cap: Nacimiento.

👜👜 Emily Dudamel 👜👜

Comencé mi quinto semestre con tres meses de embarazo ya comenzaba a notarse, en este semestre tenía que dar todo de mí porqué tengo que terminarlo antes de dar a luz el tiempo corre rápido.

El trabajo con mi tía Pili es muy gratificante y los momentos donde no estoy atendiendo a un cliente me la paso tejiendo alguna cosita para mi bebe, todavía me cuesta hacerlo, pero poco a poco he ido haciendo mejor.

Al solo quedarme con una carrera es más el tiempo que puedo concentrarme.

Decidí adelantar algunas materias del próximo semestre y así al tener a mi bebe estar un poco más tranquila.

Los meses transcurren, los encuentros con el miserable desgraciado de Ricardo son pocos al estar estudiando en un área alejada a la de Idiomas no tengo el disgusto de topármelo seguido gracias a Dios.

Ya tengo 6 meses y voy a tener un niño, un príncipe al que voy a enseñarle que con los sentimientos de una mujer no se juega, no quiero que sea como el perro de su padre.

Milagros esta vuelta loca ya se autoproclamó tía y me ha comprado pañales, leche y toallitas como para los primeros meses, varias amigas de mi tía me han regalado ropa, así que mi bebe va a ser muy consentido.

Afortunadamente, mi embarazo ha sido muy tranquilo y feliz, nada de vómitos, ni náuseas lo único es una acidez espantosa y unos cuantos antojos raros como cachapa con atún y sardina con leche condensada, que vomite tan pronto probé.

Por fin después de armar y desarmar varias veces terminé los primeros zapatos tejidos de mi bebe.

Al tomar experiencia en el tejido le he hecho varias cosas más como baberos y gorritos.

En mis clases he adelantado bastante en estos tres meses, pero aún me falta mucho para terminar el semestre los profesores son muy comprensivos y me dan los trabajos adelantados para que yo culmine más rápido.

Sigo trabajando con mi tía, solo estoy de cajera, pues si permanezco mucho de pie me hincho.

Mi familia me visita constantemente y me traen dinero, mis hermanos pelean conmigo para que no trabaje más, pero lo haré hasta donde pueda.

Mi papá es un excelente carpintero, aunque no lo hace muy seguido, sé por mis hermanos que está trabajando en algo especial y me imagino que es.

Otro mes pasa y mi vientre esta más grande, ya nada me entra, pero lejos de sentirme fea o gorda me siento hermosa y bendecida de tener una vida en mi interior, los hijos son una bendición.

He adelantado mucho y los profesores me pudieron en estos los próximos 15 días me quede 2 horas en la tarde, para hacerme los exámenes finales, por tal motivo no estoy trabajando.

Estos 15 días son agotadores en extremo, pues llego a casa y tengo que estudiar mucho para el siguiente examen, además de realizar algún trabajo pendiente, pero sé que valdrá la pena porque voy a descansar un mes antes del nacimiento de mi pequeño.

Termino todos los exámenes con buena calificación, solo resta esperar que los resultados sean publicados y para eso tengo que esperar que el semestre oficialmente acabe.

No regrese a trabajar estoy entrando a los 8 meses y siento voy a explotar, con el tiempo libre he decidido tejer más y le hice el primer peluche a mi bebe un oso en croché.

Mi tía se sorprendió al verlo y me dijo que si podía hiciera varios para venderlos en la tienda.

Fui y compre muchos hilos de diferentes colores y argollas de llaveros, descargue los patrones y comencé a tejer pequeños animalitos para hacer llaveros para que mi tía los venda.

Los llaveros eran adorables y podía hacer uno diario, pase el mes entero entre tejidos.

Mi tía Pili los llevo y el precio era 1 $ por el trabajo que implica hacer cada uno.

Fui a la última consulta médica, para mi sorpresa y la de doctora estaba con 4 cm de dilatación y no había tenido dolores.

Llame a mi tía para que me trajera las cosas porque la doctora me recomendó quedarme, ir y venir en autobús no era conveniente.

Mi tía llamo a mis padres y al poco tiempo estaba en la ciudad.

Milagros también llego al hospital.

Que bebe tan bien portado comentaban las enfermeras ni hace sufrir a la mamá, yo feliz acariciaba mi vientre y le decía que ya quería tenerlo entre mis brazos.

Las horas transcurrieron, caminaba de un lado a otro para acelerar el proceso.

Tenía contracciones cada vez más fuertes, pero eso me daba a entender que mi amado hijo nacería.

Rompí fuente y me asusté tanto que comencé a pedir ayuda.

Una enfermera me ayudo a llevar a la camilla, las contracciones eran cada minuto y llamaron a la doctora que llego corriendo.

El bebe está coronado ya se ve la cabeza, Emily querida cuando te sientas la próxima contracción puja lo más fuerte que puedas, asenti muerta de miedo.

La contracción llego, puja me indico la doctora, puje y nada.

Nuevamente, Emily eres fuerte y ya vas a tener a tu hijo, quiero verlo y besarlo.

Si dije conteniendo mis lágrimas.

Entonces puja linda.

Otra contracción y puje con todas mis fuerzas, sentí un gran alivio y escuche por primera vez el llanto de mi bebe.

Es un niño sano y fuerte, felicidades mama me dijo la doctora colocándolo en mi pecho para que lo besara.

Hola mi amor, soy mama bienvenido mi príncipe que Dios te bendiga.

Una enfermera lo retiro para limpiarlo y vestirlo, mientras que me limpiaban después de expulsar la placenta.

Me pasaron a una habitación donde mi familia me esperaba.

Aquí no hay habitaciones privadas así que estaba en una donde habían dos chicas una embarazada con su embarazo en alto riesgo y la otra con una niña que nació horas antes.

Una vez instalada, me trajeron a mi bebe en su manito traia una pulsera azul con su nombre Oscar Dudamel, peso 3,600 gr talla 52 cm.

Los anáslasis sanguineos estaban bien, a Oscar le colocaron las dos primeras vacunas y a los dos días ya estabamos de alta.

Mi papa y mi tía me llevarían a casa.

Mis hermanos volvieron al campo despúes de verme, no podían estar mucho tiempo lejos.

Al llegar y mi madre y mi abuela me esperaban con una rica sopa de gallina, pues esa es la tradición.

Mi abuela cargo a mi bebe mientras yo comía.

Oscar se durmió despúes de tomar pecho y les dije que iría a acostarlo, solo asintieron, pero se les veía emocionados.

Al abrir la puerta de mi habitación estaba una hermosa cuna para mi bebe, una lágrima de alegría rodo por mi mejilla.

Gracias papito es hermosa.

No hay nada que agradecer es el primer regalo para mi nieto, mi padre me abrazo y me dio un beso en la frente y otro a mi bebe

Podrán haber mil cunas mas lindas y lujosas, pero ninguna hecha con mas amor que esta.

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