Una admiración por Noah.

Cuidé de Noah casi toda la noche, ya que tuvo fiebre y me pareció extraño, ya que solo había bebido demasiado. Creo que probablemente haya sido algo pasajero. Dormí con el día casi amaneciendo... Al despertar, veo que ya está de pie. Preocupada, pregunto:

¿Noah, estás bien?

¡Levántate, Moana! Vamos a salir, no tardes.

Sale de la habitación y me deja allí sin una respuesta. ¿Va a ser así de todas formas? ¿Lo recojo en un bar, lo cuido toda la noche y no me das las gracias? Me levanto irritada y con un poco de mala voluntad voy hasta el baño. Después de un baño y cepillarme los dientes, voy hasta el armario para arreglarme. Como no sé a dónde vamos, decido usar un vestido. Está apretado en los pechos y suelto hacia abajo. Dejo mi cabello suelto y hago un maquillaje básico: solo un lápiz labial rojo y delineado con máscara para pestañas. Paso mi perfume. Para joyas, uso solo una pulsera con colgante de piedra roja en forma de corazón, un collar de perlas que fue de mi bisabuela y el "anillo de bodas". Bajo y veo que ya ha tomado café y está impaciente mirando el reloj. Sin mirarme, dice:

¿Podrías ser un poco más rápida para el desayuno?

— ¡Yo fui rápida allá arriba también, Noah! ¡Quédate tranquilo, voy a tomar solo una taza de café! - En ese momento me mira y veo su reacción al ver cómo estoy. Pero lo ignoro y sigo yendo a la mesa para tomar mi taza de café y él dice:

¡Come al menos una rebanada de pastel! ¡Tenemos 5 minutos!

Lo veo sentarse y le digo:

¡No te preocupes por mí, puedo quedarme sin un desayuno decente, no moriré por eso!

Termino mi taza de café y me levanto... camino hacia la puerta para salir y Noah me sigue. El viaje en coche fue silencioso, ninguno de los dos se rendiría para una conversación. Solo cuando el coche se detuvo me di cuenta de que estábamos en un hospital, muy lujoso por cierto. Lo miro y le pregunto:

¿Qué hacemos aquí?

¡Tu madre está aquí! Lo prometí y lo cumplí. Tu madre está siendo asistida por los mejores médicos. Las probabilidades de sobrevivir aumentaron un 75% por ciento!

Miro el enorme hospital y digo:

¿Pero por qué el otro hospital no me advirtió sobre el cambio? ¡Dejé mi número allí para eso!

¡Moana, solo entra y visita a tu madre! ¡Para eso está aquí!

Miro a Noah enojada y al salir del coche golpeo la puerta. Camino hacia la entrada del hospital a pasos largos y él viene atrás y me alcanza sosteniendo firme mi mano, tirando de mí. Termino golpeando su pecho y levanto la cabeza al mirarlo que dice:

¡No lo olvides, Moana! ¡Somos una pareja apasionada! ¡O al menos tenemos que actuar como uno!

— ¡Hasta las parejas enamoradas se pelean, cariño! ¡Cada mar de rosas tiene sus espinas! - El que tiene la mano en mi cintura me suelta poco a poco y caminamos hasta la recepción del hospital.

Luego ya estoy con mi madre y ella parece un poco mejor que la última vez que la vi... Hay dos enfermeras aquí. Miro a mi madre y digo:

¡Veo que te están cuidando bien!

— ¡Hija mía, aquí tengo hasta dos enfermeras a mi disposición! Y ellas son gentiles y amables. ¿Cómo consiguió transferirme a ese hospital? ¡No podemos quedarnos con nada de lo que hay aquí!

¡Mamá, no te preocupes por eso, quiero saber cómo estás! ¿Las comidas son buenas? ¿Las medicaciones son a tiempo? ¿Vas a necesitar la cirugía de verdad?

— ¡Calma, hija mía! Las comidas son excelentes, me sorprendió bastante de tan sabrosas que son. Las medicaciones también son con horas exactas. En cuanto a la cirugía aún no lo sé, pues el médico pasó tantos exámenes que estuve dos días completos haciendo. Ahora solo hay que esperar salir los resultados.

— ¡Genial, mamá! Me alegra estar en un lugar que te cuida tan bien. - Ella suspira y yo me asusto porque solo suspira así cuando tiene algo que decirme y no sabe cómo.

¿Mamá? ¿Algo que deba saber? ¡Sabes que no puedes ocultarme nada! - Ella pone las manos en la cara y dice:

¡Tu padre... está vivo!

¿Qué? ¿Mamá, estás segura de que tu problema está en tu corazón? ¡Mamá, está muerto!

— Descubrió que estaba en el hospital y le pidió a su tío, su hermano, que se pusiera en contacto conmigo. Quiere explicar por qué se fue tanto tiempo.

— ¡Mamá, no! ¡Han pasado más de 20 años! ¿Cómo aparece aquí así? ¿Y todavía quiere una oportunidad de conversar? ¡Que vuelva del infierno de donde salió! Tuvo mil oportunidades de volver con su familia.

¡Moana, hija mía, con mi situación actual, no puedo guardar rencor a nadie! No sé cuánto tiempo Dios me va a retener aquí.

— ¡No hablemos de eso! Estoy haciendo todo lo posible para que usted tenga muchos años de vida. No me digas que el día de mañana pertenece a Dios... no puedo ver mi vida sin ti.

