CAPÍTULO 7

El doctor entró y me sacó de mis pensamientos, en realidad me había quedado en silencio, acariciando su cabello y disfrutando de la vista de su hermoso rostro, observaba cada detalle, cada peca, cada una de sus pestañas, mientras pensaba en una forma de mantenerla a salvo.

Cerré la puerta y hablé con el doctor, le conté algunas mentiras que se reducían en que necesitaba trasladar a mi hermanita a España, necesitaba tenerla cerca de mi otra nana, para que si fuese necesario, ella apoyará a la nana de mi tesoro.

Pero el doctor me sorprendió diciendo que él estaba en un proceso de divorcio y que si lo necesitaba él podía trasladarse con ella a cualquier parte del mundo, porque no tenía ya nada que hacer en Rusia, al contrario, poner tierra de por medio era su prioridad, cuando le pregunté, si era capaz de atenderla en una casa, que contara con todos los equipos necesarios me dijo que si, que mi hermana no tenía una condición médica que la mantuviese en coma, que ella simplemente no quería despertar, que solo tenía que tener paciencia y mantenerla en buenas condiciones hasta que ella despertara.

Yo hablé con la nana y estuvo de acuerdo conmigo, ella no conocía mi secreto, ella creyó que ese día había comenzado a trabajar en casa de Sebastián como jardinero y por eso estaba ahí.

Afortunadamente, el doctor tenía varios contactos y compramos todos los equipos necesarios en España.

Yo viajé ese día para cerrar el trato de una cabaña bastante aislada de la ciudad, para que mi tesoro, pudiera disfrutar del aire puro y mucha paz y tranquilidad.

Al día siguiente, fui a España, aproveché de visitar a mi nana y a mis hermanas adoptivas y después salí, encontré una cabaña cómoda, tenía seis habitaciones, una terraza, un hermoso jardín, me puse imaginar a mi tesoro corriendo entre más flores, sin pensarlo la compré, recibí todos los equipos médicos y ese mismo día todo estaba instalado y listo para guardar a mi tesoro.

El doctor alquiló un avión médico y ese mismo día mi princesa llegó a su nuevo hogar, el doctor se veía muy feliz y complacido, sobre todo cuando estaba la nana presente, celebraba cada paso que dábamos para tener la excusa de abrazarla, en realidad yo estaría encantado de que se enamoraran, sería una manera de asegurar la atención médica permanente para mi princesa.

Todo estaba listo, solo necesitaban un par de guardianes, muy listos y entrenados, así que tenía trabajo que hacer, porque me enteré de que Centinela está por dar a luz, si así es ya mi pequeña bebé, va a ser madre, así que tendré que entrenar, personalmente a esa camada y de ahí escoger los mejores.

Ya dejando a mi princesa ubicada, estaba un poco más tranquilo, esa noche me quedé con ella, en realidad, no dormí en toda la noche, por la emoción de tenerla a mi lado, aunque ella estaba cómoda en su cama y yo estaba sentado en un sofá al lado, pero para mi era más que suficiente.

Al día siguiente, besé su frente y salí a la sala, converse con la nana, el médico entró y nos explicó, que si mi tesoro no despertaba en una semana, había que empezar a darle terapias de movimiento, a sus músculos superiores e inferiores, pero yo no me sentía cómodo, contratando alguien extraño, sobre todo por nuestra situación de fugitivos por así decirlo.

El doctor se ofreció a enseñarnos a la nana y a mí, pues yo le manifesté mi incomodidad de que él tocará a “mi hermanita” y él aunque expresó que era un profesional, mi negativa fue contundente, él le haría la terapia solo una vez al mes, para supervisar la mejoría y eso estando uno de nosotros presente y la nana lo haría el resto de los días.

Me quedé con mi tesoro, todos mis días de descanso, solo me separaba de ella para asearme y luego regresaba a su lado, me encantaba acariciar su cabello, leerle historias románticas, acariciar sus pies y observarla, la observaba a cada segundo era como si necesitara de su imagen y si presencia para recargar mis energías, o siendo sincero para vivir, en realidad quería disfrutar de su compañía lo más que pudiera, en realidad, mi triste realidad es que cuando despierte, la perderé para siempre.

Mi descanso terminó, recogí mis cosas, dejé mi habitación cerrada y fui a casa de mi nana, hay tenía una fiel amiga que también me extrañaba, Centinela al verme, corrió hacia mí, entrene un rato con ella, jugamos, aproveche de bañarla y me acosté con ella un rato, a acariciarle su barriga, tres cachorros venían en camino, faltaba poco más de un mes para su nacimiento, así que estaré con ella ese día.

