Capítulo 3 BELLA ROSELLI

...BELLA ROSELLI (nueva identidad)...

Siento unos golpecitos en mi rostro y despierto en los brazos de Felipe, sé que él es uno de los sobrevivientes de nuestro ataque.

-Apúrate, debemos salir de aquí, pronto vendrán a manipular ésta escena- me habla muy apurado, tiene miedo al igual que yo de que alguien aquí nos encuentre

-¿Dónde iré? ¿Quién hizo todo esto? Hay que hacer la denuncia- el me mira y niega

-Es mejor que salgamos de aquí, creerán que tú también moriste o lo harás de todos modos. ¡Apúrate! no tenemos mucho tiempo- tengo que salir de aquí y aceptar que me quedé sola en el mundo

-Necesito saber que está pasando- me separo de él y pienso que necesito llevarme, dónde iré, que haré de ahora en más, ¿Quien me quiere muerta?

-No puedo decirte nada, no estoy autorizado. Mientras menos sepas mejor para ti- acabo asintiendo, se que no me dirá nada, algo grave pasó y no quiero morir también ni que él lo haga- Debes huir, tenemos los minutos contados, apúrate

Felipe hace que me apresure y reaccione. Jamás sentí tanto dolor en mi corazón como éste día. Esa misión a la que fui acabó conmigo pero para lo que hicieron aquí seguro fue más de una persona y yo no podría defenderme en éste momento.

Con todo el dolor de mi alma meto en una maleta toda la ropa que puedo, joyas y también un álbum de fotos que guarda maravillosos momentos y la foto enmarcada de mis padres, mis hermanos y yo. Busco dinero en efectivo, no es demasiado ya que sempre todo estuvo en el banco por seguridad y no puedo hacer ningún movimiento en la cuenta ahora. Miro por última vez el que fue mi hogar, el lugar donde fui tan feliz pero en el que perdí todo lo que amaba y salgo con lo poco que pude tomar.

Felipe conduce y yo solo siento como mis lágrimas caen sin cesar. No entiendo cómo mi vida pasó de ser perfecta a ésto.

-Debo sacarte del país, mientras más lejos vayas más segura estarás- asiento porque se que tiene razón

Me lleva con él a una ciudad que está a unas cuatro horas y al menos agradezco tenerlo a él y estar con vida. De no ser por el otro destino habría conseguido.

Pasan los días y el me entrega un pasaporte y documentos nuevos. Mi nombre quedó atrás, ahora le llamo Bella Roselli. Hasta mi identidad la he perdido, lo único que me quedaba de mi familia. Suspiro con tristeza y el me da un boleto de avión con destino a Italia. Allí el considera que puedo comenzar desde cero.

-No sé si volvamos a vernos, no me llames porque te encontrarán. Prométeme que vas a cuidarte y que estarás bien- me pide y solo lo abrazo, hasta a él lo perderé pero se que en este momento tiene razón

Me dirijo al aeropuerto, el por seguridad debió dejarme un poco alejado de allí. Hago el trayecto restante ocupando un taxi y llego a tomar mi vuelo aunque no lo desee.

Voy volando camino a mi nuevo hogar, siento un gran dolor en mi corazón y un enorme vacío en mi cabeza, no logro comprender que es todo esto que ha pasado en los últimos días, trato de dormir un poco para no pensar que me deparará el destino.

Llego a Milán y en tren me dirijo a Roma. En momentos así agradezco hablar el idioma con fluidez porque sino sería aún más difícil.

Rento un cuarto y comienzo a buscar trabajo después de haberme instalado pero ¿Que experiencia tengo? Cómo Bella Roselli ninguna y las mías reales no puedo usarlas, referencias de antiguos empleadores tampoco tengo.

Pasan las semanas y aunque intento gastar poco el dinero se me está acabando y ya vendí casi todas las joyas, con mi identidad conseguiría empleo donde fuera sin problemas pero no aquí.

Comienzo a desesperarme, aquí estoy sola y no puedo pedir ayuda, tampoco tengo el respaldo de mi familia, pero no puedo rendirme. Soy una mujer que debe salir adelante, alguien que siempre fue fuerte y en ésta circunstancia debe demostrarlo. Intento mantenerme positiva y que mi familia donde quiera que esté se sienta orgullosa. Algún día sabré lo que pasó y podré regresar a buscar justicia pero ese día está muy lejos ahora y mi prioridad es sobrevivir.