capítulo 9- la familia de Vittoria...

Vittoria se puso una capa para salir de su palacio en compañía de Sofia, ambas caminan hasta la salida del palacio pero Vittoria se cubre con la capucha para no ser reconocida, Sofia solo le dice a los guardias que su amiga esta enferma y por eso la llevará fuera del palacio. Ambas caminan por el pueblo en busca de un caballo, Vittoria le da el dinero a Sofia para que lo compre, por suerte Sofia sabe calvalgar, así que ayuda a Vittoria, dirigiéndose a la mansión Valentini.

Casi al anochecer, Vittoria ha llegado a la mansión Valentini, el mayordomo anuncia su llegada a la Duquesa Valentini, pues el Duque no ha llegado, las doncellas que ahí trabajan la miran y murmuran entre sí, seguramente ellas y toda la mansión ya saben que supuestamente es estéril, unos pasos se escuchan al bajar las escaleras, entonces Vittoria al ver que la mujer termina de bajar corre y se arrodilla a sus pies mientras derrama un par de lágrimas.

— madre ¿que haremos? El emperador a decidido que el príncipe y yo nos divorciemos.— Vittoria estiro la mano para sostener el vestido de la Duquesa.

La Duquesa la aparta la mano y la golpea en la cara con el abanico que tiene en la mano, por supuesto que había escuchado los rumores, era la burla de la sociedad hoy en día.

— ¡eres una maldita inútil! Solo tenías que dar a luz a los hijos del príncipe y ni eso has podido. Maldita estúpida.— la mujer seguía golpeando.

— madre basta, por favor...no es mi culpa...— Vittoria coloco sus manos delante de ella para que no le dé en la cara.

— por supuesto que es tu culpa, no sirves para nada, por tu culpa estaremos arruinados.—

— no es mi culpa...es culpa de madre que me heredo este mal...—

Apenas dijo aquello la Duquesa se detuvo, estaba roja del coraje, Vittoria se puso de pié observando a los ojos de la mujer.

— es un mal herederado madre, tú también has sido inútil, nisiquiera pudiste darle más hijos a padre, no pudiste darle un heredero varón...tú me has pasado tu mal.— señala a la Duquesa en el vientre.

Todos ahí estaban sorprendidos por la actitud de Vittoria, nunca había levantado la voz ante ninguno de sus padres y aceptaba los golpes de quien sea.

— estas seca madre y por tú culpa yo también...por tu culpa nos iremos a la ruina.—

— n-no...no es así...tú...tú me causaste este mal...— la Duquesa quiso pegarle de nuevo.

Vittoria detiene su mano apretando con fuerza su muñeca mientras fija sus ojos en los de la mujer.

— si no me hubieras heredado este mal, el príncipe no me estaría dejando...me deja por tu culpa, es tu culpa...—

Vittoria empuja a la mujer y sube encima de ella comenzando a golpearla con desesperación.

— es tu culpa madre...por tu culpa mi esposo me esta dejando...por tu culpa...tu me has pasado tu mal...eres una maldita inútil, como mujer no sirves, nací enferma porque tu vientre estas maldita...tu culpa, ¡tu culpaaaaa!—

Todos veían asustados como Vittoria no dejaba de gritar mientras golpeaba sin parar a la Duquesa, le araña la cara y le tira del cabello, la mujer intenta defenderse pero los golpes continuos no se lo permiten, hasta que finalmente los sirvientes sostienen a Vittoria para que deje a la Duquesa y esta es ayudada por las doncellas. Vittoria es llevada a una habitación pues trata de liberarse y alcanzar de nuevo a su madre, ahí la encierran y le ponen llave a la habitación.

— ¿que hacen? No pueden encerrarla...— se queja Sofia.

— cállate si no quieres que te encierre en los establos.— agrega el mayordomo.

Vittoria golpea repetidas veces la puerta, los sirvientes y el mayordomo se retiran, así que Sofia se lo hace saber.

— espérame en un lugar seguro...que no sea dentro de la mansión.— agrega Vittoria.

— pero alteza...—

— hazlo, estaré bien, ahora se magia.— agrego para tranquilizar a Sofia.

Sofia se inmediato se aleja de ese lugar, mientras que Vittoria se acerca a la ventana, es tarde, así que seguramente no tarda en regresar el Duque, lo que la hace sonreír. Sofia se había llevado al caballo con ella quedando en la parte más alejada del jardín casi a la entrada del bosque, ahí se agacha mirando hacía la mansión, solo espera que su señora este bien. No pasó mucho para que el Duque llegará y el mayordomo enseguida le informó lo sucedido, la Duquesa tuvo que ser atendida y estaba dormida por la medicina, su rostro había quedado dañado gracias a las uñas de Vittoria; las puertas de la habitación de Vittoria se abrieron, ingresando el Duque, junto con el mayordomo, incluso se veían doncellas curiosas de saber lo que pasará, Vittoria estaba sentada cerca de la ventana y al ver al Duque se puso de pie.

— como mujer no sirves, apenas te echen del palacio trabajaras como prostituta para aportar algo en esta casa.—

— que crueldad...ahora entiendo porque tu semilla fue inútil y no nació otro hijo, los dioses sabían que tú eres suficiente basura para este mundo.—

El Duque se vio furioso ante las palabras de Vittoria, así que no dudo en tomar el fuete entre sus manos que el mayordomo traía, Vittoria pudo notar que incluso la servidumbre era una basura, una que el mundo ya no necesita.

— voy a enseñarte respeto maldita zorra mal agradecida, tenías un solo trabajo y ni eso has podido hacer.—

— he heredado su mal ¿que se puede esperar de una mujer cuyo vientre esta seco y un hombre que tiene mala semilla? Seguramente fue usted el del problema, no es un verdadero hombre.— Vittoria sonríe con malicia mientras observa a los ojos al Duque.

No hay peor insulto para un hombre de esa época, que decirle que no puede tener hijos, prueba de ello era ver el rostro rojo de ira del Duque quien levanta la mano con el fuete para darle a Vittoria pero ella detiene el golpe con la mano y por asombro del Duque ella logra arrebarle el objeto dando enseguida un golpe en la cara del hombre.

— maldita perra, voy a matarte.— intenta ir en contra de Vittoria.

Vittoria mueve el fuete con fuerza y vuelve a acertar un golpe en la cara del Duque y antes de que este pueda salir de su aturdimiento continua dando golpes.

— Tú eres el culpable, no eres un hombre por completo...por eso salí defectuosa.— Vittoria ríe mientras sigue golpeando.

El mayordomo rápidamente llama a los guardias, así que Vittoria se aparta del Duque cuando los guardias entran acercándose a Vittoria.

— agarrenla que voy a matarla.— ordena el Duque.

Pero este ve como Vittoria los esquiva con facilidad y logra darle uno que otro golpe con el fuete y los aparta de ella, era bueno recordar sus habilidades de su vida pasada, tomo en sus manos el atizador de chimenea y clavo en el cuello de uno de los guardas, todos ahí presentes se sorprenden de ver esto y más cuando Vittoria retira el atizador, el guardia cae el suelo luchando por respirar pero se estaba ahogando con su propia sangre, Vittoria sonríe.

— ¡oh! Que dulce sonido, no hay nada más hermoso que el sonido de agonía de mi víctima.—

"La señorita se volvió loca."

"Lo mató y esta sonriendo."

"Esta poseída por un demonio."

Comentan las doncellas que estaban observando todo. Vittoria se lanza contra los otros que van cayendo uno por uno...

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