El Día Que Me Reencarne Como Una Pequeña Elfa.

CAPÍTULO 10: LA ALDEA.

En ese momento había llegado con el grupo de chicas al país vecino. Todas ellas quedaron sorprendidas al ver cómo en un instante llegaron del punto A al punto B en tan solo un segundo.

—¿Seguro que aquí estarán bien? — les dije.

Una de la chicas la más mayor de ellas llegó a mi lado.

—Estaremos bien, me las llevaré a mi pueblo natal —

Me quedé pensando como sería su trayecto desde aquí hasta allá y sin saber de todos los monstruos que se encontrarían en su camino y pensé en una solución a sus problemas de forma más rápida.

<> Aesir ¿Quiero saber si tienes una Skill para ver los recuerdos de las personas >>

<< ¿Hmm? Si yo tengo todas las Skills que existen se te olvidó que soy una diosa >>

<< eres la diosa del caos como no se me va a olvidar >>

Skill MENTAL PERCEPTION adquirida

<< gracias >>

<< OOH ¿Que acabas de decir? Jejeje >>

<< nada, nada >>

Me acerqué a la muchacha y le pedí que bajara su cabeza a la altura de la mia pues ella era más alto que yo y en ese momento puse mi mano en su frente y pude ver todos esos malos recuerdos de su mente hasta pude sentir su sufrimiento y pocos después ví los momentos felices en su vida hasta llegar a un recuerdo de ese lugar donde nació, aparté mi mano y le hice una sonrisa.

—Ya se dónde llevarlas — le dije.

Ella dejó salir una lágrima de felicidad y en ese momento ordenó a las otras para que volvieran a juntarse.

— Okey, esto será rápido !DIMENSIONAL MOVEMENT! — desaparecimos de ese lugar para llegar a la aldea natal de aquella muchacha dónde fue recibida por sus padres con lágrimas de felicidad y abrazos de amor. En ese momento todas las demás fueron recibidas con alegría y así pude saber que ya estaban en un lugar seguro.

—Ahora toca rescatar a los demás de los otros lugares — dije en voz baja.

Me despedí de todas ellas pero no querían que me fuera y me suplicaban para que fuera su diosa en esa aldea pero les dije que no, ya que tenía a dos compañeras esperando muy lejos de allí.

—Gracias diosa elfa — dijeron todas las personas de esa aldea.

<< ¿diosa elfa? >>

<> Jejeje dejemos eso para otra ocasión >>

Levanté mi mano como gesto de despedida y me fui de ese lugar en un instante.

María y Aurora siguieron avanzando por ese camino hacia la siguiente ciudad y se quedaron en una pequeña cascada donde las dos se estaban dando un baño y ambas estaban completamente desnudas hasta en ese momento y sin avisar aparecí encima de la cascada.

—¡Ah echen paja! — caí sobre ese pequeño rio mientras las dos mujeres se miraban muy confundidas.

—¿Que fue eso? — dijo María.

Aurora preparó su arco al salir rápidamente del agua y apuntó hacia el pequeño rio.

—No se pero se va a arrepentir por estar de mirón —

Salí en ese momento a la superficie y me llevé una gran sorpresa al ver a esas dos mujeres como habían llegado al mundo.

—¡Ahhh! — me metí al agua de nuevo por la impresión y ellas se dieron cuenta que era la pequeña elfa que había llegado sin avisar.

—¡Oye te tardaste demasiado! — dijo María.

Salí del agua de nuevo y ví como se movían los dos grandes melones de Aurora mientras se acercaba hacia mi.

—¡Ahhh! — me cubrí con mis manos para no verla pero ella me abrazó en ese instante y me puse roja como tomate y sentí que algo se estaba levantando pues se me había olvidado que también tenía esa otra cosita ahí abajo.

—¿A dónde llevaste a esas chicas? — dijo Aurora mientras me sacaba del agua en sus brazos.

—¿Pues? Las llevé a una aldea donde había nacido una de ellas — le respondí.

—Que buena idea tuviste —

—Jejeje gracias —

Las dos salimos del agua y María sacó dos toallas de su caja dimensional para entrarle una a Aurora.

