Estoy seguro de lo que hice.

Estamos en un café para la reunión con el señor Garrón para la venta de la mitad de la casona, es un señor que conoció a mi abuela, me cuenta anécdotas que pasó con ella y reímos, es muy amable, me ofrece su apoyo incondicional y yo muy ciertamente se que necesitaré de alguien que aprecio sinceramente a mi abuela, personas como estás son muy escasas.

Le hablo sobre la situación en la que estoy y lo difícil que será para mi llevar a cabo mis planes a futuro.

-- Señorita Nataly, los documentos están listos solo requiere su firma y así como lo pactamos yo seré quien maneje directamente en el pueblo sus tierras, desde hoy soy su representante legal ante cualquier empresa y persona de pueblo Corsé.

-- Le estoy muy agradecida, señor Garrón por su apoyo, yo desde ya le cederé la mitad de la casona y buena este es mi número para que me pueda hablar cuando lo requiera, por el momento estamos listos con los planes y bueno Kaiser Ruan será responsable de todo lo que concierne al hotel y mi nombre luego de ser cambiado, solo será un sello de aviso.

-- Señorita Nataly, está tarde daré a conocer a su tío César Wenner, la compra efectiva de la casona, y por lo que me pide los prados inmensos, ya están cercados, nadie pisará ningún apice de sus terrenos y de eso me encargo yo.

-- Gracias por todo lo que hace por mi señor Garrón.

Le estrecho la mano y siento como me he quitado un peso de encima y se que será un gran apoyo para mí.

El señor Garrón es un conocido capitalista y de un buen apellido, no solo en pueblo Corsé si no también en varios países, ya que posee sus cadenas de carnes y embutidos.

Nos despedimos y una vez más me da su apoyo, para eso coloca una pequeña cajita de mármol en mi mano, me dice que cuando necesite su ayuda solo muestre este objeto en cualquier propiedad de él.

Yo lo guardo sin abrirla, nos despedimos Kaiser le estrecha la mano y así termina nuestra reunión.

Después nos regresamos al hotel me hace falta un buen baño, tengo los nervios a flor de piel se que estoy demasiado estresada y eso me provoca dolor de cabeza.

Kaiser me da un beso y va a prepararme la tina, me llamo y yo voy.

-- Ven preciosa, está vez yo te ayudaré a tallar tu espalda.

-- Te agradezco cariño, no sabes cuánta falta me hace, quiero estar en casa.

-- Tranquila preciosa, yo dejaré tu estres de un lado.

Comienza tallando suavemente mi espalda y ese aroma de jabón es tan delicioso, es de vainilla y moras.

Mi cabello lo peina con sus dedos, el agua tibia cae sobre mi cuerpo y siento como él se introduce en la tina, se sienta detrás de mi y besa mi cuello, yo me estremezco ante tal caricia.

Nuestros cuerpos están jabonosos y los besos se han desatado en aquella tina, me siento delante de él, ahora soy yo la que lo besa, quiero su boca solo para mí, me toma de la cintura y me acomoda entre sus piernas, siento el roce de su erec**on y jadeo. Él me presiona y junto con su abrazo lleno de pasión siento como va entrando en mi, suavemente.

Seguimos con nuestro acto de placer y amor 💓💓.

Estamos totalmente perdidos, reímos por nuestra elección de hacer el amor donde nos da la pasión.

--Naty, estoy perdiendo la razón y tú eres la única causante de todo esto, no me culpes si el día de mañana me vuelvo un orate y no logro nisiquiera saber mi nombre, pero de lo que estoy seguro y jamás olvidaría si algun día pierdo la memoria es que tú eres mi primera mujer con la que compartí mi sexualidad por primera vez y yo fui para tí tu primer hombre.

-- Kaiser te amo y se que sola no estaré jamás, eres importante para mí, daría cualquier cosa por verte siempre feliz y desde aquí mi vida te prometo que nada ni nadie te hará daño.

Nos abrazamos, salimos de la ducha envueltos en toalla y yo veo su pecho tan marcado y sonrió ya que ese cuerpo me pertenece y lo acabo de marcar con mis besos.

--De que te ríes traviesa, acaso en tu mente estás recordando lo que acabamos de hacer.

--No puedo negarte que aún siento palpitar mi intimidad, jamás pensé que se podía sentir tan bien hacer el amor.

-- Eres una traviesa y que mejor si eres mía, recuérdalo siempre eres mía.

Lo abrazo y vuelvo a besar.

--La riqueza me da igual, para mí siempre fue normal ver contar cientos de dinero a mi abuela, lo único que quiero es ser amada siempre por ti amor mío, soy una tonta a la cual tienes muerta por tus ojos, por tus labios y por como me amas cada día.

-- Nataly cariño mío, tus palabras son tan valiosas para mí, cariño hay algo que no te he dicho, pero sabes no me importa nada, estoy seguro de lo que hice y ...

-- Kaiser que has hecho, no me asustes y vamos dímelo.

-- Recuerdas que cuando quedamos en vernos, y no pude llegar a tiempo, pues tuve una discusión muy grande con mi abuelo ya que me prohibió que me mezcle con una Wenner, pero amor yo ya no podía retroceder, ya no podía hacerlo ya que desde el momento en que caiste del árbol, pues me quedé plasmado contigo, llámame tonto o idiota, pero me enamore como un loco de tí y jure desde ese momento que tú serías para mí.

Deje todo listo firme mi renuncia ante cualquier empresa que me corresponde por el apellido de mi padre, así que yo tampoco soy un Ruan completo y no estoy arrepentido por nada, no soy un títere.

Ante mi respuesta de lo que me dijo mi abuelo, me quito de su testamento y me prohibió volver a su casa, solo me quedé con el dinero que mi madre antes de morir me dejó, ya que el dinero de mi padre no lo puedo tocar por decisión de él.

Asi que desde el momento en que decidí formar mi propio destino , supe que jamás podría volver a abrazar a mi propia sangre.

No me arrepiento de haberlo hecho.

Escuchar a Kaiser decir que dejó a su abuelo y renunció a todo por mí, es muy doloroso jamás pensé que tuvo que sacrificar el amor de su abuelo por mí.

Lo abrazo y le pido perdón no supe lo que hizo por mí.

Las maletas están listas, he comprado algunos dulces del pueblo para llevarlos con nosotros.

Me voy a recoger las cenizas de mi abuela para concluir con este viaje.

Al estar en la calle, recibo una llamada del señor Garrón para informarme que dentro de unas horas se presentará con la documentación de la casona Wenner.

Me dice que no me preocupe por nada, yo le agradezco nuevamente.

Ya en el taxi con las maletas, me despido de este pueblo.

Kaiser me toma de la mano y así nos vamos al aeropuerto, me siento con un peso más liviano, ahora no estoy sola, ahora estoy completa.

Mi corazón está nuevamente completo.

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