capitulo 11

Marion sabe que Alexander es el correcto, él es el príncipe azul que siempre había esperado. Fantasea con su futuro junto a él. Regresa a su realidad: la escuela, el trabajo y la limpieza de la casa. Es una rutina de nunca acabar, pero está feliz porque por fin tiene alguien en su vida que la hace muy, muy feliz.

Salomé es otra cosa, siempre tiene algo que lo echa a perder. No sabe cuándo debe tenerse; es una molestia a veces o casi siempre.

Hoy es día libre en el hotel, Marion busca a Alexander para ver si hoy saldrán. Quiere pasar más tiempo con su novio, pero algo extraño pasó: Alexander estaba de la mano con alguien más y muy contento.

Marion: ¿Quién es ella?

Alexander: Solo una amiga. ¿A qué viene esa pregunta? ¿No crees que te tomas varias atribuciones y exageras?

Marion: Disculpa, pero acaso no somos novios. ¿Me estás engañando o te estás burlando de mí?

Alexander: Creo que te confundes un poco. ¿No crees que no tienes por qué estar celosa? Solo me gustas tú, entiendes. Eres muy especial. No tienes por qué molestarte. (Un beso tan apasionado que hace que le falte el aire) que hace que se le olvide el enojo.

Marion: Es que te quiero demasiado y no quiero perderte. No sé qué haría sin ti.

Alexander: Oye, aquí estoy y no voy a dejarte. Te quiero y no te engaño, ¿oíste? Cree en mí.

Marion se despide de él y se va contenta. Cree completamente las mentiras que Alexander le dice, cree ciegamente en él. Ya en su casa, está todo tranquilo. Sus padres no están discutiendo. Ella solo piensa en Alexander y en lo mucho que ya lo ama y quiere una vida junto a él.

Alexander: Amor, mañana nos vemos para salir a dar una vuelta por la ciudad. ¿Qué dices? Te tengo una sorpresa. Te veo a las ocho de la noche.

Marion: Sí, amor. Te veo a esa hora.

Marion no podía de la emoción porque estar con Alexander para ella es un sueño. Él la hace sentir especial.

Marion: Creo que estoy enamorada. Se lo diré. Sé que me corresponderá. Él es muy lindo y me quiere.

Madre: Marion, marioneta, me voy. Por favor, ten cuidado de las cosas de la casa. Descongela el pollo y ponlo a hervir, por favor. Que no se te olvide.

Marion hace las cosas que su mamá le ordenó. No quiere más conflictos con ella, porque siempre encuentra un pero para pelear.

...****************...

Ya es de noche y casi llega la hora de verlo. Qué sorpresa le tendrá. Está demasiado emocionada.

Suena el claxon del auto y Marion sale feliz.

Él está guapo. No sabe cómo, pero le ha robado el corazón.

Marion: Hola amor, ¿y Josué? ¿Por qué no te trajo hoy?

Alexander: Porque hoy es una noche solo para ti y para mí, sin interrupciones.

(La besa muy apasionado, le toca la pierna y un poquito más arriba).

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***