Capítulo Nº17

El lunes por la mañana Rosaura se levantó con el sol radiante que entraba por la ventana. Estaba más que feliz, hoy comienza a cursar sus clases. Después de varios meses de ahorrar, al fin tuvo el dinero suficiente para cubrir la matrícula y se pudo inscribir en abogacía. Se encuentra en su humilde cuarto buscando en el ropero algo decente que pueda lucir en su primer día y se da cuenta que no tiene nada apropiado para la universidad. Casi no tiene ropa y la poca qué posee son más bien para su trabajo, son con transparencias o muy ajustada. Al final se decide por un Jean, una blusa suelta, que suele usar como vestido, y botas, se mira al espejo y está conforme con el resultado.

⎯ ¿Estoy bien, Mr. Pepe?⎯ le pregunta a su gatito.

⎯ Miauuu⎯ dice y enrolla su cola en sus piernas.

⎯ Gracias, se que estoy hermosa.

Acaricia la cabeza de su bebé, recoge un par de lapiceras y un cuaderno y sale con una sonrisa en su rostro, hoy va a ser un gran día, solo debe tomar dos colectivos y comenzará  con su nueva vida, proyectando un futuro mejor.

Va caminando muy feliz, no puede dejar de sonreír pero su buen humor se va apagando cuando a lo lejos ve al niño mimado, rodeado por unas chicas mientras él está apoyado en su Ferrari italiano. De solo pensar en lo que le dijo en el bar y en su dinero tiene unas ganas terribles de arruinarle el día. Se acerca a él toda altanera y le dice.

⎯ Hola, amor. ¿Qué hacen estas niñas rodeándote?⎯ se acercó y beso sus labios, él la mira muy serio, y ella está pensando en que logro hacer que se enoje.

⎯ ¿Qué dices? Yo no te conozco.

⎯ Corazón, deja de fingir, lo siento chicas, pero este muñeco ya tiene novia…y por cierto, su amiguito apenas funciona, ya saben lo que dicen, si el hombre tiene un buen auto es para complementar alguna carencia.

 Señala su miembro y ve como se alejan y comienza a reírse, él la mira como si quisiera matarla, es la primera vez que ella siente miedo. Él la toma del brazo, la agarró muy fuerte y le dice.

⎯ No se quien eres, ni porqué te comportas asi pero te aseguro que esto te va a costar muy caro, ahora mismo te enseñaré cómo funciona mi amigo.

⎯ Adriano, era solo una broma.

⎯ Yo no soy Adriano y no se quien sea pero esta me la pagas.

⎯ Suéltame me lastimas y deja de fingir, se que eres tu.

⎯ Vamos, sube al auto o te lo haré aquí mismo.

⎯ Suéltame, estás loco.

Están forcejeando, la intenta subir al auto, cuando alguien la separa de su agarre, ese perfume es único y ahora comprende su error.

⎯ Deja a la señorita en paz, ella solo cometió un error.

⎯ Tu… ¡tu eres igual a mi!

⎯ Así es, mi nombre es Adriano Constantino Pérez, y tenemos que hablar.

⎯ No, esto no puede ser, no soportaba a uno y ahora son dos. Disculpa mi broma, será mejor que me marche y tu gracias por tu ayuda aunque lo tenía controlado.

⎯ De nada chillona, nos vemos en el bar y te explico que sucede.

⎯ Disculpa si te lastime pero lo que dijiste de mí no es cierto y creo que yo merezco una explicación.

⎯ Lo siento, adiós.

Salió lo más rápido que pudo de ese lugar, pudo notar el asombro del chico que la sostenía, ⎯ Y la verdad es que son dos gotas de agua, seguro hay una gran historia detrás de todo esto⎯ va pensando en voz alta, una costumbre que tiene desde pequeña.

Entró a clases y no se puede concentrar, el profesor de derecho Romano les pide un montón de libros y duda en poder costear la carrera, se da cuenta que todo es muy costoso y se arrepiente de su elección. Esta distraida y dibuja unos garabatos en sus apuntes y de repente ese perfume le invade su espacio personal, gira su cabeza y el tonto le sonríe, a su lado está sentado su clon y parece que siguen hablando, parece serio, trata de prestar nuevamente atención a la clase pero escucha a medias su conversación, es mucho más interesante que la clase que le esta dando sueño. Dicen algo de una carta, quiere seguir escuchando pero de repente el profesor termina la clase, junta sus pertenencias y se marcha. Hoy trabaja temprano así que no pierde tiempo en ir a cambiarse a la pensión y va al bar.