Hija mía, no puedo endulzarte más la píldora. Hay cosas que no puedes omitir.

Abrazo a mi madre y me quedo en ese abrazo por un tiempo. Hasta que tenga que despedirme, dejé a Noah afuera y no puedo pasar el día aquí con él allí.

— ¡Mamá, prometo que volveré tan pronto como pueda! - Le doy un beso a mi madre y salgo del hospital. Miro alrededor y no veo a Noah, pero el auto está en el mismo lugar.

Camino por el estacionamiento y no lo veo hasta que oigo algo detrás de un cubo de basura enorme en un pequeño callejón. Me acerco, la escena que veo me hace pensar. Noah está alimentando a un gatito callejero y él está sonriendo.

Aquella imagen fría del directo mandón desapareció dando paso a un hombre lindo y acogedor. Él acaricia el pequeño felino que mía en agradecimiento y ronronea.

La verdad es que todo esto es tan duro para él como lo es para mí. Tengo que encontrar una manera de agradecerle por todo.

Mi madre está realmente bien cuidada aquí. No le falta nada... excepto el hecho de que mi padre resurgió de los muertos.

Noah es en realidad un hombre con muchas capas y feliz será la persona que consigue llegar justo en medio de todo esto y tener su lado más amoroso.

¿Qué puedo hacer para agradecer a alguien que ya lo tiene todo? ¿Tal vez cocinar? No soy buena en eso... Pero es la única manera que tengo para hacerlo.

Vuelvo al coche y me quedo allí esperándolo. En cuanto vuelve, él dice:

¿Por qué no me enviaste un mensaje? ¿Has estado esperando mucho tiempo?

— No, llegué aquí hace dos minutos. ¿Vamos? - No responde, solo sube al auto y yo también. Él me deja en casa y se va, yo aprovecho para hacer algunas cosas del trabajo y cuando veo que ya pasan las 18 horas voy para la cocina.

Leí en un sitio web que a los hombres les encanta la comida picante. Y vi una receta en YouTube que quiero seguir... Es una sopa súper cremosa y picante con cerdo.

¡La haré! Mientras cocinaba, mi amiga Emma me llama y contesto:

"¿Hola, Emma, estoy un poco ocupada... ¿es algo importante?"

"¡Mega importante! ¡Estoy embarazada!"

"¿Espera, tú qué?" - En ese momento dejo caer un poco más de pimienta en polvo en la sopa que ya está casi lista.

"Sé lo que estás pensando... y realmente no estoy con el padre del bebé. Porque él es un idiota y dijo que el hijo no es suyo. ¡Pero eso no importa!"

"¿Emma, cómo no importa? ¿Serás madre soltera cuando está claro que tu hijo tiene padre?"

"¡Amiga, vamos a encontrarnos en algún lugar o aquí en mi casa y hablaremos mejor!"

Después de encontrarme con Emma en su casa, cuelgo la llamada y veo que la sopa está lista. Su aroma es divino... Oigo un ruido en la sala y sé que ya llegó.

Con la ayuda de una empleada de la cocina, pongo la mesa y me quedo allí de pie, ansiosa y esperando por él.

Cuando finalmente aparece, yo digo;

— ¡Buenas noches, Noah! Quería agradecerte por llevarme a visitar a mi madre y otras cosas que sé que no podrías haber hecho sin ti. Hice esta sopa cremosa picante con cerdo. Estas tostadas también fueron hechas por mí.

— ¿Cocinaste para mí? - "Nadie lo ha hecho nunca para mí, no de la manera que ella lo está haciendo." - Pienso mientras la miro sorprendida y la sopa que está con un aroma irresistible.

Nunca fui a la cocina para cocinar algo así... En realidad, no cocino. Espero que esté bien.

Él se sienta a comer y yo me quedo ahí de pie mirando... él pone la primera cucharada en su boca. Lo veo tocar el cuello de su blusa y mirarme, forzando una pequeña sonrisa.

Me siento a comer también, pero él tira del tazón de sopa para él y le dice después de beber un vaso de agua:

— ¿Qué crees que vas a hacer? ¡Tú misma dijiste que me hiciste la sopa, en forma de agradecimiento! ¡Entonces no puedes comer! ¡Es mía y te la doy si quiero... y no quiero dártela!

¿Vas a comerte todo esto tú solo? ¡No seas egoísta! - De repente recuerdo que lo hice para él, no puedo pelear ahora.

Voy a la cocina a hacerme algo. Hago dos sándwiches de pechuga de pavo con ensalada. Cuando vuelvo a la sala ya no lo veo y su tazón de sopa y su plato están limpios.

¿A dónde se fue? ¡Chicos, solo me tomó 8 o 9 minutos en la cocina!

Noah tiene el estómago sensible y no puede ingerir nada cítrico demasiado picante. Después de comer, él necesitó ir al hospital corriendo con fuertes dolores.

¿Cómo consiguió condimentar tanto aquella sopa? Mi estómago duele demasiado. - La doctora me mira y dice:

¡Señor O'Connell, tendremos que hacerle un lavado de estómago! ¿Cómo siguió comiendo algo que sabía que le haría daño a sí mismo?

— Eso... No es asunto tuyo. Solo... ¡Haz tu trabajo! - Lo digo con dificultad, mientras sudo frío y no saco la mano de mi estómago. ¡Va a ser una noche larga!

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