Capitulo 6 — Infierno Refinado

¿Qué estás diciendo? ¡Son las plantaciones más nobles del reino! - Yan exclama visiblemente un poco furioso.

Bajaron el coeficiente intelectual de todos en esta historia para que la princesa Clarisse pueda hacer algo, ¡no es posible! ¿Cómo puedes pensar de esa manera?

— Yan, ¿debería explicar que el bioma de la capital es diferente de Vaylahan? - refutación ceja arqueada.

"¡Vete a la mierda, Vanesa!" — Yan termina perdiendo los estribos. — Solo haz lo que tengas que hacer — me deja y me emociono más, porque ha llegado el momento de hacer lo que más quería: ordenar a Yan.

Parece estar funcionando. Pido a uno de los vasallos que me traiga un banco y agua fresca. Mientras hacían esto, me senté debajo de un edificio cubierto, que me dio sombra, mientras mi criada me ofrecía agua y fruta fresca para hidratarme.

— Pido a todos los agricultores que dejen de sembrar manglares y vides, ¡esto no es una selva! Estamos en un casi desierto, pero yo lo llamo cerrado, ¡y estas plantas no sobrevivirán al clima de este lugar! — Me dirijo a Yan desde la distancia. "¡Oye, Yan, dame una muestra de la tierra!" - demanda.

Yan me miró, estaba claro que no recibía órdenes mías y estaba menos complacido con mi actitud perezosa.

"¡Envía a los vasallos!" Recibir órdenes tuyas nunca será como yo —dice con incredulidad.

Bueno, entonces, ya veremos.

"¿Debería advertirte de quiénes son estas tierras?" Pregunto.

"¿Debería advertirte que todavía estás comprometido?" — el sarcasmo reina entre Yan y yo, pero tengo que admitir que ganó este.

No puedo dejar que este compromiso termine todavía, tiene que durar al menos hasta que patee a Clarisse de regreso a su reino y me posicione a favor del hermano de Lucas, él puede cambiar mi historia. Es solo el comienzo.

Uno de los vasallos me trae la muestra de tierra que, como esperaba, estaba en el peor estado posible: tierra con dos piedras, totalmente inerte y degradada. El suelo inerte no es muy rico para la producción de alimentos, ya que tiene dificultad para retener agua y nutrientes. Por tanto, será necesario aumentar la organicidad del suelo mediante carpas invernadero y goteo para que se infiltre el agua.

Recuerdo que cuando yo era niño, mi abuela ponía mamparas para aislar las leguminosas y petacas llenas de agua volteadas, para que la tierra de los árboles y las flores fuera más rica y, en el futuro, dieran sus frutos y plántulas.

"Vamos a alterar toda la cosecha", digo lo suficientemente alto para que cualquiera que esté cerca pueda escuchar. "Esto es lo que haremos: levantar carpas transparentes, que no dificulten que el sol llegue a las plantas, y cultivar verduras y hortalizas dentro de ellas. Además, iniciaremos el cultivo de vegetación local, como soja, maíz y caña de azúcar. Encontraremos árboles que sean gruesos y torcidos, también serán esenciales para producir una gran fruta: un descanso. Finalmente, necesito vasallos aquí que me ayuden a hacer que este pequeño río cree desviaciones sobre el suelo para ayudar a nutrir el agua", concluyo.

"Ay mi señora, el agua de este río no alcanzará para toda la plantación de las tierras", habla con tono cansado un señor anciano que estaba trabajando con los vasallos.

"Por supuesto que no", estoy de acuerdo con un asentimiento. "¡Gracias por hablar de eso!" Yo sonrío. "Precisamente por eso necesito que tomes todas las macetas de vidrio que encuentres en la casa, las llenaré de agua y las voltearé, de esa forma nutrirá la tierra por más tiempo. Pero, obviamente, necesito que las ollas sean anchas, pero sus picos delgados", agrego.

Los vasallos se pusieron a trabajar. Al principio, todos dudaban en cambiar el modo de cultivo por completo, pero a medida que pasaban los días, se acostumbraron a mi plan de fertilización. Luego, con casi dos meses, los resultados comenzaron a verse...

"¡Extraordinario! ¿Has visto cómo avanzan nuestras plantaciones?" pregunta un vasallo mientras salgo de la casa para vigilar las tierras.

"Parece que lo poco que invertimos en nutrientes fue suficiente para que los árboles dieran frutos, ¿no?" Le sonrío a ese caballero, su expresión cansada. Es un buen hombre.

Aunque el clima es extremadamente cálido y el bosque es completamente diferente al de la selva costera, estamos en el infierno, ¡pero un infierno refinado!

— Estaba pensando en cambiar el nombre de estas tierras, ya que ya no pertenecen al Conde Saboya — le digo pensativa.

"Oh, ¿lo es, mi señora?" él duda. "¿Y qué sugieres?" - me mira directamente.

— ¿Qué tal… — Entrecierro los ojos pensando — ¿Infierno refinado?

"Es un nombre muy... único, ¿no?" - Me responde humildemente.

"¡Creo que irá bien con este lugar!" — Observo las plantaciones, sonrío.

Porque aquí estará mi refugio, será donde construiré mi castillo y me ocuparé de todos aquellos que se atrevan a ir en mi contra. ¡Este es el comienzo de mi imperio!

Yan se nos acerca, tenía su espada en la cintura y eso lo hacía muy misterioso.

— ¿Infierno refinado? Levanta una ceja. “Es un nombre interesante para este lugar”, deja su opinión.

“Llevo mucho tiempo pensando en ello, pero no he visto nada que vaya mejor que, a primera vista, el mismísimo infierno. Pero, toda esta belleza tuya hace que tu interior sea mucho más que hermoso — expongo mis pensamientos sin mirarlo.

“Esa es una muy buena línea de pensamiento, pero vine aquí para decirles que la temporada social está por comenzar. ¡Debemos regresar a la capital inmediatamente! dice con indiferencia, con los brazos cruzados detrás de su cuerpo.

"Oh claro, temporada social... pelotas... ¿algo más interesante?" — me aburre con esta forma de hablar y actuar.

Su título de condesa. Parece que el rey te reconocerá como la Condesa del Infierno Refinado. Felicidades, serás la condesa más joven de todo el reino a los 17 años – ni siquiera mostró tanta alegría al decir eso.

Mis ojos brillan de felicidad. Parecía que todo estaba cayendo en su lugar y finalmente tendría algo en esta vida, algo por lo que luché para ser mío y llegar a ser tan conocido como el mismo rey.

— Ah, también hay otra noticia para la capital y por eso todos están emocionados por esta temporada social — Yan me saca de mis pensamientos mágicos.

Siempre rompe el humor. ¡Nadie se lo merece!

- ¿Qué es lo que sería? ¿Me vas a pedir que me case contigo? - pregunto irónicamente.

- No, parece que la princesa Clarisse Knýtlinga del Imperio Vaster vendrá a nuestra capital esta temporada - dice directamente.

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