Capitulo 13.

A pesar de que lloraba, no podía sentir que esas lágrimas eran mías.

Había llorado tantas veces, incluso hasta que mis lágrimas no salieron más y ahora, simplemente, siento que estoy más pérdida que antes.

¿Tengo que quedarme o seguir con mis planes?

Solo espero que todo funcione como quiero y pronto, ver a mi hermano Cedric ser el heredero de la mansión Blister. Darle la oportunidad de lucirse y demostrar que él, aún con sus dificultades, puede ser mejor Vizconde que mi padre o mis hermanos.

Pero para que ocurra de forma inmediata, mi padre debe ser atrapado en el fraude y mis hermanos, morir.

Para entonces, solo quedaríamos los dos y él tendría la vía libre para ser Vizconde.

Sería menos difícil que en el pasado, estoy segura de eso.

Sé que puedo lograr que todo eso ocurra antes de que mis 16 años.

“Te quiero, Iris”, confesó aún abrazados.

Asentí para corresponder su abrazo. Todavía no puedo morir, es verdad.

Aún no es tiempo para dejarse morir.

****************

“Este vestido está defectuoso también, ¿por qué..?”, me pregunté.

Hace un par de días había estado todo bien, pero los vestidos más bonitos y elaborados que tenía estaba rotos.

Maldición.

Otra vez debe ser Kristell.

A pesar de que ese mismo día, Cedric aclaró su posición y debería ser imposible que tome alguna atribución más sobre mis cosas, lo hizo de nuevo.

¿Es que cree que esto es una broma?

Miré mi vestido, ese era el que usaría para asistir a la fiesta de Aradia. Ella me había invitado y yo acepté su invitación, pero al ser su mejor amiga debería haber llegado muy temprano.

Sin embargo, siento que es una molestia hacerlo. Además, no puedo usar la ropa de esta manera.

“Señorita Iris, ¿ocurre algo malo?”, preguntó Halsey.

De vez en cuando, Halsey venía a mi habitación para saber mi estado. A pedido de Artis, a veces debía entrar Erwin o Halsey para verificar que mi salud estuviera bien.

Pero hoy, siento que esa mujer solo está haciendo de todo para ser expulsada. Incluso si detesto a mis hermanos mayores, si se enteran de lo que ha estado haciendo Kristell, ni siquiera podrá escapar de las consecuencias.

Qué frustrante dejar que solo ellos se encarguen de estos problemas.

“Sí. ¿Quién rompió mi vestido?”, me di la vuelta y la miré.

Se veía sorprendida. Es obvio que ella no lo hizo.

“De seguro era antiguo, Señorita Iris. No creo que sea algo muy grave”, suavizó el problema.

Sí, quizá sea verdad. No he pedido ni un solo vestido desde la última vez que Archibald me regaló una colección cara de ropa, ya hace tres años de eso.

Lo creeré.

Espero que no se trate de Kristell porque esta vez caerá de inmediato en el Fondo. El lugar más aterrador de esta mansión.

Recibió 40 latigazos y permaneció por 10 min bajo la luz del sol cuando terminó el castigo.

Eso debe haber sido suficiente para que asumiera el castigo.

“Si lo desea, puedo pedirle al Joven Duque que le consiga vestidos de inmediato”, sugirió.

¿A Richard?

Hm, tras todo lo que pasó, él debe estar demasiado ocupado para encargarse de mi y Cedric también. Mi padre con Archie deben estar muy ocupados y aún no volverán del Palacio.

Con esto, puedo darle ventaja a mi hermano Cedric.

Bueno, realmente no me importa qué es lo que va a pasar con Richard y Archie ahora, pero si los dos se equivocan, mi padre no tendrá más opciones.

“Trae a mi hermano. A Kristell. Y de ser necesario, a las criadas encargadas de mi vestuario...”, pedí.

Tal vez sea infantil, pero quiero que Richard piense que todo ha vuelto a estar bien. Que lo he perdonado por sus errores.

“Sí, señorita Iris”, se inclinó y se retiró.

