MAS DUDAS

LAVINIA

Todo se volvió silencioso de golpe, solo se escucha el bombear de

sus corazones y sus respiraciones aceleradas, la última vez que vi a este

hombre era mucho más joven, apenas se había convertido en hombre, ahora verlo

tan anciano, se me hace un poco extraño, está próximo a morir, ~papa ¿estás

bien?~ le pregunta un hombre, que al parecer es su hijo, lo miro, tuvo

descendencia, que interesante, debió encontrar a su mate, la última vez que lo

vi, le agradecí la ayuda y quede debiéndole un favor, él me dijo que empezaría

a buscar su pareja destinada y al parecer tuvo éxito, su hijo parece ya entrando

a la vejez, jum, dejo de verlo, vuelvo la vista al anciano, hago una

reverencia, me volteo, regreso a mi forma anterior y me dirijo a la habitación

del alfa, alguien me toma por el brazo con fuerza, se quién es por lo que me

detengo, ~¿QUE ERES? ~déjalo que entre, él puede salvar a mi nieto~ su hijo me

suelta, sin perder más tiempo entro a la habitación cerrando con seguro la puerta,

el jefe esta tendido en la cama, muy pálido, sus pulsaciones son muy bajas y

lentas, me acerco, clavo una garra en mi corazón la sangre comienza a brotar,

tomo el vaso que está en la mesa de al lado, lo lleno de mi sangre, saco la

garra y la herida cierra rápidamente, levanto la cabeza del alfa, le doy a

beber mi sangre, es la única forma de sanarlo, dando mi sangre voluntariamente,

porque si fuera a la fuerza, la reacción seria como darle acido, sus heridas

sanan rápidamente, el color vuelve de inmediato a su rostro, su corazón late rápido

y vigoroso, su respiración se normaliza, ya está, me dirijo a la puerta, salgo

sin más, afuera hay más personas que cuando entre, también está la loba que fue

al calabozo, ~maldito miserable que le has hecho a mi alfa, lo pagaras con

sangre~ se transforma y se lanza con sus fauces bien abiertas, me alisto para

detenerla, tratando de no dañarla, pero un gran cuerpo se interpone, el alfa

suelta un gruñido que parece asustar a los demás, la loba vuelve a su forma

humana completamente desnuda se lanza sobre el jefe, parece que van a copular

por lo que me retiro a la cocina, antes de que me manden al calabozo, puedo

comer como agujero negro por que no siento el, como se llama, placer de saciedad,

en la cocina no hay nadie, por lo que me dirijo a la nevera, saco un pollo

entero, lo preparo guisado, con ensalada y jugo, es lo más rápido que puedo

hacer, mientras como trato de hacerlo rápido, necesito silencio mis oídos están

sangrando por tantos gritos y ruido, si no encuentro silencio, quedare sorda

dos días, eso no me gusta, porque los otros sentidos se activan el doble,

cuando termino, lavo lo que ensucie y salgo al patio trasero, corro para

alejarme lo más posible del bullicioso lugar, cuando miro estoy en un terreno

plano un poco despejado de árboles, silencio, no total pero en menor cantidad,

me reviso, todavía sangran, me quedare aquí esta noche, aunque pensándolo bien,

el jefe no me venció, por lo que soy libre de irme, mañana volveré solo a

reportar mi partida.

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