Centinela me conocía bien y ella podía sentir mi ansiedad, mi tristeza y me miraba a los ojos, como si buscará de consolarme.

Cené con mi familia y me acosté a dormir, esa noche Centinela durmió conmigo, pero yo extrañaba el aroma de mi dulce ladrona de corazones, pero después de tanto rodar en la cama me quedé dormido.

Me levanté temprano y salí antes de que amaneciera, debía hacer otra vez mi travesía para poder llegar a mi destino, sin que sea rastreado mi origen, después de pasar todo el día, viajando llegué al hotel a las siete de la noche.

Cuando entré a mi habitación, todo estaba revuelto, hasta el colchón fue destrozado con un cuchillo, baje rápidamente a seguridad y me informaron que convenientemente las cámaras de ese piso no funcionaban, pues recogí mis cosas y salí a buscar algo de cenar y me senté en una fonda que está al frente y sonreí al ver que esta tenía una cámara que grababa lo que pasaba en toda esa cuadra.

Con un poco de dinero accedí al video de la última semana, lo envíe a mi teléfono para después revisarlo con calma, salí de ahí y me fui a otro hotel, me di un baño y me acosté y comencé a ver los vídeos de vida semana, hasta que

__ bingo, _ ahí estaba Eusebio con Yoel, hablando en la entrada, Eusebio le da algunas instrucciones y el hombre entra mientras que Eusebio se queda afuera escondido esperándolo, después de casi una hora sale Yoel, niega con la cabeza y se marchan juntos,

Y esa acción se repitió todos los días, así que saqué mi teléfono y llamé a Greco, necesitaba saber si estaba en peligro, si Daddy estaba cazándome o si solo eran celos del marica celoso.

__ ¿Dónde estabas metido, mocoso?

__ De viaje.

__¿qué novedad me tienes?

__ Ninguna, todo está tranquilo, pero el Daddy salió dos días de viaje y le insinuó a Eusebio que había estado contigo, así que debes cuidarte de él o puedes salir lastimado.

__ Humm, entiendo, ok no te preocupes yo lo resuelvo.

__No lo subestimes Freddy

__ Si tranquilo, no te preocupes.

__ Ok, ya debo colgar

__ Cuidate mocoso

Colgué mi teléfono y me recosté en mi almohada, extrañaba a mi tesoro, estaba loco por estar con ella, me quedé dormido y comencé a soñar que abría sus ojos y que yo me perdía en ese hermoso azul y ella me sonreía, mientras me decía cuanto me amaba, mi amor por ella era puro, era limpio, era transparente, pero con una sombra de odio siguiéndolo muy de cerca.

Al día siguiente, me desperté con una sonrisa en mi rostro, me podía imaginar la estúpida expresión que tenía, era una expresión de hombre enamorado.

Me duché, me vestí, limpie y cargué mi arma, hoy estaba dispuesto a quitarme de encima a este maldito marica, yo no necesitaba a alguien, pisándome los talones, mi plan era escaparme al menos tres veces al mes para verla, para que sienta mi presencia y tal vez me deje aunque sea explicarle cuando despierte y me dé la oportunidad de pedir perdón y ser aunque sea su amigo y no podía arriesgarme que este marica con sus celos la descubriera.

Con esos pensamientos llegué a la guarida del Daddy

__ Vaya, vaya, vaya si llegó el nuevo juguete del Daddy

Ese fue el recibimiento de Eusebio, yo solo me paré frente a él y lo vi con el ceño fruncido.

__ No me molestes viejo, no estoy de humor para tus escenas de perra tóxica.

__ ¿Perra tóxica? _ pregunto él Daddy , que venía llegando y soltó la carcajada

Todos comenzaron a reír y Eusebio enloqueció, sacó su arma y me apuntó, yo sin dudarlo le golpeé la mano y su arma cayó al suelo y yo lo apunté con la mía.

__ BASTA _ grito el Daddy y yo retrocedí, bajé mi arma pero sin bajar la guardia.

__Vamos muchacho, sígueme, y tu también perra tóxica, _ dijo burlándose de nuevo

Caminamos hasta su despacho y nos ordenó sentarnos.

__ Muchacho a partir de mañana reanudarás la vigilancia al turco, pero deberás viajar a Turquía, al parecer la esposa del maldito de Asaf murió y no quiere dejar a su hijo solo, así que no viajara en mucho tiempo, pero aún viudo, él sigue siendo una piedra en mi zapato, así que tendrás que esforzarte mucho para aprender su rutina, sales mañana temprano para Turquía ¿Alguna duda?

__ No señor

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