—Okey la siguiente ciudad está a díez kilómetros de aquí si caminamos en la madrugada podremos llegar al amanecer — dijo María.

—Oigan se les está olvidando que me puedo teletransportar a cualquier lugar de este pais — dije.

—¡Oye desde cuándo sabes esa habilidad! — dijo María después de acercar su cara a la mía.

—Jejeje no sé — le respondí en forma esquiva para no hacerla sospechar que en realidad tengo una conexión con la diosa del caos.

—Ahora que podemos ir a esos lugares en tan solo unos segundos no hay por qué apresurarnos — dijo Aurora ya con su ropa puesta.

—Okey descansemos un poco — María sacó unos colchones de su caja dimensional y se me hizo muy extraño que ella sin ser de mi mundo pudiera obtener algo así.

—Oye María ¿De dónde obtuviste esos objetos? — le pregunté.

—¿Pues? —

—Se los dió mi hermano mayor — respondió Aurora por ella.

María se molestó por esa interrupción e hizo un puchero muy infantil.

—Mi hermano es un reencarnado o sea que vino de otro mundo —

Me sorprendió escuchar esas palabras y me llené de ganas por preguntarle más sobre ese hermano.

—¿Que más cosas te contó tu hermano? —

—Muchas cosas como por ejemplo... en ese mundo los humanos viajan en pajaros de metal —

<< aviones >>

—Tambien que allá no hay ningún tipo de magia solo están en libros —

—¿En serio? — dijo María.

<< las novelas ligeras japonesas >>

—Y también me contó que en esos libros siempre el héroe tiene todos los poderes ridículamente posibles —

<< el prota cliché >> Bueno a decir verdad también voy por el mismo camino.

En ese momento las tres nos acostamos sobre esos colchones pero decidí dormir con Aurora porque ya tuve unas malas experiencias con cierta heroína.

Aurora en ese momento me abrazó y me dijo que eso le hacía recordar cómo ella dormía con su hermano mayor y le devolvió una sonrisa y un gran abrazo.

había llegado el amanecer y las únicas que todavía seguían dormidas eran María y yo. poco después sentí el olor de pescado asado y al abrir mis ojos ví a Aurora al lado una pequeña fogata con tres brochetas de pescado al fuego.

—Buenos días — me dijo.

—Buenos días — le respondí.

Ella estiró su mano y me ofreció una brocheta de pescado mientras me limpiaba los ojos con el agua de ese río.

—Gracias — comencé a comer y me supo delicioso a pesar de no tener sal.

María se despertó al sentir el olor y sin preguntar tomó unas de las brochetas para comenzar a comerla.

—Oye primero se dice buenos días — dijo Aurora al ver su reacción.

—Siempre me despierto con mucha hambre — respondió María.

Solté una carcajada al ver esa escena y después sentí una presencia en ese lugar.

<< nos están vigilando >>

<< si, eso me dí cuenta >>

Sin que las dos mujeres se dieran cuenta un ser parecido a un águila estaba oculta en la sombra de un árbol cercano a esa cascada y después se fué volando de ese lugar.

—Oigan ahora vuelvo —

—¿Eh? — respondió María.

En ese instante desaparecí de la vista de las dos mujeres y aparecí al frente del águila que nos estaba vigilando desde hace tiempo.

—¡Ah! — gritó el águila al verme aparecer de sorpresa sobre el aire.

Abrí mis alas de dragón y saqué mi espada de energía para apuntar hacia ese monstruo que estaba muy asustado.

—Con que tú eres el mismo que estaba en la ciudad de Neuvy cuando mataron al señor Jhon —

—Jejeje fuí yo quien lo mató jejeje —

En ese segundo lo golpeó en su pico con una velocidad increíble que ese monstruo no se dió cuenta y salió disparado hacia el suelo hasta caer sobre unos árboles. cuando el intentó volar de nuevo después de sacudir su cabeza por el dolor aparecí al frente de el y corté el árbol donde estaba parado pero logró esquivar mi ataque.

—No vas a atraparme jejeje — el águila comenzó a formar un arco de energía y una flecha del tamaño de una lanza.

