Capítulo 11

Isabella: pero que falta de respeto hay en esa empresa, oye Zoe que pasaría si le dijéramos al señor Lombardi que una de sus empleadas le esta faltando al respecto a dos de sus colegas de trabajo (la recepcionista se tensa y deja de hacer lo que estaba haciendo).

Zoe: tienes razón, además eh escuchado por ahí que al señor Lombardi no le gusta la ineficiencia y mucho menos si viene de sus empleados. - (se pone una mano en la boca como de sorprendida).

Isabella: si Zoe y creo que alguien por aquí esta tratando a sus colegas de manera irrespetuosa. - (miro a la recepcionista), así que o te disculpas con nosotras por las buenas o lo hacemos por las malas, tu decides. - (la miro con una sonrisa ladina y con los brazos cruzados).

Recepcionista: lo siento señoritas, no fue mi intención causarles problemas, espero me comprendan y no lleven esto más allá. - (nos dice rechinando los dientes y con la cabeza agachada).

Isabella: genial, así esta mejor, ahora escúchame atentamente, por tu bien espero que esto no se vuelva a repetir porque de lo contrario haré que te echen de aquí. - (le digo con una sonrisa de malicia por lo que ella cogio un poco de miedo).

Recepcionista: si señorita, le aseguro que no volverá a pasar. - (agacha la cabeza).

No soy así usualmente y obviamente no haría que la echen, es solo que le dije esto haber si toma un poco de humildad porque no podemos ir por ahí creyendonos mejores que los demás.

Isabella: espero que así sea, bueno, vámonos Zoe. - (tomo del brazo a Zoe y nos dirijimos hacia el pasillo donde nos había indicado).

Zoe: joder amiga eso estuvo genial. - (comienza a reír).

Isabella: si, fue un poco divertido ver su cara de miedo. - (me río un poco).

Caminamos por un pasillo que era bastante largo pero hermoso a la vez, hasta que al final llegamos a la oficina presidencial, una vez allí tocamos la puerta y se escuchó una voz rústica del otro lado diciéndonos que pasáramos. Cuando entramos el hombre estaba en su asiento espaldas.

Zoe: buenas tardes señor Lombardi, soy Zoe Villanueva y vino porque tenemos un negocio que cerrar.

El señor Lombardi se da la vuelva y valgame Dios este hombre se ve más guapo en persona.

Alessio: tomen asiento por favor. - (nos dice sin expresión en el rostro).

Zoe: muchas gracias. - (seria).

Ellos comenzaron a conversar sobre el asunto del nuevo hotel y yo prácticamente no hice nada más que anotar unas cuantas cosas, al final cerraron el negocio y cuando estábamos por irnos el señor Lombardi habla.

Alessio: supongo que usted es la señorita Montero, cierto?. - (me mira con cara neutra).

Isabella: si, así es. - (le digo de manera seria).

Alessio: en ese caso muy pronto haré

una reunión con usted para hablar sobre el proyecto de la nueva empresa de cosméticos y sobre otro proyecto del cual quiero que usted este a cargo. - (me dice de una manera tan seria que hace que mis pelos se pongan de punta, pero no dejo que el note eso).

Isabella: de acuerdo señor Lombardi, ahora con su permiso. - (me despido).

Una vez a fuera suelto un respiro porque Dios ese hombre sí que sabe como intimidar con solo su presencia.

Ya fuera de la empresa fuimos a buscar el coche al estacionamiento y cuando íbamos caminando Zoe me dice algo.

Zoe: no te diste cuenta que ese hombre se parece mucho a mis sobrinos?. - (me pregunta extrañada).

Isabella: no, no me fije. - (le digo restandole importancia).

Zoe: es enserio isa?, ese papacito de hombre es prácticamente igualito a tus hijos, tiene la misma nariz, el mismo perfil, los mismo colores de ojos y su manera de actuar es igualita a ellos, aunque más a Axel. - (me dice sorprendida).

Isabella: estas loca Zoe, ahora estas viendo cosas donde no las hay, hay muchos hombres que tienen rasgos iguales a los de mis hijos, el no es el unico. - (me encogo de hombros).

Zoe: mmm bueno en algo tienes razón, hay muchas personas que tienen los mismo rasgos y ni familia son. - (lo dice con cara de reflexión).

Isabella: exacto, por eso no hay que darle mucha importancia, de seguro es pura casualidad. - (le digo restandole importancia a este asunto).

Zoe: si, puede que tengas razón, mejor no le demos importancia y vallamos a buscar a los niños para ir a comer algo. - (me dice con una sonrisa).

Una vez en el auto fuimos por los niños para llevarlos a comer, cuando llegamos a la casa prepare a los niños y nos fuimos a un restaurante que abrieron nuevo.

