CAPÍTULO 16

NARRADOR

Dmitry, al ver el estado tan alterado de Irina, solamente puede abrazarla y consolarla y esperar que se calme un poco. Ella, en medio del llanto, no paraba de decir que fueron ellos. Dmitry no sabía a quiénes se refería hasta que ella logró calmarse y él la miró a los ojos para que le dijera quiénes eran los que mataron a su madre.

-"Mi ángel, ¿quiénes fueron?", preguntó Dmitry.

-"Mi papá y su amante", respondió Irina y volvió a llorar en los brazos de su esposo.

"-Tranquila, ellos van a pagar por todo lo que te hicieron", dijo Dmitry. Ella no quería hablar, solo llorar y estar en los brazos de su esposo.

Dmitry la llevó en su silla hasta la habitación donde subieron a la cama y se abrazaron fuerte. Irina solamente aflojó su agarre cuando se quedó dormida. Entonces, Dmitry dio la orden de destruir al padre de Irina y a su esposa, y de paso a su hija y al ex de Irina, si se descubría que tenían algo tramado contra ella. Él veló el sueño de su esposa. Ella hablaba dormida y él la consolaba cuando notaba que tenía pesadillas. Después de unas horas, ella despertó con mucha hambre. Con el embarazo, necesitaba alimentarse bien.

-"¿Estás bien?", le preguntó Dmitry mientras la veía comer.

-"Sí", respondió Irina y siguió comiendo.

-"Mi reina, sabes que puedes contarme lo que sea. ¿Cómo te sientes?", preguntó Dmitry.

-"Como una idiota, así me siento. Viví con los asesinos de mi madre y nunca dije nada. No fui capaz de encerrarlos. Le fallé a mi madre", respondió Irina molesta.

-"No es así. Eras solo una niña de tres años. Tu mente bloqueó esos recuerdos y nunca nadie hizo nada para ayudarte. No le fallaste. Ellos van a pagar lo que hicieron", comentó Dmitry.

-"No sé qué hacer ahora", dijo Irina confundida.

-"Nada, déjame todo a mí. Los voy a refundir en la cárcel y les voy a quitar todo lo que por derecho te pertenece. Tú no debes hacer nada", dijo Dmitry.

-"No sé qué sería de mí si no te tuviera a mi lado", dijo Irina.

-"El hubiera no existe. Lo importante es que estamos juntos y nunca nadie nos va a separar porque tú eres mi reina", expresó Dmitry.

-Y tú, mi rey - Irina le sonríe.

-Bueno, deberías consentir un poco a este rey que has tenido un poco abandonado - Dmitry la mira con cara juguetona.

-Así, ¿y qué quiere mi rey? - pregunta Irina.

-Vamos a la habitación y te muestro lo que quiero, - Dmitry la hizo subir a su regazo y la llevó a la habitación donde la hizo suya una y otra vez, y ahora su esposa se expresa más, lo cual le encanta. Le encanta escuchar su nombre en sus labios mientras la hace suya.

Mientras ellos disfrutan, en la ciudad, un muy paciente Víctor cuida muy bien de Celeste y Sol. Él las ayudó en todo. De hecho, el departamento donde ellas se están quedando es el suyo y a él le encanta cuidar de las dos, aunque por el maltrato aún no puede acercarse del todo a Celeste, pero Sol lo quiere mucho y cada que lo mira le sonríe, él la toma en sus brazos y está todo el tiempo con ella.

-Le agradas mucho a mi hija - comenta Celeste al ver a su hija feliz en los brazos de Víctor.

-Y ella, a mí, es un ángel hermoso - Víctor con la hermosa niña en sus brazos.

-Gracias por ayudarnos - le agradece Celeste.

-No es nada. ¿Tienes planes ahora que eres libre? El detective encontró a ese hombre atado en el lugar donde lo dejaste. ¿Qué piensas hacer ahora? - Víctor.

-No sé. Creo que volveré a ejercer mi carrera. Quizás después de un tiempo deje la ciudad y busque un nuevo comienzo para mí y mi hija - eso hizo que Víctor tuviera miedo. Él no quería dejar de verlas.

-Si quieres, las ayudo. Tengo muchos contactos y te puedo conseguir trabajo y un lugar donde quedarte y así seguiré viendo a Sol - propuso Víctor.

-Lo pensaré - le respondió Celeste.

A Celeste también le gustaba Víctor, pero con todo lo que pasó, sentía miedo. Tenía pavor a ser lastimada nuevamente y él lo acaba de conocer. Y aunque él se ve buena persona, tiene sus dudas. Después de todo, su hija también podría salir lastimada y eso le aterra. Ella solamente busca la felicidad de su hija y poder tener una vida tranquila donde nunca nadie la vuelva a lastimar. Por eso, en ese momento, ya había tomado la decisión de irse con su hija a la antigua casa de sus padres, donde ella no había tenido la oportunidad de ir, pero estaba a su nombre. Así que solamente tenía que ponerse en contacto con el abogado de sus padres y volver a la casa donde creció. Y con el dinero que aún permanece en sus cuentas, solamente debe ir al banco y recuperar su vida nuevamente. Le agradece a Víctor su ayuda, pero ella no está lista para una relación. Ella necesita sanar antes de volver a comenzar. Por eso, se iría al día siguiente sin despedirse, porque temía que él no la dejara ir.

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