Todos somos amigos ya... Y quieres ser mi acompañante en el desfile?...

Después de que Hana aceptara quedarse con Myriam en su penthouse, las dos se cambiaron de ropa. Myriam le dio algo de ropa nueva para que se pusiera. Luego de cambiarse y todo, se dispusieron a dormir. Myriam le ofreció su cama y ella se quedó en el sofá para que Hana no lo malinterpretara. Se dispusieron a dormir, pero Hana tenía frío, así que en la madrugada Myriam se pasó a la cama con ella. La abrazó y la apretó a ella para que dejara de sentir frío. Hana dejó de temblar cuando Myriam la abrazó. Así se durmieron abrazadas...

Mientras tanto, en el departamento, estaban Alejandro y Fernando con Roxan y Anabel. Hicieron de cenar y comieron juntos, pero la lluvia no dejaba de caer. Así que Anabel les dijo a los chicos que podían quedarse en la sala a dormir, y ellas en uno de los cuartos, ya que sus habitaciones estaban con camas individuales y no querían que nadie entrara al cuarto de Hana mientras ella no estaba. Alejandro y Fernando se quedaron. Después de todo, ya todos son amigos, así que solo se estaban ayudando unos a otros. Siguieron platicando un rato más hasta que a las chicas les dio sueño, y se fueron al cuarto de Roxan a dormir, ya que era el que estaba más cerca de la sala por cualquier cosa que se les pudiera ofrecer a los chicos. Se acomodaron y todos se durmieron...

A la mañana siguiente, el primero en despertar fue Alejandro, pues él parecía un despertador. Como no estaba acostumbrado a dormir fuera de su casa, despertó temprano. Miró por la ventana y la lluvia estaba fina. Parecía que así iba a estar todo el día, así que no podía hacer nada. Tenía que esperar a que los demás se despertaran. Por segundo, se despertó Roxan. Cuando salió del cuarto, se sorprendió. Se le había olvidado por completo que los chicos estaban ahí. Parecía que habían hecho una pijamada como cuando eran adolescentes. Sin embargo, solo se estaba riendo y saludó a Alejandro. Ella le dijo que prepararía el desayuno, a lo que Alejandro le respondió que la ayudaría a poner la mesa. No se le daban muy bien las tareas del hogar, pero iba a intentarlo. Roxan solo asintió. Unos minutos después, se levantaron Fernando y Anabel, quienes eran, por lo visto, muy dormilones. Aunque pusieron alarmas, siguieron durmiendo. Cuando ellos despertaron, la mesa ya estaba medio puesta, pero el desayuno sí estaba listo. Nadie dijo nada y se sentaron. No querían hacer sentir mal a Alejandro...

En otra parte de la ciudad, estaban Myriam y Hana. Cuando Myriam despertó para prepararse para el trabajo, se dio cuenta de que Hana tenía fiebre. La ayudó con paños de agua fría, pero no le bajaba la fiebre. Así que tomó una decisión y se alejó un poco de Hana para poder hacer una llamada sin despertarla. Avisó a Celia que se quedaría en casa por causa de un resfriado y que todos tenían el día libre, pero que habría trabajo al día siguiente. Celia respetó su decisión y empezó a avisar al personal. El mensaje también llegó a Fernando y Alejandro, quienes les dieron la noticia a las chicas. Ellas se alegraron, pero cuando se dieron cuenta de que Hana no había llegado, se preocuparon. Fernando les dijo que estuvieran tranquilas, que Hana estaría bien mientras estuviera con Myriam. Ellas se tranquilizaron y pensaron en qué hacer. Mientras tanto, Hana seguía con fiebre y Myriam estaba preocupada. Era la primera vez que tenía que cuidar a alguien enfermo, pero no lo dudó. Estaba contenta de tener a Hana en casa, ya que era demasiado grande para vivir sola, aunque ella lo prefería.

Myriam pidió algunas medicinas para el resfriado por una aplicación y se sentó junto a Hana en la cama. Hana se movió un poco y abrió sus ojos. Al ver a Myriam, se sorprendió un poco. Myriam le acarició la cabeza y le dijo que no se exaltara, que no se preocupara, que ella estaba allí para cuidarla. Hana solo asintió y se volvió a dormir. El malestar la tenía adormilada. Unos minutos después, Myriam bajó a buscar las medicinas que había pedido y luego fue a la cocina para prepararle una sopa a Hana. Normalmente, no usaba la cocina, pero esta vez tenía una razón importante para hacerlo.

Los chicos, por otro lado, decidieron quedarse un rato más con las chicas. Ellas no sabían qué hacer. Una quería salir y la otra quería ponerse a leer un libro que no había terminado. Sin embargo, estaban hablando del balance y de la pasarela que tendrían la noche siguiente. Fernando le preguntó a Alejandro si tenían que llevar pareja, a lo que Alejandro respondió:

Alejandro: se ríe, ja, ja, ja, Fer, estás atrasado, ¿no sabías que debías llevar pareja?

Fernando: no sabía qué decir, no, pues no sabía eso, pero no puedo llevar a mi hermana, no sé... ¿Tú con quién irás?

Anabel: dice seria, iré conmigo ☺️ sonríe...

Alejandro: se sorprende, sí, Anabel irá conmigo...

Fernando: suspira, bueno, pues no voy y ya dice serio... No creo que Myriam nos necesite ahí...

Roxan: dice seria, ¿y por qué mejor no vas?

Fernando: se voltea a ver a Roxan, ¿y quién sería mi acompañante si voy? dice serio...

Roxan: yo, le dice afirmándolo, yo seré tu acompañante, digo si no tienes problema con eso...

Anabel: aplaude 👏 eso es Roxy, demuestra quién manda, se ríe, ja, ja, ja.

Fernando: se sonroja, no, no tengo problema con eso, gracias Roxan, debo estar ahí, no puedo faltar...

Roxan: Lo sé, tranquilo, me imaginé que no puedes faltar, ustedes son la mano derecha e izquierda de la Presidenta, así que tienen que estar ahí... ¿O me equivoco?

Alejandro: no, no te equivocas Roxan, y bueno, ¿qué desean hacer hoy? En vista de que no hay trabajo y estar encerrado en casa no es lo mío, sonríe...

Roxan: pues me gustaría quedarme en casa, pero si quieren salir, vamos...

Anabel: pues con esta lluvia, ¿a dónde podemos ir?

Fernando: primero, como que vamos a la plaza, no nos podemos quedar así con esta ropa húmeda, así que tenemos que ir a comprar y luego no sé, vemos películas o vamos a un lugar a jugar a pasar el rato...

Roxan: La idea de Fer no es mala, creo que Anabel y yo debemos tomar un baño, ustedes pueden utilizar mi cuarto y nosotras el de Ani...

Anabel: sí, está bien...

Después de ponerse de acuerdo, los chicos se turnaron para tomar una ducha mientras que las chicas estaban en el cuarto de Anabel...

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