CAPÍTULO 10

Fred ese mismo día se mudó a la mansión, tomó uno de los cuartos de servicio, ordenó su ropa y comenzó a trabajar en el jardín, afortunadamente había un jardinero muy experimentado y comenzó a enseñarle a Fred todo sobre el cuidado de las plantas y las flores.

Fred tenía miedo, acerca de la actitud del mocoso malcriado, en realidad había visto lo posesivo y celoso que era con su padre, así que esperaba tener unos días muy duros.

Por su parte el Daddy recibió con alegría la noticia, al parecer el muchacho le resultó más listo que cualquier otro espía.

Mientras él celebraba su pequeña victoria Fred trataba de no encontrarse con Cerem, pero ya el mocoso lo había detectado y estudiaba cada uno de sus pasos.

Su estrategia de evasión le resultó hasta el fin de semana que Cerem se encontraba aburrido en su habitación y fue al cuarto de juegos y vio un videojuego que solía jugar con su padre, porque debían ser dos jugadores, pero su padre estaba muy ocupado para jugar con él, así que invitaría a cierto jardinero escurridizo.

Cerem salió hacia el jardín y encontró a Fred regando las plantas.

__ Hey tú, acércate _ gritó Cerem

Fred volteó a verlo y tomó una gran bocanada de aire y la soltó antes de responder con una seña de manos.

__¿eres mudo? _ preguntó Cerem, al obtener una seña como respuesta

Fred rodó sus ojos, al parecer el mocoso había elegido molestarlo hoy

__ ¿Qué necesita? _ preguntó tratando de ser respetuoso.

__ Que me acompañes a ver algo, sígueme _ ordenó Cerem haciéndole señas con una mano para perderse por un pasillo y subir por las escaleras que daban hacia las habitaciones principales

__ Ok, _ dijo Cerem, mostrándose tranquilo por fuera, pero ansioso por dentro, no sabe que tendrá en la cabeza este demonio.

Fred soltó la regadera y caminó detrás de él, aunque estaba alerta, pero se relajó al ver que entraron a una habitación de juego y Cerem le señaló una consola de juego, le dijo que tomara uno de los controles, mientras Cerem tomó el otro, Fred se quedó paralizado y avergonzado, nunca había tenido la oportunidad siquiera tocar un control y no sabía cómo jugar.

Cerem, en ese mismo momento entendió lo que pasaba al verlo parado y cabizbajo.

__No te preocupes, yo te enseño, pero no te confíes, jamás serás mejor que yo, Jajaja _ dijo Cerem ocasionando una fuerte carcajada en Fred.

Él decidió darle una oportunidad al mocoso y comenzaron a jugar, era evidente la destreza de Cerem, no le daba tregua a Fred, pero después de una hora, Fred ya había comenzado a entender las estrategias y desde ese momento el juego se hizo más divertido, Cerem enloquecía al ver a Fred convertirse en un rival difícil, hay estuvieron toda la tarde, almorzaron pizzas y siguieron jugando.

Por su parte, Gerald llegó de su trabajo un poco cansado y pensaba tener que lidiar y

consentir un poco a su hijo, por haber tenido que dejarlo solo ese día, porque era sábado y por lo general lo pasaban juntos, pero para sorpresa de Gerald, una gran algarabía se escuchaba arriba, entre carcajadas y gritos de alegrías, él siguió el ruido y confirmó que se oían desde el salón de juegos, así que se apresuró a llegar hasta ahí y encontró a los dos adolescentes reírse y gritar debido a la emoción del juego; Gerald sonrió al ver que su plan había dado resultado, el niño pitbull sería un compañero y un escudo protector para su hijo.

