella es mi madre, no me iré sin ella. La salve cuando me dio a luz y me ama como soy. _Samael está enojado con Paimon. _ Tienes que tratarla bien, si quieres que te lleve y te traiga al infierno. _Samael no está dispuesto a dejar a su madre.

-¡Pequeño mocoso! ¿Me estás amenazando? _ Paimon le gruñe.

-¡Si!, mi madre puso su vida en riesgo. Si no hubiese sido por ella, yo estaría en una urna siendo usado por los cazadores._ Samuel señala a Lamya. _ Ella es Lamya, es mi sirvienta personal y también estuvo en peligro por mi._ Samael no quiere dejar a su madre y a Lamya.

-Si dejas que sea mi esposa... la llevaré con nosotros. _ Paimon expresa sus deseos.

-No puedes obligarla. Si ella te acepta sin usar tu poder sobre ella y si no la maltratas, puede ser tu esposa, pero si la intimidas te la verás conmigo _ Samael lo miró con el ceño fruncido y dudando un poco de su padre.

Mientras Samael y Paimon se ponían al día con los detalles de los cazadores y lo ocurrido meses atrás, Aurora se acercó a Lamya.

-¿Sabes que están hablando? ¿Puedes decirme?. _Aurora Siente curiosidad por la conversación entre padre e hijo.

-El príncipe acabará con la secta de cazadores, nos llevará con él y quiere que usted sea su esp... mmmm... _ Lamya fue interrumpida por Paimon.

Paimon utilizo su poder y le silencio la boca a Lamya. El pequeño Samael fue entregado a Aurora.

Aurora se quedó mirando a Paimon cuando se le acercó, su parecido con el pequeño Samael era bastante. Su pequeño bebé era un mini Paimon.

-Preparen sus cosas nos iremos en un jet. Tienen que utilizar los trajes que encargaré. Los periodistas estarán esperando cuando aterricemos. Es la mejor opción para presentar al pequeño como mi hijo ante el mundo.

Paimon dejo algunos demonios al cuidado de su familia y se fue con otros directamente a la secta de cazadores.

-Bebé, dile a mami ¿qué está sucediendo?. _ Aurora siente mucha curiosidad.

-Mamá, estaremos bien. Lamya y yo podremos recuperarnos totalmente en la casa de mi padre. ¿Estás de acuerdo?. _ El pequeño Samael pregunto al final un poco entusiasmado.

-Por ti bebé, hago lo que sea. _ Aurora sonríe felizmente.

-Mamá tienes que llevar el agua, papá es como yo. No tengas miedo de rociarlo cuando lo necesite, yo te estaré apoyando y mi abuelito Lucifer también.

-Aurora... es mejor tener cuidado, el señor es el príncipe del 7mo del infierno y si lo ofendes puede arrancarte la cabeza. _ Lamya está asustada.

-Mamá confía en mí. El no te hará daño y si lo hace te llevo lejos. _ Samael le da seguridad a su madre.

Después de su Pequeña charla los tres fueron por algunas de sus cosas personales y fueron a ponerse

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Mientras, Paimon y su legión de demonios a cargo, llegaron a la secta de cazadores y destruyeron toda la secta. Algunos sobrevivieron porque no estaban en el lugar en ese instante.

El padre de Dylan era el jefe de la secta de cazadores y este cayó muerto por Paimon.

Después que Paimon y su legión de demonios acabaron con la secta de cazadores, Paimon volvió a la casa de Aurora.

Aurora se encontraba en su habitación, dos mujeres demonio se encontraban encargándose de ella. Debían dejarla aún más hermosa y reluciente de lo que ella era.

Paimon se encontraba dando vueltas en la sala y Lamya le dio un poco del café especial que Aurora preparaba para lo demonios.

-Esto es exquisito y poderoso. ¿Quién te enseño a preparar está bebida?. _ Paimon estaba saboreando y disfrutando el café especial.

-La señora... es la que preparaba este café especial para los demonios, cuando teníamos la cafetería. _ Lamya se acongoja un poco.

A Lamya le encantaba estar en la cafetería, era un demonio de un rango bajo y se sentía útil ser reconocida junto a Aurora por los demonios que visitaban la cafetería.

-Será una buena esposa. _Paimon sonríe.

Aurora término de prepararse, bajo las escaleras y se presentó ante Paimon. Este al verla dejo caer su café especial y quedó boquiabierto.

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