Tranquila

Camino a la cafetería vi que Hyce estaba muy serio así que decidí hacer conversación y cuéntame siento que ya sabias que me ibas a ver de nuevo.

_Mmm fue solo un presentimiento y la verdad me alegra montones que verte y saber que ahora estás trabajando para mí. - ¡En serio eso sientes!

_Si la verdad me dejaste una buena impresión, - que alegría la verdad me preocupe cuando te dije que me subí a tu auto por que no tenia dinero jijij

Conforme íbamos avanzando el semblante cambio y llegamos a la cafetería.

Un hermoso lugar parecía sacado de un libro de fantasía, la entrada era un portón con guirnaldas y flores moradas, calle de lastre, era una típica casa de los años 20 tipo americana, al entrar nos recibió una muchacha muy simpática, - mesa para dos o esperan más personas, _para dos señorita.

Al entrar las paredes tenían páginas de libros y imagines de cuentos, habían flores y velas por varios lados, literal sentías que habías entrado en la casa de un hada.

Buscamos una mesa la cual tenía vista al jardín y era exclusiva para dos personas, al mirar el menú pude deleitar varios platillo desde entradas hasta postres, varios estilos de café y té, jijiji hasta incluía cómoda estilo asiática.

Me pedí una resposteria salada y un café con leche, el pidió casi lo mismo, cuéntame me dijo Hyce que te hizo buscar trabajo, - pues creo que es hora de buscar mi camino y encontrar quien soy, estoy desidida a salir adelante yo sola.

Creo que al decir eso mi cara no lo convenció porque me dijo suena a que te ves tu sola y quiere salir huyendo.

Esas palabras hicieron mi corazón estrujar, pero alce la vista y dije si la verdad quiero demostrar que yo valgo y puedo todo lo que me venga por delante.

Mientras me perdía en el sabor de mi comida y café, logré sentir un sentimiento de alegría y paz que no tenía desde hace mucho, y por un leve momento me sentí libre.

Disculpa voy al tocador, al caminar vi que habían muchas parejas, grupos y personas mayores todos hablaban y reían de manera pacífica parecían estar razonando y creyendo en su existencia.

Antes de llegar al tocador, me tope con una señora y la ayude a subir el escalón que le faltaba de la escalera, al tocarla ella me miró sonrió y me dijo tanta belleza y poder en un cuerpo tan frágil ocupa de un cuidado increíble y de una pareja muy fuerte.

Quedé en shock y al principio no capte sus palabras, la verdad era la primera ves que alguien me decía algo así después de ayudarla, entre en el tocador y al mojarme la cara y alzar la vista creí ver un destello y una risita detrás de mí.