No tengo grandes expectativas respecto a lo que vaya a suceder ahora, pero debo hacer correr el rumor.

Mucho más pronto que antes de lo sucedió, aquel rumor de que Richard, Archibald y yo teníamos una relación extraña.

Será incómodo, lo sé muy bien. Pero no hay opción.

De cierta manera, esto los va a arruinar a los dos de manera inmediata.

Vi mi vestido, no tiene nada de malo con excepción de las mangas. Tienen hoyos y están descosidas de manera muy poco prolija.

Sería repugnante vestirme con esa ropa.

Cuando vi hacía la ventana, supe que esto tardaría más de lo que pensaba. Para que todos puedan creerme, necesito causar mucho más dramatismo.

Que todos se impacten cuando entren y me vean aquí con mi hermano.

Respiré profundamente, la presencia de Richard se había vuelto una completa tortura para mí.

Según los rumores de la mansión Blister, se podía esperar que se hablara de la gran atención y envidia que mis hermanos dejaban reflejados cuando hablaban conmigo. Ellos me adoraban.

Archibald arriesgaría su vida por mi, Richard me daría su vida entera. Archibald me daría el Imperio, Richard me entregaría el territorio entero. Es lo que siempre se decía.

Y mis hermanos, solo se peleaban por quién tenía mi atención. Era repugnante.

Cedric, durante todo este tiempo, se ha encargado de que Richard se mantenga ocupado con los asuntos internos de la mansión y por supuesto, ha interceptado con todos los informes que Richard le envía a Archibald.

Me prometió alejarlos hasta que ya no pudiera hacer más o nuestro padre intercediera. Sin embargo, necesito provocar conflicto entre los gemelos y que de esa manera, mi tutoría le pertenezca a Cedric.

Es lo que él ha tratado de hacer, solo que de la forma buena.

Yo haré algo diferente esta vez.

Al menos, si deseo cambiar un poco de mi futuro, debo acabar por mis propias manos a las personas que ocasionaron todo mi sufrimiento en el pasado.

“¡Iris! ¿Está todo bien? Oí de Halsey que me llamaste...”, entró ansioso.

Lo miré y suspiré.

Lo odio con todo mi corazón. Espero que muy pronto, tan rápido pueda suceder, mueras hermano.

“Sí, es verdad...”, murmuré para seguir con mis quejas, “Debo salir a una fiesta de Aradia y mi vestido está roto... Recuerdo que ayer estaba bien, pero ahora no sé qué le ocurrió”.

Cedric habría hecho todo más rápido, estoy segura de eso. Sin embargo, quiero saber si todos esos rumores pueden comprobarse.

¿Realmente me darían todo lo que quisiera?

Me encantaría saber hasta qué punto pueden destrozar su reputación por mi.

“¿Qué quieres decir, Iris?”, preguntó.

Se veía confundido. Por ser la hija menor, debería ser muy querida por todos, digo, soy la única mujer descendiente de mi padre y bueno, toda mi vida sería perfecta.

Pero eso nunca fue así.

“Pienso que hay alguien estropeando mis vestidos...”, asumí.

Fuera real o no, seré buena. Le daré una nueva oportunidad a mi hermano y perdonaré su error. Por la lejanía que tiene sobre mi ahora mismo, debe pensar que sigo molesta con él.

“Iris... ¿Quién está a cargo de ti?”, preguntó.

“Se trata de Kristell, ella es mi doncella”, recordé.

Me acerqué a mi hermano para tomar su mano con las mías. Creo que se me daría muy bien ser una intérprete.

“Por favor, Richie. ¿Puedes arreglar este problema por mi?”, se lo pedí con cariño.

En el pasado, nuestra relación era así. Yo realmente lo adoraba con todo mi corazón, a mis dos hermanos los amaba mucho y lloré demasiado cuando ambos murieron, pero en este momento...

¿No son patéticos?

Están locos.

Yo creé sus apodos. En realidad, fue tal como decía todo el mundo en esta maldita mansión del Vizconde. Ellos se aprovecharon de mi, incluso puedo decir que me tocaron.

Tocar su mano es repugnante.

