Mia Thompson

Soy Mía Thompson tengo 18 años, soy hija de Robert y Linda Thompson, de mi madre no se nada desde que tengo ocho años, pues decidió continuar su camino lejos de papá y de mí, no dejo ni una carta ni nada, aunque no me duele, ella nunca me miró con ojos de amor, era o es una mujer muy hermosa, pero fría, seca, se la pasaba de viaje o de compras con alguna de sus amigas, mientras a mí me,criaban las nanas que constantemente cambiaban, pues, papá siempre terminaba en amorío con alguna de ellas, él decía que era culpa de mamá, ya que nunca estaba, mi vida siempre fue del colegio a la casa, me gustan mucho los números por eso decidí estudiar contaduría, papá mantiene fuera de casa en los casinos, aunque decía que tenía otras mujeres por qué mamá no le prestaba atención, el que ella se fuera le causó un gran daño y comenzó a apostar, primero decía que era para deshacerse de las cosas de mamá, pues ella no se llevó ni sus joyas, pero después, comenzó con los muebles de la casa y a tal punto que una vez íbamos a perder la casa, me tocó entregar parte de la herencia que dejó mi abuelo, y solo quedarme con una pequeña cantidad de dinero para asegurar mi ingreso a la universidad, pasamos de tenerlo todo a estar solo papá y yo en una casa vacía con nada más que lo que queda en nuestras habitaciones o por lo menos la mía, cuando termine el colegio ingresé a trabajar en un bar por la noche, para pagar todo lo que necesito para la universidad, pues si bien tenía para pagar los semestres, no cuento con el dinero para nada más, me encargo en ocasiones de servir los tragos desde la barra y en otras de bailar solamente cuando faltaba alguna de las chicas, pues me encanta bailar, no sé Confundan, no me manosean hombres ni nada parecido solo bailo desde la tarima y con antifaz así que nadie me conoce además que me coloco peluca, aprendí cuando llegaba con algo de tiempo y las chicas estaban ensayando, son muy buenas conmigo y en especial Chelsea que se ha convertido en mi mejor amiga, le cuento todas mis cosas, ella me lleva siempre a la casa, pues papá no sabe en qué trabajo, ni como se pagan las cuentas de la casa ni como llega la comida a la mesa, pues el poco tiempo que está en casa está borracho, lo amo demasiado, pues fue el único que me dio un poquito de amor, pues mamá siempre me rechazó, decía que había dañado su figura y su futuro, pues nunca entendí, para qué se casó entonces con papá si no lo quería.

Pero hoy a Sido un día muy raro me siento observada desde que salí de casa a la universidad, pues hoy tenía unos exámenes por presentar y le pedí a Fabio el poder faltar el día de hoy, y como me debe unos días de descanso no tuvo problema con eso, no sé si estoy con pánico después de que hace unas noches un hombre quisiera propasarse conmigo en el bar, o es solo cosa mía, pero lo que no sabía era que esto solo era el comienzo del punto que cambiaría mi vida.

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