*Narra Alessio*

Ya han pasado 5 años desde esa noche, no he podido recordar mucho con respecto a eso, solo había tenido unos que otros sueños que se repetían una y otra vez, sueños que para mi son estúpidos, ya que en ellos yo me portaba como todo un caballero con ella, cosa que no hago con nadie, ya hace como 3 años que no tengo esos recuerdos, eso me alegra porque de tan solo pensar en eso mi enojo sale a flote.

He venido a Rep.Dom otra vez por asuntos de negocios pero esta vez mi estadía aquí se extenderá a un año, ya que tengo proyectos nuevos en los cuales debo estar presente. Por ese hecho mi hermana Emma y mi sobrina Emilia se quedarán conmigo este año entero, por lo que decidí comprar una mansión para que no estemos incómodos en un departamento.

Y pues mi hermana Emma, que les puede decir de ella, ella es una mujer muy capaz, inteligente y dominante aunque eso no es siempre, ya que ella usualmente es una persona muy divertida con las personas. Tiene una hermosa niña con su esposo Víctor que por cierto se quedó en Italia. Mi tierna sobrina que se llama Emilia y tiene 6 años, ella es una de las pocas personas a las que le demuestro afecto.

Ayer en la tarde tenía una reunión con unos ejecutivos para hablar sobre un nuevo proyecto que me intereso bastante, el cual fue una propuesta de una empresaria llamada Isabella Montero, no pude asistir a la reunión porque se me presentaron asuntos importantes en otra de mis empresas pero al final cerramos el trato, aunque voy a ponerme en contacto con ella, ya que me gustaría abrir una sucursal en Italia.

Me levante muy temprano, me puse un traje cualquiera y me marche a la empresa.

Llegando a la empresa, estacionó mi auto en el estacionamiento y voy directo a mi oficina, cuando llegue al último piso me recibió mi recepcionista que creo que se llamaba Sofía, ella es muy eficiente en su trabajo pero es muy resbalosa, siempre busca la oportunidad de insinuárseme aunque yo no le doy la oportunidad, ella no es alguien que me atraiga, así que no le doy mucha importancia a eso.

Recepcionista: buenos días señor Lombardi. - (le dice con una sonrisa coqueta).

Alessio: donde está mi asistente?. - (le digo sin ninguna expresión en mi rostro).

Recepcionista: ella está en su oficina señor. - (le dice con la misma sonrisa de antes).

No le doy más importancia a ella y voy directo a mi oficina donde me encuentro a Cristina mi asistente, ella es una mujer de unos 35 años y gracias a Dios está casada, aparte de que es muy eficiente en su trabajo no se me insinúa como las demás.

Alessio: que tenemos para hoy?. - (le digo con mi cara usualmente seria).

Asistente: dentro de media hora tiene una reunión con los inversionistas, a las 3:30 de la tarde tiene una reunión con la señorita Villanueva sobre el nuevo hotel y a las 5:00 de la tarde tiene una cita con la señorita Michelle en el nuevo restaurante.

Alessio: muy bien puedes retirarte. - (le digo frustrado).

Para que carajos Michelle quiere ir conmigo a un restaurante, ella sabe que no me gusta nada de eso y mucho menos estar en la mira de los periodistas.

No le doy importancia a eso ya después Michelle me explicará que demonios quiere hablar conmigo, comienzo a trabajar y así pasan las horas, fui a la reunión con los inversionistas y ya en media hora llega la señorita Villanueva.

Una vez pasada la media hora justamente tocan la puerta y es la señorita Villanueva que vino acompañada de la señorita Montero, se que es ella, ya que antes de hacer negocios mando a investigar algunas cosas relacionadas a la eficiencia en los negocios de las personas con las que trabajo, me gusta ser precavido con todo. Bueno la invito a sentar a ambas y le dimos comienzo a la reunión, al final cerramos el proyecto del hotel, la verdad me gustó bastante y me sorprende el hecho de que ellas sean amigas y que ahora ambas sean mis colegas. Antes de irse le dije a la señorita Montero que me iba a poner en contacto con ella para hablar de la sucursal de cosméticos y del otro proyecto.

Ya son las 5 de la tarde y estoy bajando hacia el estacionamiento cuando justamente me encuentro a Michelle.

Michelle: hola cariño. - (se acerca para darme un beso pero yo la alejo).

Alessio: que quieres Michelle, te dije que no me gusta que vengas a la empresa. - (le digo cabreado). - además para que me invitaste a un restaurante, sabes que odio estar en la mira de los periodistas.

Michelle: nunca salimos a ningún lado, no me hagas ese desplante por favor. - (le dice intentando darle lastima).

Alessio: escúchame bien Michelle esta es la primera y última vez que haces esto. - (le digo mostrando mi aura asesina).

Michelle: si como tu digas. - (con un poco de miedo por el aura de Alessio).

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