Pero mantuve mi sonrisa. Quiero provocar que todo se arruine en esta mansión para retrasar el compromiso hasta el máximo y luego, evitarlo cuando halle la forma de hacerlo.

“¿Qué quieres que haga, Iris?”, volvió a preguntar. Acercándose más a Iris.

“Ya te perdoné por todo, hermano. Así que, por favor, arregla esta situación..”, se lo pedí de la forma más cariñosa posible.

Al menos, lo poco que conocía del cariño se lo mostré a él y de seguro, debo haberlo convencido. Según ellos, harían todo lo que les pidiera.

Así debía suceder ahora.

“Te pediré más vestidos, no, todos los que quieras. Y ahora, castigaré a esas mujeres. Merecen recibir el peor castigo por haberte molestado...”, aceptó con frialdad, “y van a enterarse de cuál es su lugar si no quieren ser expulsadas de este lugar”.

Pero me abrazó. Como si necesitara de su protección y ayuda para consolar mi angustia.

Esto me está provocando náuseas. Es tan desagradable estar entre sus brazos.

Es como si solo recordara cada momento que sufrí a su lado. El dolor que ambos me hicieron experimentar durante todo el tiempo que estuvieron vivos.

Es lo que más permanece en mi mente.

“Si tan solo Cedric estuviera más pendiente de ti, sabría lo que está sucediendo... Tch, estúpido defectuoso”, murmuró cerca de mi.

Me quedé en silencio. Debe seguir creyendo que lo perdoné y por supuesto, mi persona favorita.

“Busca un vestido nuevo, yo me encargaré de todo esto. Ve a divertirte, piensa en que todo estará bien cuando vuelvas”, se separó y le sonrió a Iris.

Estaba tocando mi pelo.

Es repugnante. Demasiado.

“Confió en ti, Richie”, respondí.

Y mi hermano se retiró, yo simplemente miré a mi alrededor procesando lo que me dijo.

Hasta que, otra vez, tenía náuseas. Solo que era mucho peor que antes.

Corrí al baño de mi habitación y terminé expulsando todo lo que había comido antes. Era asqueroso.

Es por estas cosas que había decidido morir, muchas veces fue un enorme sufrimiento para mí soportar las actitudes que mis dos hermanos tenían sobre mi.

Sobre todo, Archibald. Él sí perdió la cabeza después de que mi padre les avisara sobre nuestro matrimonio.

Con eso, sigo sin dudar de que quien ocasionó su muerte fue mi padre, o al menos, tuvo cierta participación en eso.

No lo entiendo.

Los detesto demasiado, y espero que pronto, se desaparezcan de mi vida para siempre.

“Señorita Iris, ya encontré un vestido disponible para usted..”, Halsey habló cuando vio a Iris.

Era un vestido más ajustado que el anterior. Me incómoda demasiado usar los vestidos así, pero fueron Richie y Archie quiénes siempre me dijeron eso. Que nunca debía usarlo porque se vería muy mal en mi.

Me molesté más. Estoy segura de esto.

“Apresúrate, no puedo llegar tan tarde a esa fiesta”, lo acepté sin más.

Ni siquiera soy una Santa reconocida, así que puedo usar vestidos normales como cualquier joven de mi edad. En toda mi vida pasada, viví de esa manera tan recatada y oculta de los demás por estar bajo la protección de mis hermanos mayores.

De hecho, ni siquiera era protección. Ellos dos están locos.

Es aterrador.

Tan pronto cumpla los 16 años, llegará el momento en que mi compromiso será confirmado y una vez suceda eso, estaré acabada.

Ni siquiera utilizando a mis hermanos mayores podré escapar de ese horrible matrimonio.

Al menos, debo pensar en una manera de retrasar esa boda.

Hasta que exista una forma de cambiar el futuro.

Porque esto lo hago por Cedric, él fue el único, que realmente deseó que siguiera con vida. Entonces, me esforzaré.

Incluso si vuelvo a ver a mi esposo en esta vida, conseguiré que ese desastroso y horrible futuro, termine para siempre.

O eso espero.

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