capítulo 17

así pasaban los días y la cercanía de Angélica con fénix era cada día más notoria e incluso ya se escuchaba. Rumores en la empresa, puesto que a veces veían a Angélica muy sonriente mirando a fénix y viceversa, cada mañana se veían llegar juntos es como si ya no le importará lo que la gente especulara sobre ellos.

Pero si de algo eran claro era que habían tenido intimidad que aunque fénix se muriera por hacerla del él, debía entender el pasado de su chica, teniendo claro que el amor no es solo sexo.

Tres meses después

Las cosas no podrían ir mejor para Angélica, en este momento miraba su pasado y pensó que nunca había tenido una vida tan alegre y llena de paz, es como si todos lo que le hicieran daño se hubieran alejado.

Eran las tres de la tarde cuando fénix decide pasar por dónde Angélica a darle una noticia. Toca la puerta.

—adelante.

—como estas— dice algo tímido fénix.

—bien, que te trae por aquí, todavía no es hora de irnos.

—no es sobre eso, es una noticia que quería darte.

— ohh, entiendo.

—si, es que llegaron la respuesta de los inversionistas, y están feliz con los resultados, dicen que superaste al 100 sus expectativas, por lo que quieren que te hagas cargo de nuevo proyecto y que invitas en ellos tus acciones, creeme que analice sus condiciones y tú eres la única beneficiaria, solo debes darlo todo como lo distes en este proyecto y verás que todo saldrá bien.

Angélica quien estaba en shock, escuchando a fénix, volvió en sí y se lanzó en los brazos de este, mientras le plasmaba un beso en los labios, cosa que sorprendió a fénix, ya que ella solo una vez había tomado la iniciativa. Por falta de aire ambos se separan de aquel apasionado y sincero beso.

Angélica siente vergüenza y da la espalda, haciedo que fénix se acerque a ella y la toma de su hermosa cintura mientras le susurra en el oído.

— gracias, por hacerme feliz.

—créeme que la que tengo que estar agradecida soy yo, he tomado tus fuerzas para luchar

—te equivocas, siempre has Sido fuerte, de verdad eres admirable.

— gracias por verme de esa forma.

Suavemente, fénix le dio la vuelta a la chica mientras le acaricio el cabello y le dijo.

— hay un pero en lo de los inversionistas.

—¿cuál es?, ¿es muy grave?.

—no, no te preocupes solo que debemos estar 5 meses fuera del país.

—debemos, o sea que tú también irás, — dice de forma inmediata Angélica esperando una respuesta.

— claro.

—okay, entonces no tengo problemas en ir— ríe de manera muy feliz Angélica.

Fénix se acercó un poco más a Angélica y justo cuando sus labios estuvieron cerca la puerta se abre, entrando por ella un hermoso hombre, con el cabello oscuro, el mismo caía en sus hombros, los rayos del sol dejaban ver aún más claramente sus hermosos ojos azules, al verlo Fénix corrió hacia él regalando un cálido y sincero abrazo, mientras le dijo

— Bienvenido Freddy, hace tiempo que no nos vemos.

— gracias, amigo y cómo has pasado.

—bien, bien mi amigo.

Angélica quien aún no se reponía del susto se quedó mirando a la nada mientras que escucha una voz muy suave detrás de ella.

—Hola, soy Freddy, tú debes ser Angélica la que estará también cargo del proyecto.

Con un poco de timidez y nerviosismo se dio la vuelta extendiendo su mano hacia aquel caballero, quien tomó sus manos con delicadeza plasmando un beso, haciendo que rápidamente Angélica quitará su mano, está situación puso incómodo a fénix por lo que se acercó a Angélica y dice.

— eso fue todo por hoy Angélica, puedes irte a casa, le daré un recorrido a Freddy, buen trabajo.

—está bien — responde Angélica tranquila quien ya había vuelto en sí.

Está sale de la oficina toma sus cosas y se dirige él a su apartamento, puesto que sabía que no tenía más nada que hacer más que ir a dormir, al llegar al apartamento se dejó reposar unos minutos para luego darse un baño.

