Capitulo 3

Noto que el director se acerca a ella y luego los dos caminan hacia mí, en ese momento desvío mi mirada de ella. - William, esta es la doble que hará la escena de la carrera de coches contigo. El director habló, entonces me fijé en ella, que sin duda era diferente, una mujer que conduce coche de carreras y no parecía aburrida porque la miraba.

¿Podemos grabar la escena director? Escucho su voz y luego digo: - Espero que seas buena conductora, no te lo voy a poner fácil, no es porque sea una escena, que deba conducir lentamente. Olivia sonrió, a pesar de que ella era una policía encubierta del FBI, ella era realmente buena con los coches y no tenía miedo de los desafíos.

- ¿Qué te parece si apostamos?- pregunté ya pensando en mi premio, claro que sería ella.

Si pierdo, quieres que esta noche sea tuya, ¿me equivoco?

- No, eres una mujer inteligente, por cierto.

- ¿Y si pierdes? - No suelo perder cuando el premio es algo que quiero.

- William, no voy a tener sexo contigo-ella habló, luego entró en el coche y luego la escena fue grabada, ella era genial, el director tenía una escena seguida para la actriz besarme en escena. Tan pronto como la filmamos, voy a verla a ella que todavía estaba admirando mi auto, así que digo:

- ¿Te gustan los autos deportivos?

—Soy apasionada, ese modelo es el más potente, ¿será que el director me deja manejarlo un poco—Soy apasionada, ese modelo es el más potente, ¿será que el director me deja manejarlo un poco? Ella parecía admirar con un inmenso deseo mi coche, yo pongo la mano en uno de mis bolsillos y tiro las llaves hacia ella, que rápidamente coge las llaves.

- Claro, él es tú-ella habló ya entrando y sentando para encender mi auto.

- ¿Qué te parece que sea tu auto? Conozco un lugar que hacen carreras callejeras, si ganas, es tuyo.

Olivia sabía cuál era su interés, pero ella estaba cerca de descubrir sobre su verdadero propósito de estar allí, ya había oído hablar de esa carrera callejera y que quien la organizaba, trabajaba con el verdadero jefe de la mafia.

- Lo haré, pero no solo quiero tu auto si gano.

-Entonces usted es el tipo de mujer que siempre quiere más de lo que puede llevar-yo hablé mientras mi cuerpo se acercaba al de ella, el olor de esa mujer era la mejor fragancia que mi olfato podría sentir, me pongo su cinturón y ella me sonríe.

- ¿Qué pasa? ¿Ya te estás despidiendo de tu auto? Incluso te estás aferrando al cinturón del asiento del conductor-ella me lo dijo para provocarme.

¿-No me apego a las cosas y las personas-yo hablé, pero luego pensé en mi hijo, el único que tiene todo mi amor, pero ella es una desconocida, no voy a hablar sobre mi hijo a una mujer que solo tengo deseo de llevar para mi cama.? Ella parecía admirar con un inmenso deseo mi coche, yo pongo la mano en uno de mis bolsillos y tiro las llaves hacia ella, que rápidamente coge las llaves.

- Claro, él es tú-ella habló ya entrando y sentando para encender mi auto.

- ¿Qué te parece que sea tu auto? Conozco un lugar que hacen carreras callejeras, si ganas, es tuyo.

Olivia sabía cuál era su interés, pero ella estaba cerca de descubrir sobre su verdadero propósito de estar allí, ya había oído hablar de esa carrera callejera y que quien la organizaba, trabajaba con el verdadero jefe de la mafia.

- Lo haré, pero no solo quiero tu auto si gano.

-Entonces usted es el tipo de mujer que siempre quiere más de lo que puede llevar-yo hablé mientras mi cuerpo se acercaba al de ella, el olor de esa mujer era la mejor fragancia que mi olfato podría sentir, me pongo su cinturón y ella me sonríe.

- ¿Qué pasa? ¿Ya te estás despidiendo de tu auto? Incluso te estás aferrando al cinturón del asiento del conductor-ella me lo dijo para provocarme.

-No me apego a las cosas y las personas-yo hablé, pero luego pensé en mi hijo, el único que tiene todo mi amor, pero ella es una desconocida, no voy a hablar sobre mi hijo a una mujer que solo tengo deseo de llevar para mi cama.

Ella arranca el coche y yo le explico dónde está el camino, rápidamente llegamos al lugar, todos me miran, ya que era la primera vez que yo estaba en el asiento del pasajero.

Hablo con Víctor, él enseguida prepara una carrera con ella y el mejor de los jugadores que jamás perdió una carrera.

- ¿Qué fue William, no se asegura en la pista?- Me preguntó al ver que yo no sería su adversario.

- Esa mujer es valiente, no sabe que no tendría oportunidad de ganar si fuera tú.

Miro a Víctor y luego a ella y luego le digo:

- Si gano, me dices tu nombre y pasas la noche conmigo.

- Si pierdes, el auto es mío y vas a hacer todo lo que yo quiera esta noche, no vas a dudar en nada, te mandaré por una noche, ¿estás dispuesto?

- Muñequita, no veo la hora de tenerte a mi lado toda la noche, no voy a perder, nadie manda en mí, absolutamente nadie.

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