Plan de escape.

He recogido algo de ropa en un bolso de fin de semana, mis golosinas favoritas y mi ordenador.

Cojo mi coche para llevar a Marta a su casa . El chofer viene en cuanto nos ve de salir , tan servicial como siempre . Me dice que no hace falta que conduzca yo , que él me lleva a donde desee , que para eso le pagan . Le contesto que al ser fin de semana, me apetece conducir mi propio coche y pasar tiempo con mi amiga , que pasaré el resto del día con ella . Me dice que me espera mañana a la hora de siempre para llevarme al trabajo . Yo pongo mi mejor sonrisa : Por supuesto , hasta mañana, descansa .

Por dentro estoy pensando " atrápame si puedes , mañana estaré bien lejos " . Llegamos al garaje del edificio donde vive Marta , dejo mi coche allí aparcado y me da las llaves del suyo. No lo puedo creer ¡ El coche de mi amiga está destartalado ! No entiendo como puede andar esta cosa . En momentos como este preferiría que fuese como su hermana, un poco más ambiciosa y materialista y se hubiera quedado con uno de los cochazos que mi padre le puso a su disposición . Pero no hay nada que hacer , es orgullosa y obstinada como ella misma .

Marta : No subestimes a Paquito, es feito por fuera , pero fuerte como un roble por dentro , ya lo verás.

Yo : Paquito ¿ eh ?

Marta : Sí y no me mires así . Cuídalo, es mi compañero fiel .

Le prometo que lo cuidaré , le doy un abrazo y le prometo que estaremos en contacto.

Salgo por la otra entrada del garaje y me dirijo a la primera gasolinera para llenar el depósito . Paquito y yo lo vamos a pasar muy bien , puede que hasta nos hagamos amigos .

Compro unas botellas de agua y algunos aperitivos y me meto en la autopista . Afortunadamente la radiocasete funciona , así que puedo poner buena música, esa loca de Marta tiene los mismos gustos que yo .

El destino al que me dirijo es una locura total , es incluso ilegal . Voy a pasar unos días en la finca de mis abuelos . Mis antiguos empleados me adoran así que no van a ponerme impedimentos y los de la inmobiliaria no creo que vayan a asomar sus narices por allí . Ellos mismos dijeron que no se podía visitar hasta la primavera.

Dejé mi teléfono en el apartamento , llevo otro , cuyo número solo conocemos unos cuantos . No quiero que esa gente pueda rastrearme . Antes de apagarlo había cientos de mensajes de la diseñadora, de los del catering , de invitaciones , de flores , etc

A Marta al principio esto le parecía divertido y hasta le parecía que era tonta por rechazar la oferta, pero al ver todos los mensajes , hasta ella se comenzó a sentir estresada y comprendió por qué me sentía tan acosada . Esta gente no estaba bromeando y estaban dejando muy claro que iban en serio .

Voy cantando a todo pulmón y mi voz es como la de un gato al que le tiran del rabo , una tortura para cualquiera que me pueda escuchar , pero afortunadamente estoy conduciendo a toda velocidad , en medio de la nada .

Toda la rabia y la impotencia que sentía hace unas horas , se están esfumando como por arte de magia . En este momento me siento más viva que nunca , incluso me siento feliz y ese es un sentimiento que no creí que volviera a experimentar desde que murieron mis padres .

Después de dos horas de camino , se empieza a sentir un frío más intenso , que me obliga a subir las ventanillas del coche .

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La señora Marta lleva todo el día recibiendo llamadas de todas las personas encargadas de los preparativos de la gran boda , ninguna ha obtenido respuesta de la novia , a pesar de la insistencia en contactar con ella .

Decide llamarla personalmente y se encuentra con que el teléfono está apagado , le parece algo normal que la chica se sienta superada por la situación, así que no le da importancia . Al día siguiente hablarían en el trabajo.

Aún así le pregunta al chófer que le han colocado como encargado de su vigilancia y seguridad . Éste le dice que ha ido a casa de su amiga , que la ha seguido y la ha visto entrar en el garaje del edificio y no han vuelto a salir de allí , sigue vigilándola desde la mañana.

La mujer se queda más tranquila y se lo hace saber a su hijo Luca .

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Sigo conduciendo libre y veloz por la autopista, está empezando a nevar , pero muy poco . Espero que el tiempo no empeore porque no tengo cadenas para las ruedas .

Ver caer los copos de nieve me ha dado ganas de tomar algo calentito , como un chocolate o un café . Seguro que cuando llegue a la gran casona me miman mucho . Echo mucho de menos los maravillosos momentos que vivimos allí . Mis abuelos eran las personas más importantes de mi vida y los instantes que pasé a su lado son sin duda alguna , los mejores .

Mis padres solo vivían para su trabajo , a pesar de que soy hija única , jamás me dedicaron el tiempo y el cariño que necesitaba . Su única preocupación era que fuera la mejor en mis estudios , para que pudiera ser una digna sucesora . Por eso esperaba con ansias a que me dejaran con mis abuelos . Con ellos todo era distinto . Mi abuela me cocinaba y me alimentaba con sus propias manos , me leía cuentos por las noches y no se iba de mi lado hasta que me arropaba y me veía profundamente dormida , era muy buena y amorosa .

Mi abuelo era un hombre lleno de vitalidad y alegría , siempre estaba ideando nuevos juegos y aventuras para compartir conmigo . Me enseñó a pescar , a montar a caballo , incluso a cazar , era mi héroe y lo será siempre . Por eso de todo mi patrimonio , lo único que me duele en el alma haber perdido es esta finca y todo lo que abarca .

Han pasado una hora y media más, ya he llegado a la zona , pero está todo helado y no recuerdo bien el camino , siempre nos traía el chófer y yo casi nunca prestaba atención . El coche cada vez patina más en el suelo helado .

Veo una señal y recuerdo el camino , tengo que girar a la izquierda y ya estoy muy cerca . Siento una emoción enorme , que hace que tenga los vellos erizados .

De repente pierdo el control del coche y Paquito patina de un lado a otro yendo a caer al lago . Rezo con toda mi alma , para que el hielo no se resquebraje , pero comienzo a oír los crujidos . Abro rápido la puerta y salto lejos . Veo como se hunde lentamente y comienzo a pensar que este viaje ha sido la peor idea de mi vida .