Cuando los adolescentes notaron su presencia, Cerem corrió a los brazos de su padre como un niño pequeño y Fred se sintió avergonzado

__ Lo siento señor _ dijo disculpándose por su abuso de confianza

__ ¿Ah? _ emitió Cerem

__ No te preocupes e incluso, ya que se llevan tan bien, serás el niñero particular de Cerem, jugar con él y mantenerlo entretenido será tu trabajo de ahora en adelante

Fred asintió, pero Cerem se quejó:

__ No padre, mejor que sea mi mano derecha, mi hombre de confianza

Gerald soltó una sonora carcajada y Fred lo acompañó ¿como era posible que este mocoso que estaba sentado acurrucado en las piernas de su padre, hablará de esa manera?, una niñera era lo que necesitaba, además de un biberón y un pañal.

Todos rieron y Cerem comenzó a contarle a su padre todos los detalles de su fantástico día de juego con su mano derecha, Gerald sintió un gran alivió y decidió invitarlos a cenar en un bonito restaurante.

Los chicos fueron corriendo a sus habitaciones y se cambiaron de ropa, ambos optaron por unos jeans y unos suéteres, ya que hacía frío

__ VAMOS POR HAMBURGUESAS _gritó Cerem y Gerald asintió

Llegaron al lugar y Cerem se comportó un poco más independiente, comió toda su hamburguesa sin pretexto y disfrutaron de su compañía.

Luego regresaron a la mansión y se fueron directo a sus habitaciones.

Los días pasaron y ya Fred era uno más de la familia, lo cambiaron a una habitación al lado de Cerem, pero Fred, estaba inquieto, sabía que el Daddy lo tenía vigilado y no había podido escaparse para ver a su tesoro, aunque llamaba al doctor todos los días para saber acerca del estado de salud de su tesoro, estaba triste porque no había ningún cambio, ella seguía como dormida.

Pero a pesar de esa tristeza que ocultaba en su corazón, Fred se sentía muy contento al vivir con los Asaf y ser tratado como el hijo mayor del magnate turco, pero también otra preocupación lo agobiada y se sentía ansioso, ya habían pasado tres meses y el Daddy comenzaba a presionarlo, él había tratado de persuadir a Gerald, para que se fuera de viaje lejos, al menos por un tiempo, pero no ha logrado convencerlo.

Siguieron pasando los días y ya solo faltaban quince días, para vencerse el plazo de los cinco meses del trabajo de espionaje, Fred cada día estaba más tenso, todo este tiempo fue aceptado como parte de la familia e incluso fue adoptado legalmente como Fred Asaf que era su nuevo nombre, Fred estaba conmovido, era tanta la necesidad de compañía y cariño que tenía Cerem que no le importaba compartir con Fred todos los bienes materiales que por derecho le correspondían solo a él

Pero nada era gratis, Gerald había obligado a Fred a seguir estudiando, on Line y tenía profesores particulares para ayudarlo con dudas y complicaciones, pero estaba aprendiendo mucho, tenía que asumir que cualquier negocio, requería de una buena administración para ser exitoso, así que accedió a aprender.

Una mañana el Daddy, citó a Fred en un restaurante cerca de la mansión, al llegar lo saludo efusivamente y lo abrazó

__ Mocoso, pero que bien te sienta la vida de niño rico, pues fíjate hasta estas más guapo _ dijo el Daddy y en ese momento Fred supo que algo andaba mal, él quiso seguirle la corriente, pero el Daddy lo abrazó colocándole un brazo sobre los hombros y susurrándole al oído:

__ Quiero mostrarte algo _ el Daddy lo llevó hasta su auto y lo hizo subirse en el puesto del copiloto, mientras él conducía,

Fred conocía muy bien al Daddy como para saber que debía tomar medidas, en un descuido del Daddy, sacó una bala que tenía en su bolsillo y la guardo en su puño, sabía que lo revisarán así que cuando ya no necesite hablar la meterá en su boca, también tiene una pequeña navaja pegada en su pecho es tan pequeña como la que trae un cortaúñas de bebé, confía que sea indetectable, ya que viste con una camisa y un suéter

Él conocía todos los métodos usados por el Daddy y sabía que lo estaba tratando de traidor y que al final de este día, uno de ellos dos no estará en el mundo de los vivos, pero Fred no planeaba morir ese día, así que pondrá en práctica todos sus conocimientos.

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