la vida le dio una oportunidad

Lorenzo

No merezco el perdón, especialmente de Orlando y Alessia. Me comporté como un patán, o mejor dicho, como un miserable. Sin embargo, hoy vienen a verme. Orlando tiene un hermoso hijo y cambió su vida por completo. Es hombre de familia y tiene una esposa que vio un potencial en él. Dios lo premió por el daño que le causé. Alessia, mi bella hija, corre peligro. Aún estoy desesperado. Ahora que ella está disfrutando de sus hijos y por lo que veo, Alessandro terminó siendo el caballero que salva a la princesa del castillo en llamas. Los veo y se nota esa complicidad en sus miradas. Él ama a mis nietos como si fueran de él. También fueron premiados. Ellos quizás me tengan miedo o no me quieran, como fui un abuelo cruel, pero tengo la dicha de verlos felices. Antonio está de novio con una desconocida, porque no la conozco aún, pero también dejó sus vicios y se lo debo a Andrea Vitales. Ella que viene a mí con tanto cariño, me deja a mi nieto en mis brazos y me dice que ella cree en mí y que puedo ser una mejor persona aún. Mi bella Emma, ella fue mi gran amor. Mi odio hacia ella comenzó cuando me enteré que llevaba un hijo de otro en su vientre. Qué tonto fui. Pero aunque yo no merecía quedarme en esta casa, apenas enfermé, ella estuvo allí y dejó atrás su dolor y dignidad por cuidar de mí, el miserable que hizo su vida un infierno. No tengo perdón de Dios.

"Abuelo, abuelo, mira, te traje esto. Espero que te guste. Aquí dibujé a todos y este eres tú en tu silla. Quiero decirte que te amo, abuelito", dijo Alice con una dulce sonrisa. Dejó un beso en la mejilla de su abuelo y le secó las lágrimas.

"Perdón, cariño. Yo fui muy malo con ustedes", dijo Lorenzo llorando. Y ella lo miró.

"No llores, abuelo. Mi mamá dice que cuando crecemos cometemos errores y que el ser humano es imperfecto", respondió Alice.

"Mm, sí, abuelo. Mamá nos dice eso siempre. Nosotros te amamos, abuelo. Yo te traje a Milon, este perrito 🐕 será tu compañero desde hoy", dijo Giovanni. Le puso el pequeño bulldog francés en el regazo de su abuelo, le dio un abrazo y un beso. Lorenzo sentía un poco de paz. Dios le daba la oportunidad de arreglarse con aquellos a los que un día hizo tanto daño.

Orlando miraba a su padre con tristeza. Después de ser un hombre cruel, ahora estaba en sus últimos días. Vio a los niños mimar a su padre, así que se acercó y dijo: "Veo que te han regalado este hermoso cachorro y ese dibujo. ¿Cómo te sientes, papá?", mirando a los ojos de su padre y viendo cómo le brotaban lágrimas.

"Mi hijo, siéntate. ¿No sabes qué alegría siento al escucharte decir 'papá'? No merezco nada de esto, pero Dios me dio una oportunidad de arreglar mi vida antes de partir de esta tierra", dijo Lorenzo, limpiándose sus lágrimas.

"Oh, papá, para mí siempre serás mi padre, me criaste bien o mal, pero eres mi padre y te amo, mi viejo querido", dijo Orlando abrazando a su padre. Como él dijo, no iba a vivir su vida entera odiando, ya fue suficiente en todos estos años.

"Perdóname por ser cruel contigo, mi niño. Fui un mal padre y gracias por darme esta oportunidad. Eres un buen hombre y espero que la vida te siga premiando. Te amo, mi pequeño Orlando. Estoy orgulloso de ti, hijo", dijo Lorenzo abrazado a su hijo, llorando como un niño. Orlando también lloró. Él necesitó siempre a su padre, pero tanta frialdad era y lo despreciaba que nunca pudo sentir ese cálido abrazo. Hoy, después de tanto tiempo esperando, llegó el momento.

Lorenzo pidió que Alessia fuera a verlo en el despacho con la compañía de Alessandro. Ellos se sentaron y Lorenzo les comentó que Leonardo estaba tramando ir por Alessia. Lo llamó a él para decirle que cuando menos esperen, él va a regresar. Alessia estaba aterrorizada y Alessandro la abrazó fuerte.

Continuará...

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***