Mientras tanto fénix se encontraba en un bar con su amigo, pero por su mente rodaba Angélica sentía la necesidad de estar con ella, no podía concentrarse en nada, al Freddy verlo así decide preguntar.

— que te pasa amigo, si estás cansado está bien, ya tendremos tiempo de sobras.

—no, no es eso.

—seguro— cuestiona Freddy sin dudar.

—por supuesto — este llamaba al mesero y pide otra ronda de whisky.

Angélica salía del baño y vio una sombra pasar rápido por su ventana por lo que asustada pregunto.

—¿fénix eres tú?.

Nadie respondió por lo que Angélica quiso creer que era producto de su imaginación, pero justo cuando quiso quitarse la toalla para cambiarse volvió a ver una sombra en la ventana, está vez se pudo visualizar la sombra de un hombre, por lo que Angélica se asustó aún más, pero volvió a llamar.

— Fénix— al no ver movimiento intento salir mientras dijo — no es gracioso de verdad da miedo.

Vio la sombra venir hacia ella y salir detrás de la pared, para sorpresa era Robert quien estaba aquí, por lo que de manera inmediata pregunta.

— ¿ qué haces aquí? ¿Cómo entraste?.

De manera cínica se echa a reír mientras dice.

— tengo mis propios métodos.

— sal de una vez antes que

— antes que, que venga fénix tu héroe y te salve. En este momento debe estar con unas mujeres hermosas a su alrededor con su gran amigo y su miembro duro.

— cállate, él no es como tú, créeme que no lo es.

— ja, ja, ja, se pudo escuchar la risa de Robert por toda la habitación.

Angélica dio dos pasos atrás intentando coger un jarrón que había en la mesita de noche, pero antes de poder hacerlo Robert se lanzó sobre ella y la tiró en la cama mientras le decía.

— por qué te rehúsas— en volver conmigo, eres una mal agradecida, vistes en mi casa 5 años y ahora te revuelcas en el apartamento que te compre con las acciones que tenía en mi empresa.

— sabes que esas acciones siempre fueron mías, y la plata también. Tú solo— antes que Angélica pudiera responder, retumbó por toda la habitación una fuerte cachetada mientras Robert dijo.

— cállate, no tienes derecho a decir nada, tu madre me encargo recuperarte y eso haré.

— déjame, — suplicaba la chica entre lágrimas.

— no lo haré, te haré mía y verás que te gustará, perrita o se te olvida que fuistes mía, tu inocencia fue mía, aunque no me acuerde promete que haré que este día sea inolvidable.

Las lágrimas no dejaban de salir de los ojos de Angélica, mientras está intentaba forcejear contra aquel hombre quien tenía todo su peso sobre ella, haciendo que todos sus esfuerzos fueran en vanos. Este intentó quitar la toalla con todas sus fuerzas del cuerpo de la chica, pero este se la impedía aferrándose a ella con todas sus fuerzas mientras le suplicaba que parara por favor, Angélica sentía que estaba perdida y que pronto no podría luchar porque su débil cuerpo no podía contra semejante monstruo, pero justo cuando pensó que no podía sintió como Robert de una sola patada cayó al suelo, puesto que en ese momento entró fénix arrematando contra aquel hombre y golpeándolo hasta que toda su ira salió.

— que crees que haces, asqueroso, no te atrevas a ponerle un dedo encima.

Este llamo a la policía, mientras tanto amarró a fénix con sus corbatas hasta que llegaste la policía, con mucho temor se acercó Angélica y le dijo.

—perdóname por llegar tarde, de verdad perdóname no sé qué sería de mí si hubiese llegado unos minutos tarde perdóname por favor no debí dejarte sola.

—tranquilo entiendo que no es tu culpa, —responde Angélica aún con miedo y un nudo en la garganta.

Los brazos cálidos de fénix se posaron en aquella chica mientras le dijo

—cámbiate, llevaré a este abajo hasta que llegue la policía.

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