Les digo que estaba demasiado ciego, hasta el amor de hermanos no te hace ver claramente como son las personas que amas ¿Amo tanto a Gustav que no noté nada de lo que ahora puedo ver? Creo que eso fue lo que me pasó...
Algunos guardias trajeron las mantas que habíamos estado usando para sentarnos en el pasto y con ellas me había cubierto Ailsa, mientras Gustav me preguntaba hipócritamente que si estaba bien, les digo que hasta el tono de su voz que en mi primera vida me sonó tan angustiado, ahora sonaba así fingido...
Al llegar al palacio me llevaron a mis aposentos dónde ya se encontraba el médico real, que después de haberme bañado, cambiado, revisarme y decir que todo estaba bien conmigo salió del cuarto...
- Ya que todo está bien y solo fue un pequeño susto, me retiro - Dijo tan a borde y disminuyendo el asunto Gustav, para luego también retirarse
- Yo también me voy Jordan, tengo que ir a coordinar la guardia real - Una nerviosa Ailsa comentó abriendo la puerta y saliendo, me pareció tan adorable... Ahora la miraba con otros ojos y definitivamente la quiero como algo más que amigos... Pero aún no, primero debo hacer lo de mis hermanos...
Al quedarme completamente solo, ahí acostado en mi cama, comencé a rememorar todo, primero tenía que actuar e investigar rápido, todo tenía que hacerlo discretamente ya que no sabía si mi hermano tenía espías o aliados aquí, eso no lo había mencionado en sus confesión, lo único claro era que Mòrag definitivamente estaba con él desde ahora, esa mujer también me las pagaría...
Descansé un rato, de verdad que la situación me había provocado dolor de cabeza, estar razonando los sucesos, trazando un plan para evitar cada uno, etcétera.
Más o menos dos horas después fui a ver a Serguei...
Al entrar al cuarto lo ví dormido, estaba tan demacrado y dolorido, sus pómulos hundidos eran los que me daban pauta no solo a ver su dolor por como se le contraían, sino también la delgadez con la que ya se encontraba por no poder comer bien, aún no estaba tan crítico, su condición empeoraba después de sucederme el trono, que ocurría dentro de un mes más o menos... Dolía demasiado, pero una esperanza en mi decía que aún podía hacer algo para que su muerte no pasara ahora, le dejé un beso e su frente...
Y con eso en mente salí de ahí, dirigiéndome a la biblioteca, comencé a revisar los libros sobre venenos, todo de manera discreta, no quería que alguien me viera haciendo esto y le avisará a mi hermano, después de una semana encontré lo que buscaba "Ipsion" un veneno casi indetectable, bastante raro y escaso, lo cual me hacía preguntarme cómo caraj*s lo conocía y lo había conseguido mi hermano, en fin, este veneno al ser administrado de manera contínua provocaba en el sujeto mareos, náuseas, debilidad, desmayos y ya más avanzado el daño dejaba imposibilitado al sujeto, sin poder moverse e incluso hablar, ya que degeneraba el cuerpo y cuerdas vocales, finalmente la inevitable muerte... El antídoto una hierba llamada "Capsium" también rara de conseguir, pero no imposible...
Puse manos a la obra, llamé lo más oculto posible al médico real, le hice leer el libro y le ordené hacer la prueba específica que lo detectaba, saliendo positiva, teniendo esa prueba se buscó el antídoto y también de inmediato Ailsa movilizó a todos los guardias de la manera más prudente que se pudo, para revisar las alcobas de todos los que éramos cercanos a mi hermano, servidumbre y familiares, encontrando obviamente el veneno en el cuarto de Gustav...
Pero ya era demasiado tarde para Serguei, el veneno había sido administrado por tanto tiempo que a pesar de haber conseguido y dado el antídoto, mi amado hermano mayor murió casi al mismo tiempo que en mi otra vida, lloré amargamente por segunda vez su pérdida, al regresar un poco antes como les comentaba tenía esperanza, una que fue pisoteada vilmente...
Nuevamente fui investido con esa corona, como imaginarán también fue repetir esa escena dónde mi hermano sin fuerzas me transmitía el título, de nuevo ese dolor de verlo encorvado, siendo ayudado para levantarse del trono, poniendo con sus manos temblorosas la corona en mi cabeza y diciendo entrecortadamente toda la ceremonia protocolar, la única diferencia es que ahora tenía al culpable del dolor de ambos en un calabozo siendo castigado y torturado por su crímen...
Serguei murió sin saber quién fue el que lo dejo en ese estado, estuvo muy difícil, más cuando preguntaba por Gustav, pero no tuve el valor de decirle nada y les prohibí a los demás hacerlo...
Me había propuesto dejar en manos de Ailsa el castigo de Gustav, yo no quería verlo, estaba tan enojado con él, tan decepcionado de que por su ambición haya llegado a incluso provocar la muerte de nuestro hermano... Sin embargo, un día entre a esos calabozos, encontrándomelo en un charco de su propia sangre y orina, encadenado de los pies al suelo de esa mazmorra, la cabeza gacha y con las claras marcas en su espalda de los azotes que le daban, debo decir que una parte de mí se compadeció, seguía siendo mi hermano, con el cual crecí, jugué y aún amaba, pero eso se me pasó rápido al notar que al verme comenzaba a reírse de manera siniestra, resonando por toda la estancia, haciendo que me estremeciera, pues no esperaba está reacción después de la tortura a la que se veía estaba siendo sometido, mirando con horror a esta persona, ese no era mi hermano, ese monstruo me había arrebatado a las personas más importantes de mis vidas... A una la había asesinado vilmente y a la otra parecía haberla suplantado, ya que éste frente a mí no podía ser Gustav ¿O sí?
Con el dolor a flor de piel y sin poder soportarlo más grité y le pregunté:
- ¡Porque Gustav, porque le hiciste esto a Serguei, era tu hermano, nuestro hermano mayor! ¡¿Es que acaso no lo amabas?!
Otro carcajada resonó, para luego responder:
- ¿Tú me preguntas porqué? ¿No es obvio? El poder, hermanito, el poder absoluto los todo, pero el primogénito es el que lo recibe y al no estar éste es para el segundo, pero tenía que hacerme eso, tenía que dejártelo ¡Porqué! Y ahora no sé cómo, pero te diste cuenta de lo que le hice dejándome de nuevo sin nada ¡No es justo! Yo soy el mayor ahora ¡Se supone que esa corona debía ser mía!
Gritó con ese resentimiento a flor de piel, resonando dolorosamente en mi corazón... Cómo podía ser posible que las ganas de tener esa corona le llevara a hacer tan cruel y ruin acto, nuestro hermano estaba enterrado y muerto por segunda ocasión, solo por las ansias de poder de Gustav y mi dolor estaba siendo tan grande en este momento que solo deseaba que el causante del mismo sufriera mucho más y se retorciera del dolor cada día por el resto de su vida... Y me encargaría que así fuera...
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 56 Episodes
Comments
Rosa Tejeda
ojalá se muera ese monstruo...y mujer nunca llegue a ver al rey !!! son malos!!!
2023-05-22
3