Capitulo 5

Ricardo: Si recibes así a los hombres de la casa, fácilmente serás mi cuñada y mi madrastra.

Lorena: señor Ricardo, al parecer el único que no respecta en esta casa definitivamente es usted. Lorena se levanta de la cama y toma una bata y se la pone, Ricardo la toma del trazo y la pega de su pecho se acerca a su boca y le dice: si los espectáculos en esta casa los da asi, no volveré a mi apartamento de soltero, pero tengo para decirte que aunque me case contigo, será solo por compromiso y por dos años antes de que Vanessa regrese.

Lorena: ¿y a ti quien te dijo que me quiero casar contigo?, señor Ricardo al parecer usted vive en una nube donde todas las mujeres están a sus pies, pero déjeme decirle que conmigo se equivoca.

Ricardo: Jajaja, eres una más, la diferencia es que engatusaste a mis padres para que me amenazaran. Y ya veo que no eres nada tonta también seduces a mi hermano por si la jugada no te sale conmigo.

Lorena: si ya termino se puede marchar y mi objetivo es tu hermano no tu.

Ricardo: ¿Cuánto quieres para que te vallas y te alejes de mi familia?

- Narra Ricardo

Salgo de la empresa temprano y me dirijo a mi casa, para la cena que tanto insistió mi madre, mi padre me dice que tiene algo que decirme y nos dijimos al estudio. Por su expresión se que es algo delicado.

Sin ningún tipo de anestesia me informa que por el bien de la familia necesito casarme con Lorena, hecho furia le digo que ni lo sueñe, si esa niña llego aquí con esos planes se puede ir devuelta, salgo del estudio y me dirijo al comedor y lo primero que veo es a la chiquilla sentada al lado de mi hermano Alonzo con un vestido blanco ajustado a su cuerpo, no sé porque me molesto me acerque a ella y le dije veo que ya no eres tan ordinaria como antes, se te puede hacer el favor, pero por favor ya que convenciste a mi familia con tu carita de mosquita muerta para que me casarán contigo, respéctame y deja de seducir a mi hermano.

La muy mosquita muerta me dio una cachetada y subió a su habitación, dejándome parado como un imbécil, mis padres me regañan y me amenazan con quitarme la empresa, sino resuelvo la situación con Lorena.

Salgo hecho una furia, me monto en el vehículo y decido regresar a ponerle las cosas Clara a Lorena, veo que está en mi antigua habitación cerrada con llave, como tenía las llaves en mano abro la puerta y lo que vi me dejó como bobo, le digo que si sigue así terminara siendo hasta mi madrastra y le propongo dinero para que se aleje de mi familia, pero recibo de ella otra cachetada. No me aguante las ganas de besarla, pero no correspondió mis besos, le dije que ya que quiere guerra en dos días nos casamos.