Capitulo 3 Ludmila.

Ámbar a duras penas llegó a su pieza. Se metió en el baño y abrió la ducha . El agua se llenaba de sangre en el sumidero. Tenía un dolor agudo en el vientre, pero lo extraño fue, que cuando el tipo la follaba su vientre se contraía a cada rato y los espasmos le traían placer desconocido.

El deseo había llegado antes, cuando la mano del infeliz, comenzó a acariciarla encontrando y jugando con su centro del placer.

El luego entró de golpe y el dolor fue tan brutal que tuvo que morder su boca para no gritar. Y se quedó quieto y luego empezó a moverse.

Cada movimiento hacia temblar su cuerpo y inexplicablemente comenzaron las contracciones una tras otra trayendo olas de gratificación inmensa. Mientras su mente entraba y salía del caos y la adrenalina que eso le producía, ella tragaba la sangre de sus propios labios.

Quería por Dios que él pare y a la vez, suplicaba en su interior que eso sea eterno. Y cuando el hombre dió los últimos empujones a su cuerpo ella no sabía a qué lugar había llegado dentro suyo, pero el placer que sintió fue demasiado grande y ya se tuvo que levantar porque se desmayaria.

Ámbar recogió su vestido. Se vistió en el pasillo y recorrió apoyada en las paredes hasta su cuarto. Y ahora estaba allí. Sorbiendo sus lágrimas mientras el agua se llevaba su sangre.

_ Ámbar ! Ámbar !-

_ Omar- le dijo con un sollozo. El entró al baño y la miró. Le envolvió en la toalla y le llevó a la cama. Se acostó a su lado y le abrazó fuerte.

_Cuéntame !

Ámbar le contó todo.

_Cuando lo vi en el bar, ya me preocupé. Algo en él me gritaba problemas. Era muy lindo, muy perfecto. Porque tendría que pagar a una mujer ?-

_ El ángel de la muerte , verdad ? Y que te hizo para lastimarte.-

_ Era muy grande y lo hizo con odio ! -dijo apenas Ámbar.

_ Está bien nena. Ya pasó. Te daré un calmante. Hoy no irás a dormir al lado de tu madre. Descansa. Yo te Cuídare !-

Ámbar al otro día tenía la boca hinchada y apenas podía caminar. El hospital le dió una congoja mayor. Margarita había muerto mientras dormía. Su madre se había ido. Todo fue en vano. La plata que traería no cubriría los gastos de su féretro.

_ No te preocupes Ámbar. La señora Ludmila Sáenz pagó los gastos.-dijo el director del hospital.

Ámbar se extrañó que su abuela supiera que ella existía y que su madre estaba muerta.

En el cementerio la vió llegar. La madre del drogadicto de su padre traía un ramo de margaritas para su madre. Había venido en un hermoso coche y dejó las flores sobre la tumba.

_ Ámbar, te espero en mí casa, le dijo..

Ámbar no quería ir, pero Omar la convenció.

_ Es tu abuela. Tiene dinero. Quizá te de trabajo y puedas alquilar un lugar para vivir. Tienes la beca. Podrás estudiar Ámbar. Te acompañaré . Debemos ir.-

En la tarde , llegó a la mansión con Omar.

Ámbar nunca había entrado a la casa de su padre y ese día entró de la mano de su amigo.

Su abuela Ludmila, la esperaba. En una mesita el te y muchas delicias completaban el recibimiento.

_ Siéntate Ámbar , dijo su abuela. Y por favor , invita también a tu novio.-

_ Omar no es mí novio.Es mí amigo, casi mí hermano. Se crió con nosotros -dijo Ámbar.-

_ Bien. Cómo sabes tu padre ha muerto. Cuando volvió a esta casa hice lo imposible para que se recuperara. Incluso le mandé a una clínica en Europa. Allí el se juntó con una mujer. A la que también abandonó por la maldita adicción. Quiero contarte que en Europa tienes un hermano. Tuvo un hijo con esa mujer. He tratado de contactarlo. Pero sin resultado. Es mí nieto, cómo tu.

Buscando los papeles de mí hijo , cuando falleció, descubrí tu existencia y la de Marcos. Estoy vieja y quiero hacer algo por ustedes. Hacer en lo que me queda de vida, lo que mí hijo no hizo.-

_ Ámbar quiere estudiar en la universidad de Quimica, dijo Omar. Es muy buena alumna y hasta obtuvo una beca.-

_ Dime Ámbar. Eso quieres? , dijo su abuela. Te puedo mandar a Europa a estudiar si lo deseas.-

Ámbar recordó los consejos de su madre y aceptó lo que su abuela le ofrecía.

_ Está bien señora. Me gustaría ir a la universidad de Salamanca. Estudiaré. Le informaré de mis progresos.-

_ Okey, niña. Te daré una suma mensual para tus gastos. En España tenemos un departamento. Puedes vivir allí y estudiar. Yo pediré reportes universitarios. E iré a visitarte, pierde cuidado. Ahora los invito a quedarse en esta casa. Mañana hablaremos de temas legales . Descansen.-

Ámbar se acostó en una recamara y cuando la abuela fue a ver, vió a Omar dormido sobre la alfombra, junto a la cama de su nieta.

De inmediato , una idea importante para la vida de ambos se firmó en la mente de Ludmila. Les mandaría a estudiar juntos , el la cuidaría cómo debió cuidarle su padre.

La alegría de los dos era mucha. Viajarían juntos y estudiarían juntos. Omar soñaba con ser chef, y seguro lo conseguiría.

Cuando fue a buscar las cosas de él y de Ámbar, ni se despidió de su padre. No valía la pena. Su padre era un maldito bastardo. Cuánto más lejos se vayan mejor, pensó Omar y así fue. Ambos empezaron pronto una nueva vida en España.

***

Cuando Cristian fue al otro día al bar no encontró a Ámbar. Raúl no quiso decirle ni su nombre. Por más que buscó en otros antros no encontró a su gol**. Pero el recuerdo de esa noche perduró en la mente de Cristian , por mucho tiempo.

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