Capítulo 13

 Al otro día Nicolas se despertó temprano y fue directo a la cocina donde había escuchado ruidos y risas.

—Buenos días

—Buenos días Nicolas ¿Dormiste bien?

—Sí, aunque fue raro no tener a Fer a mi lado

—Preparé el desayuno, no s si va a gustarte —dijo ella terminado de alimentar a Fernanda

—Todo lo que haces me gusta, gracias.

—Nicolas...

—Dime ¿Qué pasa?

—No, no importa, no era nada relevante. ¿Trabajas hasta tarde hoy?

—Es probable que si ¿Necesitabas algo? Puedo ver si cambio mis horarios, aunque estan algo complicados hoy

—No es necesario, bueno, que tengas un buen día Nicolas. Ah si, saluda a Alex por mí

—¿Se llevaron bien en tan poco tiempo?

—Si, es muy amable, parece buen hombre

—Si tu lo dices

—¿Vendrá hoy?

—¿Quieres que venga? —Preguntó él celoso

—Es lindo tener un amigo con quien hablar

—Me tienes a mí para eso, no creo que sea necesario. —Nicolas mira su celular un segundo y sigue hablando —Uy, que locura, hoy no tengo que ir a trabajar, me puedo quedar contigo tranquilamente.

—¿Qué? —Anna se sorprendió al saber que se quedaría con ella, pero más que parecerle bueno le pareció incómodo, ella aún recordaba lo que había pasado, la rechazó de forma directa y ella había quedado como una zorra.

—¿No te gusta la idea? Puedo ser mejor compañero que Alex

—Fernanda necesita un cambio de pañal, luego nos vemos Nicolas, lo mejor sería que no descuides tu trabajo

—...

 Anna fue rápidamente a la habitación y le cambió el pañal a su hija, no entendía la situación, se sentía perdida, no tenía recuerdos y ese hombre actuaba de manera aún más confusa, parecía quererla por momentos y luego no quería nada con ella... lo único que sabía era que sentía algo por él, todavía no podía distinguir que era ese sentimiento, pero ahí estaba.

—Anna, surgió algo y debo irme rápido, volveré tarde, le dije a Alex que venga contigo, me enteré de que salieron ayer, pueden volver a hacerlo si quieren... solo no te acerques de más, es del tipo mujeriego, aunque sabe que no tiene que meterse contigo

—Entiendo, que tengas un buen día Nicolas

—Gracias, espero lo mismo para ti... podremos salir juntos después.

.

—¿Cómo te sientes Anna?

—Me siento bien doctora, tuve un recuerdo de mi infancia hace poco, pero todo lo demás... aún no recuerdo nada

—Tienes que tomarte tu tiempo Anna, puede ser un proceso largo, que recuerdes algo de tu infancia es una buena señal, poco a poco recordarás. ¿Cómo está Fernanda?

—Por suerte está bien, es una niña muy activa, pero es tan dulce

—Finalmente nos vemos querida, doctora ¿Cómo se encuentra?

—Señora Wahlberg, un placer verla, me encuentro bien

—¿Puedes dejarnos a solas?

—Claro señora, volveré otro día para revisar a la señora.

—¿Cómo estás, Anna? Me contaron lo sucedido

—Me encuentro bien, lamento no reconocerla señora, veo que me conoce.

—Como no conocerte mi niña, todo este tiempo me preguntaba como estabas.

—Lo siento, no recuerdo a nadie

—Mi nombre es Amalia, soy la madre de Nicolas, debo haberte confundido por llegar de repente

—No se preocupe, me gusta recibir visitas

—No me trates de "usted", tratame con confianza

—Está bien, lo haré —En ese momento se escuchó como Fernanda comenzó a llorar por lo que Anna se levantó rápidamente a buscarla seguida por Amalia, quien no había visto a su nieta desde que Anna despertó.

—Esta niña me tiene enamorada, es tan tierna, me recuerda mucho a Nicolas

—Yo también creo que se parece mucho, es increíble, por suerte sacó los mejores rasgos de su padre

—Es una copia de mi hijo

Ambas pasaron toda la tarde juntas y también cenaron, se habían llevado muy bien, Anna creía que se conocían de antes porque la trataba con mucho cariño y Amalia no mencionó que no se habían visto desde hacía demasiado tiempo.

—¿A qué hora llega Nicolas usualmente?

—No es de llegar tarde, pero hoy dijo que no lo esperara, tenía un asunto importante

—Entiendo, le diré que trabaje un poco menos así esta contigo hija. —Anna quedó algo sorprendida por la forma en que la llamó pero sintió una vibra cálida al escucharla.

—Amalia, quiero preguntar algo... si no te molesta

—Claro que no me molesta, dime tranquila

—Nicolas me dijo que no estamos juntos, pero yo siento algo por él aún sin recordarlo, no se bien que es, pero ahí está. ¿Qué salió mal en nuestra relación? ¿Quién la terminó? No entiendo que es lo que pasó entre nosotros, tenemos una hija, él dice que me quiere y yo... no se nada.

—Eso es muy difícil Anna, no puedo decirte eso, no porque no quiera, es solo que simplemente no lo sé, Nicolas no es de hablarme de sus problemas

—¿Nos veíamos enamorados? —Amalia se sentía terrible al ver a esa chica tan confundida, no sabía que decirle, explicarle la situación de que ella misma no quería estar con Nicolas la frustraba, si era cierto que ella sentía algo por su hijo, tal vez le convendría volver a empezar.

—Yo creo que ambos se aman.

—Llegué Annª ¿Madre? ¿Qué haces aquí?

—Vine a visitar a Anna y a mi nieta

—¿Te molestó mucho? —pregunta Nicolas viendo a Anna, por lo que ella niega con la cabeza.

—Bueno, es hora de irme, cuídate muy bien querida —Amalia se despidió de Anna con un abrazo y fue directo hacia la puerta, pero cuando estuvo al lado de su hijo, puso su mano en el hombro de este y le dijo "no la cagues hijo" para luego irse.

—No tienes que recibirla si no quieres, debes estar cansada ¿y Alex?

—Le dije que no viniera, no tenía ganas de salir hoy, ya cenamos, pero si quieres puedo hacerte algo rápido.

—No es necesario, gracias. ¿Cómo está Fer?

—Está bien, pero noté que te extrañó, te estuvo buscando con su mirada, ahora está durmiendo, se pondrá feliz mañana si se despierta contigo.

—También la extrañé, voy a dormir con ella entonces, buenas noches Anna.

—Buenas noches Nicolas.

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