Elena Una Heroína Del Amor

Yo soy Elena

Hola, mi nombre es Elena Santiballes. Soy una joven a la que le ha costado abrirse paso en este difícil mundo de adultos. Tengo 24 años y acabo de terminar mis estudios universitarios. Soy licenciada en Relaciones Industriales y Contador público. Salí egresada con las notas más altas de mi promoción, a pesar de cursar dos carreras simultáneas. No soy rica de nacimiento, me ha costado lograr lo que tengo. Durante todos mis días de estudiante, trabajé como auxiliar de contador en una pequeña empresa de manufacturación de calzado perteneciente a los padres de mi amiga Lucy. Ellos fueron amigos de mis padres. Después de su trágico accidente, no supe más de ellos hasta que ingresé a la universidad y me encontré con Lucy. Ese fue uno de los motivos por los que me tendió una mano amiga.

Mis padres perdieron la vida en un accidente automovilístico la noche que venían de celebrar sus 20 años de casados. No se supo qué fue lo que pasó, todo quedó sin una explicación oficial al respecto. Mis familiares me dieron la espalda y me dejaron sola. Solo Lucy y sus padres me apoyaron y no me dejaron sola en ningún momento, cosa que les agradezco. De ese trágico accidente se cumplen 8 años. No pasa un día en el que no recuerde a mi madre con su dulce sonrisa.

Hoy en día, Lucy está al frente de la empresa de su padre y yo en la parte administrativa. Los señores Martino, padres de Lucy, están felices de que las dos estemos al frente de todo. Ellos están seguros de que lo vamos a lograr.

Cuando cursaba el segundo año de contaduría, conocí a Héctor, un joven de buena familia que decía quererme. Digo que decía, ya que descubrí que no es así. Desde hace cierto tiempo, Héctor ya no tiene tiempo de estar conmigo. Siempre hay una excusa para no durar mucho en nuestros encuentros. En principio, pensé que lo que me decía de tener mucho trabajo era verdad. Pero comentarios de amigos y conocidos me fueron poniendo suspicaz en torno a su conducta para conmigo.

Cierto día, Lucy me invitó a desayunar a un cafetín algo alejado de la oficina. Me dijo que quería mi opinión respecto a un proyecto de expansión de la empresa y que teníamos que reunirnos con un supuesto inversionista, cosa que me extrañó, pero no dije nada. Ya que tenía más de quince días sintiéndome mal, sobre todo cuando comía, ya que todo me repugna, lo vomito y tengo mucho mareo que pienso se trata de la mala alimentación, producto del estrés de tanto trabajo.

Lucy quería que yo me diera cuenta de la traición de Héctor. Lo que Lucy no sabía era que yo ya lo había mandado a seguir con el hermano de Carmen Julia, una joven trabajadora de la empresa. Su hermano era detective privado. Ya tenía en mis manos las pruebas necesarias para dar por terminada esta desgastada relación. Solo estaba esperando el momento justo para que Héctor no dijera que eran inventos míos. Que quería terminar porque de seguro yo tenía a otro o que yo inventaba cosas para pelear.