—Ver si esto es de tu talla, maldita mocosa —

— ¡DEAD ARROW! —

La flecha de energía fue lanzada pero a los pocos segundos se dividió en cuatro pero logré desviarlas con mucha facilidad hacia varios lugares de ese bosque y cayeron en el suelo haciendo unas pequeñas explosiones que las otras mujeres las escucharon.

—¿Que fue eso? — dijo María.

—Fue por allá —

Las dos salieron corriendo hacia dónde estaba luchando con el monstruo águila.

Ese monstruo estaba muy asustado al ver cómo desvié sus ataques con un solo movimiento.

—¡Eres muy fuerte para ser una mocosa! —

Apunté mi espada hacia el mientras el dragón glotón salía en mi espalda para hacerlo tener más miedo.

—Dime ¿¡En dónde se esconde ese tal jefe supremo!? —

—kukukuku acaso crees que voy a delatar a mi jefe como lo hizo el tonto de Jhon —

Un pequeño haz de luz fué lanzado desde la punta de mi espada y le corté una de sus alas sin que se diera cuenta.

—¡AAH! — gritó ese monstruo con mucho dolor.

—¿Y ahora vas a hablar? —

—¡NOOO! —

Lancé otra haz de luz y le corté un brazo sin que se diera cuenta otra vez.

—¡AAH! — gritó de nuevo.

—¡Habla o te haré picadillo! —

—¡Cómo una pequeña elfa puede hacer algo tan malvado! —

—¡Tu fuiste quien mató al señor Jhon de forma cobarde! —

En ese momento mis dos compañeras llegaron a ese lugar y se sorprendieron al ver cómo estaba ese monstruo ya con varias heridas graves sobre su cuerpo.

—¿Ese monstruo? — dijo Aurora.

—La hija del jefe Ramiro. Cuando el jefe supremo se entere vas a morir —

Ese momento de distracción me le acerqué a ese mounstro y puse mi mano sobre su cabeza para ver todos su recuerdos con mi habilidad pero me arrepentí por hacer eso después de ver todas esa atrocidades y enfermizas muertes que presenció ese monstruo pero cuando ya estaba por ver el lugar en dónde se ocultaba el jefe supremo en ese instante ví un hombre sentado sobre un sofá al lado de dos hermosas mujeres y tenía una copa de vino en su mano derecha.

—por fin te pude ver a mi preciosa elfa — me dijo.

—¿Tu eres el jefe supremo? —

—Claro — el hombre tomó un sorbo de la copa.

—Le voy a sacar la información de tu ubicación a este idiota —

—Jajaja ya lo sé ¿Entonces vas a derribar mi organización? —

—Asi es y a ti te espera una muerte horrenda por todo lo que hiciste a esas personas que asesinaste —

—Jajaja en serio... Haz lo que quieras con ese estúpido ya no lo necesito pero.... —

En ese momento una extraña energía dejó en blanco la mente de ese monstruo y quedó como un ser vacío y sin alma parecía una estatua cuando ví que empezó a babear sin sentido.

—Ese maldito le destrozó su mente — al verlo así me dió tanta lastima que usé el dragón glotón para devorarlo y solo quedó de ese monstruo su ala y el brazo que le había cortado.

—¿Ese es tu poder oculto? — dijo Aurora muy sorprendida después de ver al dragón glotón del abismo.

—Asi es — le respondí.

Caminé hacia ellas con mi rostro serio con un secreto que no debía saber aquella mujer que es mi compañera.

—Vamonos — las tomé con mis manos pero María logró soltarse para mirarme fijamente.

—¿Algo hiciste para que ese sujeto quedara de esa forma? — dijo.

—miré los recuerdos de ese monstruo para ver en dónde se ocultaba el jefe supremo pero no ví nada —

—¿Hmm? — respondió.

Pasaron varios minutos y María sacó el mapa para ver la siguiente ubicación.

—La ciudad de Moira es la siguiente —

—Okey — Aurora y yo respondimos a tiempo.

Nos tomamos de las manos y en ese instante usé mi habilidad DIMENSIONAL MOVEMENT y nos fuimos de ese lugar para aparecer sobre una colina con una ciudad a cien metros al frente.