Al llegar ve a su jefe, que la está esperando, esta noche quiere que haga dos funciones y atienda mesas. Va por su delantal y comienza la rutina. La llaman de un reservado, solo ve dos manos agitándose cuando se acerca, se encuentra a los clones.

⎯ Buenas noches, soy Rosaura. ¿Qué desean beber?⎯ les dice sin prestarles mucha atención.

⎯ Rosaura queremos hablar contigo. Es por negocios.

⎯ Yo no sé qué se imaginan, yo solo bailo y no estoy para cumplir fantasías de enfermos.

⎯ ¿De qué hablas?

⎯ Seguro quieren tener sexo y yo no estoy a la venta.

⎯ Nada de eso. ¿Tienes un minuto?, es otra cosa⎯ los mira con desconfianza y luego se sienta.

⎯ Solo un minuto, tengo que seguir trabajando.

⎯ Como verás, somos hermanos, pero recién hoy nos vimos por primera vez. Él es Renzo y vino a España a buscarme, pero puso como excusa que se venía a estudiar aquí por culpa de su novia que es española.

⎯ Hoy con tu show de novia celosa espantaste a mis candidatas y ahora estoy en problemas. Mi padre viene este fin de semana a conocerla y no tengo a nadie que se haga pasar por mi prometida⎯ dice Renzo.

⎯ Y su idea es, par de clones, que yo finja ser tu novia solo por el fin de semana.

⎯ Así es chillona, y te pagaremos muy bien, ya no tendrás que sacar cuentas de cuánto cuestan los libros.

⎯ ¿Me estabas espiando?

⎯ Digamos que tengo buena vista y tú haces números muy grandes.

⎯ Tengo que ir al escenario, les traigo dos whiskies y la respuesta.

 Rosaura se aleja de esa mesa y piensa.

 ⎯ Es una locura, pero es verdad que yo le arruine el plan al pobre chico. Algo me dice que está escondiendo algo y su padre no sabe, me da cierta confianza, en cambio Adriano se nota que es más calculador y quiere sacar provecho de esta situación, no puedo confiar en él, aunque si tengo los libros ya no tendré que hacer doble función y podré estudiar más tiempo.

⎯ ¿Con quién hablas?⎯ le dice el cantinero.

⎯ Estoy pensando, dame dos whisky.

⎯ Ten y procura no hablar sola, asustas.

Le sonríe al cantinero y vuelve a la mesa con sus bebidas y les dice.

⎯ Acepto.

Vuelve por su ropa, hoy tiene un body negro transparente, ropa interior de encaje y botas de cuero, sube al escenario, es hora de comenzar con su espectaculo. Esta nerviosa, siente como una mirada penetrante la desnuda al ritmo de la música, busca entre la multitud y se encuentra con esos ojos negros, ahora se da cuenta que Renzo tiene ojos marrones y Adriano negros como la noche, será fácil de reconocer a cada una de los gemelos. Sigue enroscando su cuerpo en el caño, hoy preparo algo diferente, una sorpresa que hará que pueda pagar la universidad por lo menos un mes más, al llegar a lo más alto toma una soga con su mano y tira de ella, una cascada de agua cae sobre su cuerpo mientras se desliza por el caño, siente como la suave tela se adhiere a su cuerpo y queda de rodillas al público, el dinero vuela a sus pies, recoge todo y al terminar ve como Adriano se levanta, sube al escenario y la cubre con su saco.

⎯ Estás loca, se te nota todo tu cuerpo. ¿Cómo se te ocurre hacer una cosa así?

⎯ Es parte del show y la única forma que me den propina.

⎯ No tienes que hacer esto, si necesitas dinero, acepta nuestro trato y deja de exhibir tu figura.

⎯ Es un trabajo como cualquier otro y no eres nadie para criticar.

⎯ Puedes conseguir otro.

⎯ Disculpa, pero no es tan fácil como crees y ahora, si no te molesta, debo regresar a servir mesas.

⎯ Vamos, te acompaño.

⎯ No es necesario.

⎯ Hay muchos locos que te pueden hacer algo.

⎯ No pasa nada, y si alguien intenta hacer algo solo debo hablar y con mi voz chillona seguro se le irán las ganas de hacer algo conmigo.

Se saca su abrigo y camina rápido a su camerino, aún le duelen sus palabras, sabe que su voz no es la mejor pero la forma tan cruel en que se lo hizo notar la lastimó.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***